Capítulo 2: "Por Accidente"

1521 Words
Había caído al lado de Nerea, ella sólo se quejó por el golpe y por otra cosa. —Oye, ¿están bien? —preguntó un chico, cuya voz misteriosa y algo preocupada me sobresalto. Pasé de mirar a Nerea que estaba tirada al lado mío al chico, mis ojos no podían creer lo que veían. Pude notar que mi voz no salía para contestar su pregunta. —Son... son... —comencé a decir al ver quienes eran. —Estamos bien. —dijo Nerea cortando todo el rollo. Sentí que estaba de malas y era por el dolor que sentía. —Sí, soy Lukas. Déjenme ayudarlas, esto fue nuestra culpa. —dijo Lukas Tomlinson, nada más y nada menos que el integrante de la banda The Oasis. Él miró hacia su lado y fulminó con la mirada a nada menos que Lukas y Angus. —Sí, fue nuestra culpa, perdonen. —se disculpó Lukas y estiró su mano para que la tomara después de que él hablara. Tomé su mano para pararme y pude ver que Nerea hacía lo mismo pero con la ayuda de Angus, quien no paraba de mirarla a los ojos. Pude sentir que ella sintió otro poco de dolor, hasta que separa la mirada de Angus. Miró hacia abajo y puso una mano en su cabeza, el dolor había vuelto. —Oye, ¿ella está bien? —preguntó Angus preocupado. La miré y ella me miró, negando con la cabeza. —No. —dije mirando a Lukas. —Vamos, la llevaremos a un hospital. —dijo Lukas tomando a Nerea en sus brazos para llevarla a una camioneta color negra que estaba solo a pocos metros de donde estábamos. No tardamos en llegar. Nerea aún se quejaba de los dolores. Me decía en español que algo ya disminuía, que ya no era tanto. No sabía qué pensar, solo me susurraba cosas al oído en español ya que yo la sujetaba del otro lado. Con ayuda de Lukas sentamos a Nerea en el auto. Zayn estaba sentado del lado de la ventana y Harry a su lado, sólo que estos dos estaban dormidos, muy dormidos. Nerea estaba al lado de Harry y yo estaba al lado de ella. En frente estaba Angus, Lukas y Lukas. Lukas al terminar de subir a Nerea avisó al chofer que manejaba el auto que se dirigiera a un hospital cercano. Tenía una sonrisa de oreja a oreja, Nerea solo me veía de reojo cuando se le iba el dolor pero cuando volvía miraba para abajo. —Toma esto. —dijo Lukas pasándole una botella de agua a Nerea.— Creo que te hará bien un poco. —Gracias. —agradeció ella con una de sus mejores sonrisas. — ¿Ya te sientes mejor? —le pregunté murmurando al mirarla. —Sí, eso creo. —respondió y tomó otro poco de agua. — ¿Y cómo se llaman, chicas? —preguntó Lukas rompiendo la conversación entre Nerea y yo. —Yo me llamo Rocío y ella Nerea. —ella lo miró con una sonrisa. — ¿Son de aquí? Porque si es así, no les creo. —dijo Angus. —No, claro que no. Somos de Argentina. Precisamente ayer llegamos a vivir aquí. —respondí a Angus con una sonrisa. La cual él me respondió con una. —Oh, ¿y hablan español? —preguntó Angus muy emocionado. Yo asentí.— Me gusta. —volvió a decir Angus miró a Nerea. No podía creer que estaba teniendo una conversación con The Oasis, bueno, con la mitad ya que dos estaban dormidos. ¿Por qué dormían tanto? No se despertaban con nada, ni por la conversación que tenía con estos chicos. ¿Era un sueño? No lo creo, estaba despierta y Nerea sonreía como tonta. Al parecer el dolor se le había pasado un poco. —No quiero ser entrometida, pero... —miré a Harry y a Zayn, se veían tan lindos durmiendo. Harry tenía la cabeza apoyada en el hombro de Zayn y él tenía la cabeza apoyada en la cabeza de Harry.— ¿Por qué ellos duermen? Lukas, Angus y Lukas intercambiaron miradas. —Es que anoche salimos a festejar a un club nocturno por haber terminado la gira por Estados Unidos. Y bueno, Harry y Zayn fueron los que más festejaron, tomaron y tomaron. Ellos fueron los que volvieron tarde del club. Harry quejándose y Zayn cantando como todo borracho. —eso me hizo reír—. Y como se acostaron muy tarde y hoy tuvimos que madrugar. Ellos tuvieron una grandiosa idea, dormir un poco en el auto hasta el recorrido de un Starbucks, pero al parecer alargaron la siesta. —dijo Lukas mirando a Harry y Zayn.