Cualidades

Infierno P.1

Llego al hospital entro a consulta me hacen los mismos estudios de siempre. 

—¿Lilith alguien ha entrado a tu mente en este mes?— su pregunta es un poco rara 

—No sé si se refiere a esto, pero, Azalea uso su cualidad una vez al obligarme a levantarme del sillón hace unas horas, no sabía que podía hacer eso hasta que después me lo dijo, ¿tiene alguna relevancia?— el médico se sienta mira el computador

—Al ser tú, cualquier persona que entre y te fuerce a hacer algo en tu mente es relevante.

—¿Qué trata de decirme? ¿Me paso algo?-

—Cuando hacen eso aparece un destello, la mayoría de las veces suele ser malo, digamos que tu cerebro tiene un campo de protección, si alguien entra y tú no lo dejas tu cerebro lucha, pero tiende a ver una consecuencia, sobre todo si duro mucho, ¿has notado algún cambio?.

No podía dejar de pensar y ¿si me pasa algo malo? Juro que si me pasa algo, espera tengo que contestar, dejara de pensar 

—Fueron como unos 5 segundos, me levante y después tome el control de mi cuerpo, no sé si fue normal, pero Azalea se miraba sorprendida— le digo. —Después de eso, podía saber que alguien venía, como ahora esta llegar la enfermera.

Unos segundos después llega la enfermera le entrega los archivos de la próxima cita y se retira, dándome la razón. 

—Lilith creo que tu cerebro activo una cualidad nueva en ti como un método de defensa.

—¿Cómo?. 

—Anticipas las cosas para que no te obliguen a actuar, dentro de 3 días ven a verme, estudiaré el caso y tus análisis, haré nuevas pruebas para ver si hay algún cambio; sin embargo, si te sientes mal o tienes una crisis como la última vez.

—Tengo que venir de inmediato.

—Sí.

Me entrega los resultados para mi expediente y me abre la puerta para que me retire.

Camino a mi coche y me dirijo  al estacionamiento, bajando las escaleras recuerdo al instante al profesor, aquí fue donde nos vimos la última vez.

Justo antes de bajar el último escalón me siento en él, mi cabeza es un lío, tanto en que pensar y tanto que no puedo hacer, después de tomar un descanso camino al coche, tomo un poco de agua y salgo para la casa.

Casi cuando llego a la salida del estacionamiento una camioneta se mete tapando el paso  freno rápidamente, no me dio tiempo de asustarme porque me entro una rabia tremenda al ver quien se baja de la camioneta, abro la puerta y me bajo enojada.

—¿Qué es lo que te pasa?— le grito —¡Estás mal de la cabeza como se te ocurre hacer eso!. 

Me le quedo mirando esperando una explicación, al ver que no hace nada que solo me mira, me giro y camino al coche.

No pude evitar pensar porque no sentí o presentí que vendría ¿Acaso no tenía una cualidad que hace eso?, abro la puerta y el profesor la empuja para que se cierre. 

—Azalea…  

Lo empujo y trato de abrir la puerta, me agarra de la mano y me jala a su camioneta, el compromiso con ella, las mentiras, todo me lleno de rabia. 

—¡Suéltame! ¡Suéltame!.— le grito tan fuerte como puedo 

Le grito una y otra vez él no decía nada trato de luchar para que no me suba, pero su fuerza me supera. 

Como puede me sube y le pone la alarma mientras que se aleja, trato de buscar una manera de abrir la puerta, pero no encuentro nada, la llave no está, las puertas no tienen seguros manuales.

Y justo cuando pienso que no hay nada más que pueda hacer, se sube a mi carro lo estaciona y regresa, no me gusta, no me gusta esto.

Me siento tan enojada, tengo miedo, no puedo curarme las marcas que me hizo, no usar ninguna de mis cualidades, abre la puerta de la camioneta se sube y antes de que diga algo le tiro un golpe con todas mis fuerzas. 

—Tenemos que hablar a solas— mi coraje se hace más fuerte 

—Sabes que todos me conocen, mis padres me están esperando al igual que mis amigos, déjame ir ya— le ordeno, mi voz sale tan fría, un tono que nunca use con él

Él ignora lo que digo y maneja lo más rápido que la camioneta anda, sigo tratando de curar la marca que dejo, pero no puedo iluminar mi mano ni producir una chispa.

Él para y reconozco el lugar, es el puente, Morningstar puedo ir con él, Adán no puede ir, si corro de alguna forma entraré y me ayudara.

