No entiendo por qué me siento un poco ansiosa, se supone que es un día como cualquier otro.
Tranquila hermanita, voy a estar contigo.
Tampoco es como si le vaya a quitar el protagonismo a tu novia.
No te preocupes, si ella no puede entender que debo acompañarte y apoyarte en tu día especial entonces no es la indicada.
Gracias Bryan, no sé qué haría sin tu apoyo.
Solo respira, saludas y nos vamos a sentar a la mesa principal.
Como si fuera tan fácil con mis amigas.
Mariana rodó los ojos.
Creo que tú no encajas en ese grupo, tus amigas son.... bastante raras.
Jajaja, lo sé, Susana babea por ti, sabías.?
No me interesa ese tipo de chicas, no me refiero al físico, tampoco está tan mal, su personalidad no me agrada, no veo que tenga un futuro prometedor, creo que incluso eligieron la carrera universitaria equivocada.
Lo sé, ya se lo dije, pero te tiene en un pedestal.
Y con respecto a lo que eligieron estudiar no eres el único que piensa así, yo también lo hago pero así las quiero.
Mientras no te desvíen del camino, todo está bien.
A veces siento que eres más como un papá que un hermano.
Jajaja, tal vez.!
Carlo.
Maldición.! Detesto que Mauro me haga este tipo de cosas.
Tenía un bolso de diseñador y un collar para mi hija como regalo para cuando vaya de visita a Italia.
Ya estaba todo envuelto así que no me preocupe por un regalo para esa chica.
Bebí un par de tragos antes de vestirme .
No sé ni para que acepté ir en primer lugar.
Me dí un baño, ni siquiera me tomé el tiempo de quitarme la barba que ya tenía dos días sin cortar.
Algo dentro de mí me dice que no será una noche tan interesante.
Tomé el regalo, las llaves de mi auto y salí directo al hotel donde será la celebración.
De verdad que sí no es algo referente a los negocios no me interesa.
Ya eran las diez y estaba bastante animado, no habían tantos adolescentes como pensé, parecía reunión de adultos así que me relajé un poco más.
Entregué el regalo al chico que estaba en la entrada y caminé directo a la barra.
Un whisky por favor.
Bienvenido señor, en un momento se lo traigo.
No tenía ni la más mínima idea de quién diantres era la cumpleañera, recorrí todo el salón con mi mirada tratando de adivinar pero no tuve éxito.
Al recibir mi trago lo saboree y respiré profundo, maldito Mauro.!
Mariana.
Vamos, es hora de enfrentar la realidad hermanita.
Jajaja, creo que me tomaré esas dos compás de vino, tal vez pueda ambientarme un poco, no crees.?
No abuses del licor, en las mujeres es un peligro.
Lo he visto, así que no tienes que decírmelo.
De acuerdo, entremos.
Mis padres estaban en la entrada recibiendo a los invitados, al verme mi madre casi pega un grito al cielo.
Demonios, mi bebé, qué sucedió contigo.?
Mamá.!
Por qué te vestiste así.?
Bueno, fue el vestido que me regaló mi amiga.
Estoy cuestionandome si son amigas de verdad o quieren enviarte a un night club.
Será la única vez que lo use, de acuerdo.?
Ya qué, ni modo hija.
Saludé a muchos de los invitados, mis dos amigas ya estaban ahí bailando y comiendo.
Me escapé y fui donde ellas.
El vestido en sí no era tan corto pero en la parte frontal si era bastante revelador.
Al llevar zapatos altos mis piernas lucían más largas, podía sentir la mirada penetrante de algunos hombres .
Te ves preciosa y sexi amiga, hoy arrasas.
Será mejor que Leandro se anime a venir o no sabrá de lo que se ha perdido.
No empieces Sussy, ya te dije, no creo que venga, le golpeé el rostro sin querer en la mañana y probablemente ha de tener la cara morada e hinchada por mi culpa.
Se notaba que estaba molesto conmigo.
Bueno amiga, hoy tenemos una misión contigo.
Qué clase de misión.?
Susana y Cinthya se volvieron a ver entre ellas y sonrieron con malicia.
Hoy haremos que disfrutes la noche, te lo pases bien y nos emborrachemos.
No inventes Cinthya, si acaso tomaré una o dos copas de vino.
Bien, si deseas dos copas de vino, serán dos de las más grandes y con el nivel de alcohol más alto.
Están locas chicas.
Susana le sirvió la primer copa de vino.
Vamos Mariana, fondo, fondo, hoy lo pasaremos bien .
Además, nos debes una apuesta, si Leandro no viene debes buscar un chico guapo y ligar con él.
Me tomé la enorme copa de vino la cual estaba llena, sentí mi estómago que se quemaba, no había comido nada por la tarde y es probable que me afecte con el nivel de alcohol que tiene el vino.
Al cabo de una hora me sentía relajada y ambientada, así que me tomé otra totalmente llena.
Estaba flotando, mis padres llegaron a despedirse, no sin antes cortar el pastel y cantar junto a mi familia feliz cumpleaños.
Cumpleaños feliz
Te deseamos a ti
Cumpleaños Mariana
Qué los cumplas feliz.
Yeeehh.!
Pedí mi deseo y apague la velita.
Nos sentamos a comer un trozo de pastel.
Mariana, vamos, es hora de bailar el vals.
Coloque el pastel a un lado y seguí a mi hermano.
Todo a mi alrededor se sentía tan ligero.
Estás ebria.?
Yo.? No para nada hermanito, solo me tomé una copa de vino es todo.
Oye, tu amigo no vendrá a mi fiesta.?
Bryan sonrió a mi pregunta.
Te gusta Leandro.?
A mí.?
No, para nada, es tu mejor amigo, no es así.?
Pensé que vendría.
Jajaja, bien, si tú lo dices.
No vendrá, en verdad le dejaste el rostro morado e hinchado.
Oh.! Dile que lo siento, no fue intencional.
Lo golpeaste dos veces y dices que no fue intencional.?
No empieces Bryan, no miento cuando digo que fue un accidente doble.
De acuerdo, no diré nada más al respecto.
Feliz cumpleaños Mariana, sabes que te amo hermana, sé que a veces sientes que no eres parte de nuestra familia, pero en verdad lo eres, y espero que confíes en mí cuando estés en problemas o necesites ayuda.
Mariana lo abrazó fuerte y asintió.
Lo sé Bryan, siempre confiaré en ti hermano, yo también te amo.
Los aplausos sonaron después del vals, Mariana fue con sus amigas quienes la alentaron a cumplir el reto.
Vamos Mariana, en la barra hay muchos chicos guapos.
Tomó otra copa de vino para tomar impulso, estaba bastante ebria.
Me puse de pié y caminé hacia donde mis pies me llevaran.
Me acerqué a la barra por un trago para disimular que iba con otro objetivo.
No di muchas vueltas que ya que me llamó la atención el hombre a mi lado.
Su hermoso perfil, pestañas largas y gruesas me atraían hasta hacerme perder la razón.
Parecía un poco mayor para mí edad, pero eso no le quitaba lo sumamente apuesto que era.
Me había retocado con el labial rojo que me dió mi amiga.
Según ella porque a los hombres les atrae y denota sensualidad en una mujer.
Algo en lo que soy inexperta, cosa que no le dejaré hacer saber a ningún hombre esta noche.
Jamás en mi vida me había arriesgado tanto, el licor me dió el valor y el impulso para cometer una locura, ya no había vuelta atrás.
Lo que comenzó como un simple reto, me llevaría esta noche a vivir una vida caótica en el futuro.