— Y como ellos no despertaban, salimos a comprarlos yo, Angus y Lukas. A la salida nos encontramos con muchas fans que nos bloqueaban el paso, así que solo se nos ocurrió correr y ahí fue cuando nos chocamos con ustedes. —Descuida. —respondí.— Pero estos dos parecen rocas, no se despiertan con nada. —dije y todos rieron. Nerea comenzó a sacar cosas de su bolso que llevaba, sacó su mapa, lápiz labial, goma de mascar y por último su cámara. Seguía buscando algo pero al parecer no lo encontraba. — ¿Qué buscas? —le pregunté en español. Ella me miró desesperada. —Mi teléfono. —respondió ella preocupada y con los ojos bien grandes. Me respondió en español también. Nos interrumpió Lukas. — ¿Están hablando de algo que no nos quieren decir y es algo malo? Lo pregunto por la cara de... —pensó.— Nerea. —No, no, claro que no. Solo que a Nerea se le perdió algo. —Oh, ¿y qué es? —preguntó Lukas esta vez. —Mi teléfono. —respondió ella cabizbaja. — ¿Es este? —Angus sacó algo de su bolsillo y se lo pasó a Nerea. A Nerea se le iluminaron los ojos al saber que su celular estaba ahí. Además debía de cuidar ese teléfono ya que se lo había comprado acá en Londres. —Sí, sí. ¿Dónde lo encontraste? —preguntó ella emocionada. —Al parecer cuando cayeron, también se cayó tu teléfono y yo lo encontré, además de que tú ibas algo mal también, quizás no te diste cuenta. —respondió Angus. —Gracias. —agradeció ella, casi gritando. Lo cual fue un error ya que el ruido hizo que Harry se moviera y se acomodara mejor, pero en otro lugar. Estaba en el hombro de Nerea. Ella solo se quedó quieta y callada, pero aún no acababa porque Harry se sintió incómodo, así que bajó hasta las piernas de Nerea y se quedó dormido allí. Nerea no se movía por nada del mundo. No sabía qué hacer, sus manos las tenía arriba, las bajó despacio y las puso en su pecho. Lukas, Angus y Lukas reían en susurros. — ¿De qué se ríen? No es gracioso esto. —dijo Nerea fulminándolos con la mirada y sin darse cuenta apoyó una mano en la cabeza de Harry. —Vamos, Nerea. Si te mueres por él. —dije sonriendo. Los chicos rieron y Nerea solo me fulminó con la mirada. Sé que después me mataría por lo que había dicho. —Así que son fans. —Obvio que sí, no somos de otro planeta. Somos fans desde el corazón, amamos su música y los amamos. —respondí con una sonrisa. Ellos sonrieron misteriosos. —Los tres seguimos algo apenados por haberlas chocado, entonces... —Mañana en la noche tenemos un concierto, el último por ahora, ya luego descansamos, pero... —Les queremos regalar dos entradas para el concierto y al backstage, porque de verdad lo sentimos mucho. —dijo por último Lukas, lo cual fue algo raro, ya que Lukas comenzó, le siguió Angus y lo terminó Lukas. Muy raro. Mi cerebro tardó en procesar la información. — ¿Qué? ¿Es en serio? —pregunté emocionada.— ¿Has escuchado eso, Nerea? —la miré y la sonrisa se volvió más grande al ver lo que vi.— Creo que tú también te has acomodado muy bien. Ella alzó la mirada y me sonrió. Nerea bajó de nuevo la mirada para mirar a Harry, quien al parecer le gustaba mucho que le acariciaran el cabello. —Ay, me lo como. —dijo Nerea en voz alta, todos la miramos, luego ella levantó la vista asustada.— Lo he dicho en voz alta, ¿verdad? —ahora me miró a mí y yo asentí aguantándome para no reír, pero los chicos rieron y yo también estallé en risas. Nerea solo sonrió tímida y avergonzada. Harry se movió y Nerea se quedó quieta, luego de que Harry se quedara quieto siguió acariciando su cabello. Y a Harry le gustaba eso ya que sonreía mientras dormía. —Chicos, hemos llegado al hospital. —avisó el chofer. Bajamos del auto todos menos Nerea, Harry y Zayn ya que ellos dormían, pero Nerea no dormía. No se pudo levantar ya que Harry seguía durmiendo en sus piernas.
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