—Lilith lo siento no quise hacer esto, pero  te extraño tanto. 

Se acerca a mí doy un paso atrás, pero me agarra y me besa,  lucho para que pare, esto es demasiado para mí. 

—Basta me lastimas— me tiene agarrada de los brazos, besa mi cuello —Para por favor— le suplico con lágrimas en los ojos y un todo de voz que apenas escucho misma, se aparta 

—Perdón, Azalea me contó que te golpeo, que nos casaremos y que te acostaste con Morningstar— me dice lo último con odio

—¿Y por eso me haces esto? Aun sabiendo cuanto me importas… 

—También me dijo donde estabas y corrí a buscarte, no quería que pasara esto, nunca estuve contigo, en cambio, el sí.

¿Eso es lo que le importa, lo que le interesa? ¿Cuánto más puede doler?

—Te toco donde yo debía, te tuvo entre sus brazos como yo te he deseado por tanto tiempo, se vino en ti como yo quería. Te necesito déjame tener tu cuerpo por última vez, déjame borrar todo rastro de él, antes de que yo le pertenezca a otra— pasa su mano en la cabeza 

—¡Eres un hijo de puta, eres un maldito!, solo me quieres para eso— tal vez me arrepentiré, pero debo de hacerlo —Es una lástima, porque no es con el único que estuve, me cogió otro y la forma en que lo hizo…   

Cuando veo que se acerca a mi corro lo más rápido que puedo solo debo cruzar no pienses solo corre.

Cuando toco el agua se aparta rápidamente y cada paso que doy detrás de mí se vuelve a juntar cerrando ese camino, ese puente que me ayudara a salvarme de él.

Logro ver como Adán persiste y avanza, justo antes de llegar al otro extremo lo veo que sigue avanzando más y más, me paro a recuperar el aliento y vuelvo a correr sin mirar atrás. 

—¡Morningstar, ayúdame!— grito lo más fuerte que puedo.

Mi cuerpo esta débil cada vez más trato de gritar por última vez y me desvanezco, esto se está convirtiendo en un infierno…

Cuando abro los ojos lo veo, sin poder comprender nada.

—¿Morningstar que estoy haciendo aquí?— me siento en la cama y veo mis brazos con marcas moradas ¿Volví a tener sexo rudo?

—Alguien te ataco y de alguna forma llegaste aquí, uno de los vecinos te encontró escucho mi nombre y vine por ti.

—Morningstar.

—Vine por ti y has estado inconsciente por más de 3 horas, ¿qué fue lo que paso? ¿Quién te ataco de esa manera? Dímelo Lilith.

—Yo no recuerdo, salí del médico y camine al estacionamiento— me quedo pensando —Rayos mi mamá, se supone que iría a comer si no llego me matara— ilumino mi mano para curarme pero me detiene 

—Hable con la líder ella viene por ti, déjala que vea las marcas es claro que te atacaron— lo miro  

—Es la primera vez que me pasa algo así, no recuerdo nada de lo que paso— mi mente recuerda las palabras del médico. —Pude hacérmelo yo misma, algo paso en mi cerebro y no sabemos que consecuencias tenga, hasta ahora adquirí una nueva cualidad, pero el doctor mismo dijo que puede hacer algo malo, deja que me sane sí. 

Quita la mano y eso es seña de que lo haga, ilumino mi mano y sano las heridas del lado izquierdo después el derecho 

—Ya llego la líder— le digo —No tarda en entrar a la habitación— se para rápidamente y en segundos entra la líder 

—Lilith cariño que te paso— voltea a mirar a Morningstar y le da un abrazo

—No recuerda que le paso el vecino la encontró como escucho mi nombre me hablo y fui por ella, acaba de despertar— le dice Morningstar tenso

—Salí del médico iba camino al estacionamiento y después aparecí aquí, me curé yo misma las marcas que tenía, líder pude haber sido yo misma la que me hice esto, ¿Le dio lectura a mi historial médico?- se sienta a mi lado y me toma de la mano 

—Lo leí y pido una disculpa por el comportamiento de Azalea, ella nunca actúa así.

