Hoy es por tí

La voz de la razón.

La cámara estaba totalmente nueva, como si no le hubiese pasado nada, y esa cámara veía perfectamente hacia mi cama, así que no sabía cómo haría Madeleine para comunicarse conmigo desde el ducto sin gritar.

Ya eran las doce y media de la noche y aun no llegaba, comencé a preocuparme, por mi mente paso el hecho de que tal vez le hicieron algo, lo cual no me extrañaría después de todo lo que vi. Ya estaba desesperándome y pensaba en levantarme de la cama para ir a buscarla por todas partes, pero en ese preciso momento, escuche como una ráfaga de viento que venía por el ducto desde lejos, espere unos segundos más, y luego sentí el aroma de Madeleine, era ella, pero que era lo que planeaba hacer...

Una pequeña brisa acaricio solamente mi oreja y escuche un susurro - Tranquilo, no te asustes soy yo, no te muevas - definitivamente era Madeleine, así que me quede inmóvil e impresionado por la forma en que esa voz llego a mi oído. el aire se comenzó a concentrar justo sobre mi oído, podía sentir como si encerraran mi oreja en un túnel en el que solo podía oír el susurro de Lisa, luego de que termino de acumularse esa presión en mi oreja, podía oír claramente la voz de Madeleine -Espera, solo un poco más, sentirás lo mismo pero en tus boca.

La misma presión comenzó a acumularse en mis labios, se sentía como su mis labios estuviesen sellados en un vació - ¿Me escuchas bien? responde - dijo Madeleine

- S-SI, ¿Qué es esto Madeleine? – Pregunté confundido

- Esto, chico ignorante, no es lo importante por ahora, así que escucha, no tenemos mucho tiempo, falta poco para que me vaya.

- De acuerdo, entonces habla de una vez, ¿Qué tenías que decirme?

- Mira, así están las cosas, nada de lo que ves es real, no te fíes de todo lo que te digan en este lugar, en especial Lisa.

- Pero ella...

- Silencio, te dije que no hay tiempo. Mucho menos para que sigas haciéndote el idiota. Sé que hoy viste cosas que jamás habías visto en este lugar, una Lisa que no conocías, negocios turbios de los cuales no sabías nada, todo eso que viste, hasta ahora, es lo más real que tienes, así que despierta chico. Dijiste que querías respuestas, pues comienza por esto. Revisa el proyecto "machine warrior", No te será muy difícil, este no es un proyecto muy confidencial que se diga, así que podrías encontrarlo entrando desde cualquier computadora del subterráneo, revisa el sello de autenticación y permisologia de este proyecto, es el que está al final en la esquina inferior derecha, el sello es el la figura del dream business con un arco sobre el que tiene grabadas las palabras "in tenebris effectus". Ese es el sello de un proyecto oficial ya puesto en práctica por más de un año. Asegúrate de que los papeles que te dio lisa lo tenga, y veras de lo que hablo.

Luego de que me dijo esas últimas palabras, la presión de aire que había en mis labios y en mi oreja se esfumó sin hacer ningún ruido. No pude dormir en toda la noche. Me quede despierto viendo hacia la pared hasta que se hicieron las cinco am. 

Me levante y me coloque la ropa limpia que tenía en mi armario, era una franela negra con unos blue jeans y unos zapatos deportivos negros. Me cambie intentando comportarme lo más natural posible para no levantar ninguna sospecha. Pensé en ir de inmediato a una de las computadoras de los pasillos, las cuales eran pantallas holográficas en algunas paredes de cada pasillo. Me moría por saber si lo que me decía Madeleine era cierto. Pero no podía hacer algo extraño, debía seguir con mi rutina, así que solo me parre y me fui a la escuela.

Al llegar al salón, estaban todos viéndome con cara de que me querían matar, no podía entender el porqué, yo no les había hecho nada. Pero mi intriga no tardó en ser respondida. Cinco segundos después, Dayane salto por mi espalda y me abrazo por el cuello, fingí sorpresa gire mi rostro por encima de mi hombro izquierdo y justo allí estaban sus labios, casi la beso, pero de inmediato volví a mirar al frente y ella comenzó a reírse.

Al ver a mis compañeros de nuevo, sus rostros habían empeorado, incluso escuche como uno de los muchachos de las últimas filas rompió un lápiz que tenía en su mano. En el salón había un silencio inquietante, casi podía sentir sus auras asesinas. Luego Dayane me tomo por la mano y me saco del salón.

- Ven conmigo, rápido, quiero mostrarte algo – dijo entusiasmada.

- Ookey... - Respondí extrañado

Dayane me llevo al estacionamiento, nos paramos entre todos los autos que estaban allí y me señalo hacia la cornisa, llamó por teléfono…

- AHORA - Exclamo Dayane. Al dar esa orden, descendió una pancarta que tenía no menos de cuatro metros de largo y 3 de ancho, la cual decía: "Feliz cumpleaños Aron, este será tu mejor día del año" y había una foto mía bajándome de mi auto mientras miraba hacia la puerta de la institución. No estaba nada mal a decir verdad, pero aun así, era una foto gigantesca de mí, si eso no era llamar la atención, entonces no sé qué lo era. 

- Gracias Dayane, pero ahora has que la bajen rápido por favor – le dije viéndola fijamente a los ojos y sin titubear.

- Bueeeno bueno, supuse que no te gustaría mucho pero no que te pondrías así. Regrésenla. – dijo por teléfono a quien sea que la estuviese ayudando.

De inmediato comenzó a subir la pancarta.

- Ahora, tengo un mejor regalo para ti, estoy segura de que este si te gustara, seremos solo tú y yo, sé que no te gusta el alboroto.

En realidad ni recordaba que estaba cumpliendo año, y esta era la primera vez que alguien me celebraba de esta manera, era extraño pero me gustaba