Pov Izaac
Salimos del aula y vamos a buscar a Owen, para estar todos juntos como siempre, pero de camino lo que vemos nos deja impresionados, Owen y Verónica besándose. Pero yo noto algo, él no la está ni tocando y está tieso, no está en una postura cómoda como que este disfrutando lo que está haciendo, y en eso tengo experiencia. He visto esta situación con mi amigo, muchas veces tiene esa suerte de que muchas solo se le tiran y lo besan y si él no lo espera se queda de piedra mientras asimila lo que pasa. Natasha ve eso y se pone mal y sale corriendo, no me dio tiempo de hablarle de lo que estoy viendo yo, y es que para mí es doloroso, aún siento cosas por ella y ahora está más bella que nunca, duele ver que aunque pasen los años solo tiene ojos para mi mejor amigo, mi hermano.
Veo que Owen reacciona, la separa y le reclama, sé cuando está enojado y veo los gestos de ella, no está feliz, le duele lo que él le dice. Y entiendo eso, Owen puede ser muy crudo cuando una chica hace esas cosas y es que a él le molesta mucho, como ya dije, he visto eso muchas veces. Nos acercamos y estoy por preguntarle algo, pero estos lo atacan, que no ven bien lo que pasa, solo se dejan llevar por cosas que parecen, pero no son, y el idiota soy yo, les falta vida que vivir a estos.
Como se te ocurre hacerle esto a Natasha Owen— le reclama Tami a mi amigo que le pasa esta ciega— eres un imbécil.
¿Cómo pudiste Owen?— le dice Carlos ¿qué les pasa a ellos?— eso no se hace.
Natasha, ¿dónde está ella?— dice mi amigo desesperado— ¿dónde está Natasha?, díganme.
Owen entiende que si hay problemas, ella los vio y es que parece algo que no es, yo conozco a mi amigo.
¿Quién es Natasha?— pregunta Verónica ¿qué hice? ¿En que momento tome la mala decisión de ayudar a su padre?— ¿De quién hablan?
Mi novia —ve a Verónica y le habla molesto y dándole su lugar a Natasha, ven este es él, como pueden desconfiar de Owen— la mujer que amo y a la que acabas de faltarle el respeto al hacer lo que hiciste —nos vuelve a ver desesperado— donde está ella.
Se fue en cuanto vio esa escena, salió corriendo para la entrada— le aclaro y me importa una mierda si alguien se molesta— debe haberse ido, hermano se veía mal, parecía otra cosa.
Todos me ven mal, menos Elaine y Luis, ellos creo que sí observaron bien.
Por qué le dijiste— me reclama Tami, no te metas conmigo niña— no ves lo que estaba haciendo.
Yo ustedes qué putas vieron están ciegos o que mierda —todos se asustan, pero me molesta que piensen mal de él, él ya tuvo suficiente mierda en su vida— no ven que paso lo que siempre le pasa, que llega alguna desubicada y se le tira a besarlo como si el otro estuviera soltero y disponible.
¿Me estás diciendo desubicada a mí?— me dice Verónica ofendida— ¿me estás insultando a mí?
Y como quieres que te llame, dime— me vuelvo a ella molesto— Eso es lo que eres, Owen tiene novia, casi esposa, así de simple como vas a venir después de casi cuatro años a besarlo de la nada, como si su vida estuviera detenida por ti.
Ya me estoy arrepintiendo de lo que hice, en que momento ayude a su padre a trabajar con mi papá otra vez, esto es mi culpa.
Yo solo creí que él me había esperado— me dice muy dolida mierda, esto duele— como yo espere por él.
Luis me pone una mano en el hombro, es el único que sabe que esas palabras a mí me caen como navajas directas al corazón, me matas y yo que hice que vinieras solo para eso, pensé que si veías que he cambiado me verías a mí, no que le arruinarías la vida a mi hermano.
Perdón que me meta Verónica, pero eso que dices no tiene sentido— interviene Luis con la calma que le caracteriza— como podrías dar por hecho que Owen te iba a esperar por tantos años, tengo entendido que él te terminó y te dejo claro que no seguían más, le acabas de hacer un gran daño, cuando se quiere no se daña.
Pero él está con ella, talvez solo por qué yo no estaba— sigue de terca que no vio, Verónica estás mal— talvez si estoy aquí y él ve que no me voy a ir, él quiera que volvamos.