—Yo…

—¿Entonces no recuerdas nada?, vamos te llevaré a tu casa, le avisé a tus padres que tienes una reunión conmigo y que te  llevaría a la casa, ¿Estás segura de que estás completamente bien?— pongo mi mano arriba de la suya 

—Así es, me encuentro bien y líder entiendo a Azalea, pero esto no es su culpa, ¿Puede Morningstar ir a la ciudad y estar en la boda de Azalea?, sería un  gran regalo para ella?- la líder me mira

—No sé por qué mi hijo no podría ir, él puede salir, pero no confía en el mismo y vive aquí solo, en ocasiones vienen otros líderes de vacaciones, pero él no sale porque no quiere; sin embargo, a pasado tiempo desde que salió y ahora necesita la aprobación de los líderes para que salga, ya que solo pocos conocen de su existencia y su nombre tanto como el tuyo tienen peso, así que si lo aprueban puede salir bueno y si él quiere.

—Entonces no es que tenga una detención siempre fue él- volteo a mirar a Morningstar y muevo la cabeza, la líder se para y me da la mano para levantarme —Espero verte en la ciudad antes que vaya a la academia de nuevo— le doy un abrazo y me despido de él.

Al llegar a la casa mis padres me reciben y saludan a la líder, yo entro agarro el teléfono de la casa y le marco a Karen. 

—Bebe, no podre ir ¿Podemos vernos mañana? Quiero ir de compras con ustedes así que no me dejen sola— la escucho reír 

—No te preocupes ya es noche y estamos cansados ok nos vemos mañana— suspiro

—Hasta mañana bebe— cuelgo, ceno con mi familia y me voy a dormir.

A la mañana siguiente me despierto con dolor, me levanto para bañarme, y cuando me quito la ropa veo marcas en la cintura, compare mis manos con las marcas y eran más grande que las mías, no me gustaba como me hacían sentir asi sane mis heridas y me di el baño.

—Buen día, mama— le doy un abrazo 

—dormiste bastante, ¿Quieres comer?— me siento 

—Claro que sí, extrañe tu comida— va a la cocina y me sirve un plato de comida —Ma iré a la boda del año, saldré a comprar ropa para la boda, puedes llevarme al médico por el carro, se quedó en el estacionamiento, la líder me entrego las llaves porque las perdí en la reunión.     

—Claro cuando termines de comer vamos por él.

Seguí comiendo después fuimos por el carro, me despedí de mi madre y fui directo al hotel, saco la llave y entro al piso de Karen 

—¡Vamos de shopping!— agito el cristal de mi identificación —Aprovechemos estos privilegios— me miran y se ríen 

—Bebe si hablamos de privilegios Karen gana tiene tarjeta vip— miro fijamente a Sami

—Convencimos a la encargada que nos atendiera por la cantidad de ropa en la mejor tienda—Karen me entrega mi celular 

—¿Ya tienen todo verdad?— pregunta Esme casi asegurando la respuesta.

Al llegar a la zona de centro escucho lo mismo de siempre, las personas hablando de mí, mira es Lilith ya salió donde estaba, Lilith mírala, en eso se acerca Saúl. 

—¿Por qué te miran y hablan de ti de esa manera?— lo miro y sonrió 

—Es por mi nombre tiene poder, es complicado— pasa su mano detrás de su cabeza con confusión.

—Lilith pasa tennos nuevos vestidos, Karen cielo llego tu pedido— me dice la encargada en cuanto entramos a la tienda 

—Lorena tienes que darnos vestidos únicos, es la gran boda, y a él un traje que deje a todas sin aliento— Lorena  mira de pies a cabeza a Saúl, 

—Creo que tengo lo necesario para él, miren un momento, joven acompáñame por favor. 

Saúl la sigue mientras miramos los vestidos, trajes,  minutos después sale Saúl con un esmoquin nova Slim fit claret red 2 o al menos así lo presento Lorena era un color vino mate, una camisa blanca y chaleco en conjunto con el saco, un pantalón n***o y un corbatín n***o.

—Por dios si, se ve guapísimo— comenta Sami

—¿Entonces que opinan?, les gusta, porque yo me siento un rey en esto- Saúl se da una vuelta 

—Lorena lo llevamos todo, también los zapatos—  le dice Karen mientras mira vestida

—Karen, pero si me dieron una tarjeta, puedo pagarlo— le dice Saúl y Karen lo mira fijamente 

—Cariño tu acepta mi regalo que yo gano puntos para mi tarjeta, e igual para ti Luna, y no acepto un no de respuesta— mira fijamente a luna y sube las mano tratando de decir yo no dije nada.

Mientras seguíamos mirando, llega Azalea con el profesor, Adán o Matt, ya no sé quién es, su presencia me incomoda, es duro verlo con ella. 

