88. Fiesta Liam Acabo de terminar una cirugía y voy saliendo del quirófano, cuando recibo una llamada. Veo el nombre de la persona y una sonrisa aparece en mi rostro. Se trata de una buena amiga. —¡Hola! Llamas justo a tiempo. Estaba pensando en llamarte, quiero invitarte a cenar. La chica sonríe y me dice que le leí el pensamiento. Mientras camino rumbo a mi consultorio, vamos charlando, y sin darme cuenta, choco de frente con Annie. —¡Por Dios! Discúlpame Annie. ¿Te lastimé? –le pregunto y ella niega. Me da una pequeña y dulce sonrisa, de amiga, aclarando. –No te preocupes, yo también venía distraída. –Annie dirige su mirada hacia mi mano, donde tengo el teléfono, y recuerdo que la llamada sigue en curso. —¿Sabes qué? te marco en un rato más para decirte la hora. Ponte