Capitulo 4
1078 Words
Al oírme, el rey Salomón respondió: "Al menos podrás volver y tenerlos, cuidarás de tus nietos hasta que también mueran. Sé que no saldré de aquí jamás, ya que no pedí las almas de mis descendientes prestadas por ser un idiota. Mi única forma de salir de aquí era por amor. Pero esa mujer también me falló".
Yo sonreí y dije: "Ya guarda silencio, deja de hablar, parece que fueras a llorar". Él resopló y se quejó, pero luego guardó silencio.
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Dos meses antes de la frustrada boda de Aixa.
En el viejo Alamut, Gengis Khan llegaba; al ver a Kublai Khan sentado en el trono, lo movió.
Luego dijo: "Mis vacaciones terminaron. Conocí todo el mundo, ya estoy aburrido. En mi camino también conocí a muchas personas; tengo casi un millón de demonios en cuerpos humanos.
El jefe de los sicarios era un idiota, así que lo cambié por un amigo muy loco. Es hora de que el mundo me obedezca".
Kublai Khan resopló y dijo: "Abuelo, si hacemos eso, los Estigmatizados junto a templarios y la liga de asesinos intervendrán. Ellos impiden que el mundo se destruya en guerras tontas.
Si llegamos a invadir un país, ellos intervendrán; hasta tienen un nuevo Estigma en sus filas".
Gengis reía al oírlo y dijo: "Los mataremos a todos, incluido ese nuevo Estigma".
Kublai resopló y respondió: "Abuelo, di mi palabra de que jamás iría contra la familia de Estigma".
Gengis resopló y dijo: "Y eso que él ya está muerto. No es necesario que cumplas con esa tontería".
Kublai resopló y dijo: "Un gran hombre me enseñó que la palabra de los Khan se cumple, y yo seguiré su ejemplo".
Gengis volvió a resoplar y dijo: "Ese hombre es un idiota; lo mataré luego".
Kublai Khan sonrió y dijo: "Ese hombre fuiste tú cuando eras un hombre honorable. Mátame si quieres, no voy a ir contra la familia de Estigma, di mi palabra. Hasta tú estás aquí gracias a que él se sacrificó".
Gengis Khan sonrió y dijo: "Nieto, qué gusto ver que eres un gran descendiente. Tomaré el mundo sin ir contra la familia de Estigma; lo mejor será que se nos unan.
Oí que Estigma tiene una hija con sangre Khan, me casaré con ella. Es la única forma en que sobrevivirán, es hora de buscar ese anillo y liberar más hermanos".
Kublai resopló, pero asintió y dijo: "Ella está con Ragnar; iré por ella y la convenceré".
Gengis se levantó y dijo: "Ella está en Estados Unidos, saludando a su familia; yo mismo iré y veré dónde está el anillo".
Kublai resopló, sabía que no podía hacer nada por mi familia, pero dijo: "Abuelo, Estigma era muy listo; no dejaría el anillo para que lo encuentren tan fácilmente".
"Lo sé, pero tal vez le dijo a alguien dónde está; si fue así, lo sabré", respondió.
Kublai Khan resopló, pero no tenía más opción que obedecer a su abuelo.
Un día después de hablar con Kublai, Gengis Khan llegó a mi antigua mansión en Florida. Esa mansión donde los mejores recuerdos de mí permanecían.
Máx y Jack estaban aquí junto a las chicas; la mansión era enorme y 40 de las habitaciones más lujosas se encontraban aquí. Ellos jamás usaron mi habitación y la de Aixa. Esta siempre fue cuidada y jamás se permitía a nadie dormir allí.
Mientras tenían una vida tranquila y feliz, Máx, Jack, Jade, Alice, Laura y Lourdes.
Convivían aún con todos sus hijos. Wendy estaba de visita aquí, aunque cuando se sintió marginada de niña por Jade, ella la amaba. Así que seguía considerándola una madre y a Jack su tío preferido.
Wendy llegó aquí para celebrar un nuevo embarazo de Jade y Alice. Ellas parecían hacer todo juntas, así que decidieron embarazarse una vez más.
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En el infierno.
Veinte años habían pasado desde mi muerte. Lucifer era un tipo molesto, así que venía a burlarse de mí cada siglo, tiempo del infierno, por cada año que pasaba en la tierra.
Él llegaba diciendo que me dejaría ir, y yo, como idiota, le creí los primeros dos años.
Luego, solo lo hacía enojar diciéndole cuánto Dios lo odiaba, así que nos odiábamos mutuamente.
Salomón era feliz cada siglo, ya que Lucifer y yo lo hacíamos reír con nuestras peleas.
El aniversario número veinte de mi muerte llegaba en la tierra y dos milenios en el infierno.
Lucifer parecía ser un tipo masoquista; él llegaba a pelear conmigo aún sabiendo cuánto yo lo hacía molestar.
Así que llegó nuevamente con sus tonterías y dijo: "Niño sin alma, puedes irte".
Al oírlo, resoplé y dije: "¿Acaso eres idiota? ¿No te cansas de lo mismo cada siglo? Sabes que aunque me visites como un niño bueno, Papá no te perdonará; solo eres basura para él".
Mientras me oía, Lucifer resoplaba. Él quería destruirme, pero dijo: "Esta vez no vine a pelear. Debes irte. Mi hermano se volvió loco, tiene una especie de depresión y quiere que un Serafín llegue a destruirlo todo.
Él se cansó de vagar por la tierra y el infierno, así que piensa casarse y engendrar con una humana".
Al verlo tan serio, Salomón preguntó: "¿Eso es verdad? ¿Él piensa suicidarse y destruirlo todo?"
Lucifer resopló y respondió: "Es verdad. Esta vez no estoy jugando, niño sin alma, puedes irte".
Yo resoplé y respondí: "No. Será mejor que llegue un Serafín y acabe con todo. No pienso vagar por los mundos toda la eternidad".
Lucifer resopló y dijo: "Deberías ir. Pude ver a la mujer que eligió para engendrar. Ella es... ¡Ufff! Qué encanto; tiene un gran cuerpo. Sus pechos no son muy grandes, pero son bastante grandes para mí. Su trasero es increíble y esos labios... por mi padre, las cosas que podrá disfrutar mi hermano con esos labios".
Salomón reía al oírlo. Nosotros no éramos humanos comunes; nuestros sentimientos jamás desaparecieron y teníamos todos los deseos humanos.
Yo resoplaba al oírlo, sabía que me estaba provocando, así que respondí: "Entonces ve con tu hermano y disfruta de esa mujer los diez minutos que se te permiten vagar por la tierra".
Él sonrió y dijo: "Debería hacerlo esa Wendy Foster; vale cada minuto de mi tiempo".
Se imaginarán las carcajadas de Salomón y mi reacción al oírlo.
Yo quería matarlos a los dos allí mismo, así que los insultaba tanto que los ángeles caídos llegaron a reír al verme tan enojado.
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