—Azalea vienes por tu vestido, vamos necesitamos ver si hay detalles, Matt toma asiento con Saúl— Azalea se va con Lorena; sin embargo, el profesor fue directo a mi 

—Lilith ¿podemos hablar?— miro a Karen y me indica que lo acompañé  —Sobre lo  de  ayer—  lo miro perpleja ayer no nos vimos 

—¿Ayer?— le digo confundida —No te he visto desde hace tiempo, ¿De qué hablas?— suspiro y miro a dentro de la tienda 

—Solo perdóname no quería hacer eso, no quería lastimarte.

¿Lastimarme ayer?, entonces yo no me hice esas marcas, no me gusta lo que estoy sintiendo. 

—Lo siento no sé dé qué hablas— le digo intentando sonreír —Lo que paso en el pasado debemos olvidarlo tú estas por casarte así que no podemos ser nada— entro a la tienda y se acerca Saúl

—¿Estás bien? Estás muy pálida— me sostuve de brazo sentía que en cualquier momento mis piernas cederían y me caria 

—¿Saúl, puedes acompañarme a un lugar?, solo tú y yo, te dieron el cristal que es tu identificación¿Lo tienes contigo? 

Abre su cartera y me lo muestra 

—Tienes acceso restringido, ten el mío, el tuyo lo tendrá Sami, más adelante te  explico—  camino hacia las chicas, le entrego el cristal a Sami —Tengo que ir a un lugar con Saúl, y es posible que no lo dejen entrar por su carnet, cuando regrese les diré todo, pero  por favor  si Azalea o el profesor preguntan por mí dile que me fui a mi casa por unas cosas y Saúl fue a ayudarme ok- perplejas me miran 

—Lilith esto tiene que ver con el profesor y la plática que tuvieron verdad. 

Miro a Karen y con la cabeza le digo que si, les entrego la llave del carro y me retiro, Saúl me sigue, cruzo una de las puertas para que nos lleve al sitio más cercano, no sé la clave para que lleguemos directo, al llegar Saúl me mira.

 —Ayer que  les cancele paso algo— me siento cerca de la orilla del río y Saúl me sigue.

No sé por qué siento ese nudo en el estómago y porque siento que estoy   de llorar.

—Al salir del doctor en shock por la noticia que me dio me senté en las escaleras del estacionamiento, recuerdo subir al coche  y cuando desperté estaba al lado del río con un amigo, digamos que solo unas cuantas personas conocen su existencia, me encontraba en su cama— siento un nudo en el estómago, pero tengo que decirle todo 

—¿Te hizo algo dime?— con una mirada triste le doy una sonrisa 

—No, él no es así, me dijo que tenía varias horas inconsciente y que un vecino escucho que le pedía ayuda que grite su nombre Morningstar— le digo —El punto es que tenía marcas en los brazos él decía que alguien me ataco y no me dejo que me sanara, pero al final cedió, el doctor descubrió algo en mi cerebro… 

Adquirí una cualidad nueva en forma de defensa, se esperaba que no causara daño alguno, pero podía pasar cualquier cosa y entonces pensé que yo misma me hice eso tenía que estar ligado con lo del doctor ¿No?. 

Me sane, llego la líder y llegue a mi casa, cuando me bañe tenía más marcas en la cintura eran más grande que mis manos, el problema es que el profesor hace un rato

Llego al hospital entro a consulta me hacen los mismos estudios de siempre. 

—¿Lilith alguien ha entrado a tu mente en este mes?— su pregunta es un poco rara 

—No sé si se refiere a esto, pero, Azalea uso su cualidad una vez al obligarme a levantarme del sillón hace unas horas, no sabía que podía hacer eso hasta que después me lo dijo, ¿tiene alguna relevancia?— el médico se sienta mira el computador

—Al ser tú, cualquier persona que entre y te fuerce a hacer algo en tu mente es relevante.

—¿Qué trata de decirme? ¿Me paso algo?-

—Cuando hacen eso aparece un destello, la mayoría de las veces suele ser malo, digamos que tu cerebro tiene un campo de protección, si alguien entra y tú no lo dejas tu cerebro lucha, pero tiende a ver una consecuencia, sobre todo si duro mucho, ¿has notado algún cambio?.

No podía dejar de pensar y ¿si me pasa algo malo? Juro que si me pasa algo, espera tengo que contestar, dejara de pensar 

—Fueron como unos 5 segundos, me levante y después tome el control de mi cuerpo, no sé si fue normal, pero Azalea se miraba sorprendida— le digo. —Después de eso, podía saber que alguien venía, como ahora esta llegar la enfermera.

