Capitulo 8.
1213 Words
Bryan no quiso exponer a su hermana así que bajó del auto, al ser figuras públicas no expondría jamás la imagen de una adolescente.
Entró a la farmacia y compró todo un arsenal de anticonceptivos, condones y Píldoras del día después.
Sí su hermana empezó una vida s****l y de casualidad le gustó, probablemente seguiría, no quería ser tío, además, esa conversación con ella aún estaba pendiente, con tantas enfermedades de transmisión s****l no podía tolerar tanta irresponsabilidad de su parte, estaba muy molesto con ella.
Pagó y tomó la bolsa, las chicas que estaban en la farmacia quedaron embobadas, Bryan es un chico alto elegante, bien vestido, con ese olor masculino era inevitable no verlo.
Subió al auto y colocó la bolsa sobre las piernas de su hermana.
Mariana al ver la cantidad de pastillas y condones quedó con la boca abierta.
Qué... qué es todo ésto.?
Después que empiezas, no hay vuelta atrás créeme.
Ahora que eres toda una mujer con vida s****l activa debes cuidarte y por amor a Dios aunque tomes pastillas, que el maldito imbécil use condón.
No tienes ni idea de quién es y dormiste con un hombre que no sabes con cuántas putas se acuesta a la semana.
La chica estaba con náuseas solo de pensarlo.
Él la vió con los ojos llenos de lágrimas.
Mariana quería darse un golpe en la cara por estúpida.
Bryan y si...
Mejor cierra la boca, fuiste irresponsable e ignorante, crees que el sexo es solo llegar, dormir con alguien y ya.?
No Mariana, si no tienes conocimiento alguno podemos ir a una clínica para que una ginecóloga te dé algunas recomendaciones de cómo usar los anticonceptivos y que tú pareja s****l también se proteja.
Sí mamá y papá supieran lo que hiciste estarían decepcionados.
No sigas por favor, tampoco es como si me voy a seguir acostando con él.
Crees que un hombre mayor que vió una oportunidad de oro con una virgen te dejará en paz, y si a ti te gustó qué.?
Me dirás qué no volverás a caer.?
Mariana apretó sus piernas solo recordar la noche de pasión que le dió ese extraño.
En verdad recordaba bastante pero no todo.
Imaginar esos ojos y esas largas pestañas la devolvieron al paraíso.
Sus besos y caricias, hacerla suya de esa forma tan ardiente y...
Sacudió la cabeza para dejar fuera la lujuria de sus pensamientos.
Bryan sabía perfectamente que volvería a caer.
Un hombre maduro que tenía experiencia, no era como si él fuera tan experto, pero sabía muy bien lo que era el sexo.
Las chicas se le ofrecían en bandeja de plata y aunque no era un hijo de puta, no le gustaba involucrar sentimientos en el sexo casual.
Ahora que tenía novia intentaría respetarla hasta que la chica le diera oportunidad de dormir con él.
Bryan condujo a la empresa, tenía mucho trabajo por delante.
Le entregó el auto a su hermana y suspiró antes de cerrar la puerta.
Quédate en casa unos días, mamá y papá te dejaron bajo mi cuidado, que les diré si saben que no lo hice bien.?
No sé a qué hora llegue a casa, ve a comprar algo de comida y duerme.
Más vale que no le vea la cara a tus amiguitas porque te juro que las saco a patadas de la casa.
Mariana respiró profundamente, por qué si su vida era tan buena ayer, se convirtió en un puto desastre por su culpa.?
Ahhh.!
Bien, lo haré y con respecto a mis amigas, les diré que voy a un viaje estas vacaciones.
Ve a casa niña que me volverás loco.
Ahhh, por favor usa ropa decente de ahora en adelante para tus cumpleaños.
Bryan.!
Solo bromeo.!!
Se acercó y se despidió con un beso en la frente.
Mariana se colocó los lentes de sol, condujo a un restaurante Mexicano elegante, no parecía la misma chica de la noche anterior.
Llevaba ropa y zapatos deportivos, lo que usualmente usaba .
Dejó el auto en el estacionamiento y entró.
Tomó asiento en la barra, solo pediría comida así que para qué tomar una mesa.?
Ordenó tacos y nachos.
Se cruzó de brazos sobre la barra y colocó en medio su cabeza mientras esperaba la comida.
Casualmente escuchó voces cerca de su asiento así que no se preocupó en enderezarse.
Oye, te busqué anoche y no te encontré, dónde te metiste.?
Te dije que llegaría a la fiesta un poco tarde.
El hombre sonrió con picardía.
Encontré una chica hermosa y...bueno ya sabes .
Una adolescente de la fiesta.?
Sí, estaba muy hermosa, espero me llame, dejé mi número anotado en un papel, dentro del bolsillo de mi camisa, que por cierto tomó.
Mariana agudizó su oído.
La voz de ese hombre a su lado....
Llevaba el cabello suelto el cual cubría toda su cabeza en la posición que estaba.
Giró un poco su cuello y logró ver a uno de espalda a ella en medio de las hebras de cabello.
El otro no lo conocía, pero podría jurar que el tipo de espalda a ella, era el desconocido con el que durmió...
Crees que te llame.?
No lo sé, todo depende, quisiera creer que sí, me encantó pasar la noche con ella.
Al escucharlo sintió que su intimidad se calentaba.
Esa voz y lo que decía le hacía recordar la noche tan loca que vivieron juntos.
Así que dejó su número.? Se preguntó así misma.
Mordió su labio al recordar, aún podía sentir su parte íntima sensible por todo lo que hicieron .
Y si...
No, no, jamás volveré a repetir una estupidez como esa.
Dime Carlo, al menos sabes el nombre de la chica.?
Por supuesto que lo sé, es Mariana Jiménez a menos que me mintiera.
Mariana tragó grueso, quería llorar ahí mismo.
Mariana..?
Así se llama la hija de los Ford.
Estás seguro.?
Por supuesto, debe ser una casualidad porque tú chica no tiene el apellido Ford, te imaginas lo que Allan sería capaz de hacerte.?
Hmmm, me gusta esa niña, lo creas o no, me dejó como loco.
No quiero detalles.
Jamás te contaría nada parecido Mauro.
Carlo.! Y te haces llamar amigo, no confías en mí.?
Lo hago, más no para que te entrometas en algo privado.
Privado dices.?
Pero si tú...
Cierra la boca Mauro.
Bien, bien .
Mauro levantó las manos en forma de rendición.
Pronto cambiaron de tema y se volvió totalmente de negocios.
Así que su nombre es Carlo.?
Le gustó pasar la noche conmigo.?
Mariana se sentía en una nube, ese hombre era sumamente atractivo, su abdomen marcado y esos brazos fuertes que la sujetaron mientras le hacía un oral.
Maldición.! Por qué sigo pensando en eso.?
La comida estaba lista, tomó su orden y movió su cabello hacia un lado para que no vieran su rostro.
Al ponerse de pie fue tan torpe que su tobillo se dobló y chocó con la espalda de aquel hombre.
Enderezó rápidamente su cuerpo y corrió a la salida cojeando.
Lo siento..!!!
Carlo volvió a ver a la chica, llevaba ropa deportiva.
Esa voz...
Se puso de pie y caminó hacia la salida.
Al llegar solo pudo ver una camioneta de lujo salir chillando llantas.
Sería ella.?
No, imposible tanta casualidad.
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