QUE NO Mierda —me jalo el pelo con frustración y luego le apunto con un dedo— Tú no te vas a meter entre ellos. Owen nunca ha sido tan feliz como ahora, desde que conoció a su alma gemela y esa es Natasha y está dispuesto a hacer lo que sea por ella, lo que nunca hizo contigo, abre los ojos. Él no te amó nunca, eran niños, el ama con locura a Natasha y yo no voy a permitir que les hagas daño. Esta vez no dejaré que nadie lo dañe —me acerco a ella muy molesto, pero también dolido— si tengo que hacer que mi padre despida a tu papá otra vez para que dejes en paz a Owen lo haré y me encargaré de que nadie lo contrate aquí cerca.
No me amenaces, que yo no te tengo miedo puto engreído, siempre te has creído el centro del universo y no lo eres, por eso siempre me has desagradado, él va a volver conmigo —le cae una lágrima por su mejilla, que me duele puta duele— yo le recordaré por qué es que estaba conmigo.
Te lo advierto, no te acerques a él, en el pasado fui un idiota que dejo que lo lastimaran e incluso fui parte de los que le hicieron daño— le digo furioso es que, que le pasa— pero ya no, yo lo voy a cuidar y defender, así destroce mi corazón en el proceso, jure no fallarle y no lo haré.
La veo una última vez antes de darme vuelta y me voy. Debo buscar la forma de arreglar lo que acabo de hacer, solo quería que ella me viera, que me amara como yo lo he hecho estos 6 años de mi vida, pero no conté con que ella aún estuviera buscando a Owen y que no lo olvide. Los demás me ven extrañado, no sé en qué momento salieron lágrimas de mis ojos, esto me rompe, una vez más veo que soy una mierda, no soy suficiente para que la mujer de ojos mieles que tanto adoro me vea y me quiera.
¿Estás bien?— me pregunta mi amigo Luis, solo él sabe lo que esto me dolió— ¿cómo te sientes?
No —Digo con la voz quebrada— pero debo arreglar esta mierda aunque me duela.
Dale tiempo a que vea con sus ojos que Owen no es el mismo— me trata de dar esperanzas Luis, pero no las tengo lo sé— y cuanto ama a Natasha, no hagas nada precipitado.
Crees que sus ojos vean la verdad, ella está obsesionada con Owen— digo mientas mi corazón se destroza por dentro— no lo ves.
Saco mi celular y marco a los dos, ninguno contesta, ¿cómo arreglo esto?
Ninguno de los dos contesta— me avisa una vez más Luis— ya lo intenté.
Yo grabe la discusión— dice Carlos que nunca se queda sin hacer algo de respaldo— eso se lo mostraremos mañana a Natasha, ella entenderá.
Como es que Verónica no ve que hizo mal— pregunta ahora si preocupada Tami, ¿ahora sí? —y todos dejamos que Natasha se fuera pensando lo peor.
No nos dio tiempo de decirle nada— es verdad lo que dice Elaine— y tampoco sabíamos que pasaba del todo.
Juzgamos mal a Owen— ahora es que lo vez Tami eres una judas— pero no entiendo por qué lloras Izaac.
Él está enamorado de Verónica— aclara Luis dejando a todos con la boca abierta— desde hace muchos años lo está.
Todos se paran en seco, nadie se esperaba eso y los entiendo, siempre he sido una mierda de hombre, que se acuesta con la que se le pone enfrente y no quiere a nadie, lo que nadie sabe es que solo deseaba olvidarme de ella y nunca pude, no importa con cuantas estuviera, siempre era ella.
Démosles tiempo por hoy, mañana hablamos con ambos— tata de calmarnos Luis aunque el este igual de preocupado— ellos se aman y deben estar muy dolidos para hablar con alguien ahora.
Lejos de sentirme bien, me siento una miserable sanguijuela. Quise hacer algo bueno, arreglando las cosas malas que hice en el pasado y terminé causándole un gran daño a mi amigo. ¿Por qué las cosas no me salen bien? Trato de ser bueno y no sirve siempre la cago, siempre, estoy cansado de ser así, pero esta vez no debo quedarme de brazos cruzados, haré lo que sea necesario, si ella no deja a Owen, yo la alejaré de aquí una vez más.