Unos segundos después llega la enfermera le entrega los archivos de la próxima cita y se retira, dándome la razón. 

—Lilith creo que tu cerebro activo una cualidad nueva en ti como un método de defensa.

—¿Cómo?. 

—Anticipas las cosas para que no te obliguen a actuar, dentro de 3 días ven a verme, estudiaré el caso y tus análisis, haré nuevas pruebas para ver si hay algún cambio; sin embargo, si te sientes mal o tienes una crisis como la última vez.

—Tengo que venir de inmediato.

—Sí.

Me entrega los resultados para mi expediente y me abre la puerta para que me retire.

Camino a mi coche y me dirijo  al estacionamiento, bajando las escaleras recuerdo al instante al profesor, aquí fue donde nos vimos la última vez.

Justo antes de bajar el último escalón me siento en él, mi cabeza es un lío, tanto en que pensar y tanto que no puedo hacer, después de tomar un descanso camino al coche, tomo un poco de agua y salgo para la casa.

Casi cuando llego a la salida del estacionamiento una camioneta se mete tapando el paso  freno rápidamente, no me dio tiempo de asustarme porque me entro una rabia tremenda al ver quien se baja de la camioneta, abro la puerta y me bajo enojada.

—¿Qué es lo que te pasa?— le grito —¡Estás mal de la cabeza como se te ocurre hacer eso!. 

Me le quedo mirando esperando una explicación, al ver que no hace nada que solo me mira, me giro y camino al coche.

No pude evitar pensar porque no sentí o presentí que vendría ¿Acaso no tenía una cualidad que hace eso?, abro la puerta y el profesor la empuja para que se cierre. 

—Azalea…  

Lo empujo y trato de abrir la puerta, me agarra de la mano y me jala a su camioneta, el compromiso con ella, las mentiras, todo me lleno de rabia. 

—¡Suéltame! ¡Suéltame!.— le grito tan fuerte como puedo 

Le grito una y otra vez él no decía nada trato de luchar para que no me suba, pero su fuerza me supera. 

Como puede me sube y le pone la alarma mientras que se aleja, trato de buscar una manera de abrir la puerta, pero no encuentro nada, la llave no está, las puertas no tienen seguros manuales.

Y justo cuando pienso que no hay nada más que pueda hacer, se sube a mi carro lo estaciona y regresa, no me gusta, no me gusta esto.

Me siento tan enojada, tengo miedo, no puedo curarme las marcas que me hizo, no usar ninguna de mis cualidades, abre la puerta de la camioneta se sube y antes de que diga algo le tiro un golpe con todas mis fuerzas. 

—Tenemos que hablar a solas— mi coraje se hace más fuerte 

—Sabes que todos me conocen, mis padres me están esperando al igual que mis amigos, déjame ir ya— le ordeno, mi voz sale tan fría, un tono que nunca use con él

Él ignora lo que digo y maneja lo más rápido que la camioneta anda, sigo tratando de curar la marca que dejo, pero no puedo iluminar mi mano ni producir una chispa.

Él para y reconozco el lugar, es el puente, Morningstar puedo ir con él, Adán no puede ir, si corro de alguna forma entraré y me ayudara.

—Lilith lo siento no quise hacer esto, pero  te extraño tanto. 

Se acerca a mí doy un paso atrás, pero me agarra y me besa,  lucho para que pare, esto es demasiado para mí. 

—Basta me lastimas— me tiene agarrada de los brazos, besa mi cuello —Para por favor— le suplico con lágrimas en los ojos y un todo de voz que apenas escucho misma, se aparta 

—Perdón, Azalea me contó que te golpeo, que nos casaremos y que te acostaste con Morningstar— me dice lo último con odio

—¿Y por eso me haces esto? Aun sabiendo cuanto me importas… 

—También me dijo donde estabas y corrí a buscarte, no quería que pasara esto, nunca estuve contigo, en cambio, el sí.

¿Eso es lo que le importa, lo que le interesa? ¿Cuánto más puede doler?

—Te toco donde yo debía, te tuvo entre sus brazos como yo te he deseado por tanto tiempo, se vino en ti como yo quería. Te necesito déjame tener tu cuerpo por última vez, déjame borrar todo rastro de él, antes de que yo le pertenezca a otra— pasa su mano en la cabeza 

—¡Eres un hijo de puta, eres un maldito!, solo me quieres para eso— tal vez me arrepentiré, pero debo de hacerlo —Es una lástima, porque no es con el único que estuve, me cogió otro y la forma en que lo hizo…   

Cuando veo que se acerca a mi corro lo más rápido que puedo solo debo cruzar no pienses solo corre.

Cuando toco el agua se aparta rápidamente y cada paso que doy detrás de mí se vuelve a juntar cerrando ese camino, ese puente que me ayudara a salvarme de él.

Logro ver como Adán persiste y avanza, justo antes de llegar al otro extremo lo veo que sigue avanzando más y más, me paro a recuperar el aliento y vuelvo a correr sin mirar atrás. 

—¡Morningstar, ayúdame!— grito lo más fuerte que puedo.

Mi cuerpo esta débil cada vez más trato de gritar por última vez y me desvanezco, esto se está convirtiendo en un infierno…

Cuando abro los ojos lo veo, sin poder comprender nada.

—¿Morningstar que estoy haciendo aquí?— me siento en la cama y veo mis brazos con marcas moradas ¿Volví a tener sexo rudo?

—Alguien te ataco y de alguna forma llegaste aquí, uno de los vecinos te encontró escucho mi nombre y vine por ti.

—Morningstar.

—Vine por ti y has estado inconsciente por más de 3 horas, ¿qué fue lo que paso? ¿Quién te ataco de esa manera? Dímelo Lilith.

—Yo no recuerdo, salí del médico y camine al estacionamiento— me quedo pensando —Rayos mi mamá, se supone que iría a comer si no llego me matara— ilumino mi mano para curarme pero me detiene 

—Hable con la líder ella viene por ti, déjala que vea las marcas es claro que te atacaron— lo miro  

—Es la primera vez que me pasa algo así, no recuerdo nada de lo que paso— mi mente recuerda las palabras del médico. —Pude hacérmelo yo misma, algo paso en mi cerebro y no sabemos que consecuencias tenga, hasta ahora adquirí una nueva cualidad, pero el doctor mismo dijo que puede hacer algo malo, deja que me sane sí. 

Quita la mano y eso es seña de que lo haga, ilumino mi mano y sano las heridas del lado izquierdo después el derecho 

—Ya llego la líder— le digo —No tarda en entrar a la habitación— se para rápidamente y en segundos entra la líder 

—Lilith cariño que te paso— voltea a mirar a Morningstar y le da un abrazo

—No recuerda que le paso el vecino la encontró como escucho mi nombre me hablo y fui por ella, acaba de despertar— le dice Morningstar tenso

—Salí del médico iba camino al estacionamiento y después aparecí aquí, me curé yo misma las marcas que tenía, líder pude haber sido yo misma la que me hice esto, ¿Le dio lectura a mi historial médico?- se sienta a mi lado y me toma de la mano 

—Lo leí y pido una disculpa por el comportamiento de Azalea, ella nunca actúa así.

—Yo…

—¿Entonces no recuerdas nada?, vamos te llevaré a tu casa, le avisé a tus padres que tienes una reunión conmigo y que te  llevaría a la casa, ¿Estás segura de que estás completamente bien?— pongo mi mano arriba de la suya 

—Así es, me encuentro bien y líder entiendo a Azalea, pero esto no es su culpa, ¿Puede Morningstar ir a la ciudad y estar en la boda de Azalea?, sería un  gran regalo para ella?- la líder me mira

—No sé por qué mi hijo no podría ir, él puede salir, pero no confía en el mismo y vive aquí solo, en ocasiones vienen otros líderes de vacaciones, pero él no sale porque no quiere; sin embargo, a pasado tiempo desde que salió y ahora necesita la aprobación de los líderes para que salga, ya que solo pocos conocen de su existencia y su nombre tanto como el tuyo tienen peso, así que si lo aprueban puede salir bueno y si él quiere.

—Entonces no es que tenga una detención siempre fue él- volteo a mirar a Morningstar y muevo la cabeza, la líder se para y me da la mano para levantarme —Espero verte en la ciudad antes que vaya a la academia de nuevo— le doy un abrazo y me despido de él.

Al llegar a la casa mis padres me reciben y saludan a la líder, yo entro agarro el teléfono de la casa y le marco a Karen. 

—Bebe, no podre ir ¿Podemos vernos mañana? Quiero ir de compras con ustedes así que no me dejen sola— la escucho reír 

—No te preocupes ya es noche y estamos cansados ok nos vemos mañana— suspiro

—Hasta mañana bebe— cuelgo, ceno con mi familia y me voy a dormir.