Seth continúa con su mirada hacia abajo y hasta, incluso, su propio creador puede escuchar y sentir el temblor de su cuerpo y de su corazón.
Blaire sabe perfectamente cómo es que el nació y cuál fue el motivo de su creación, pero eso no es lo que le aterra, sino el hecho de cómo se puede llegar a tomar las cosas Arden, al recordarle una y otra vez que había expuesto a la pelirroja.
—¿Lo volviste a castigar?— Blaire muerde su labio inferior.
Seth, se mantiene sentado en uno de los cómodos sillones de cuero de la oficina de Hades, mientras que ellos están aún de pie.
Arden sonríe de costado con bastante ironía. —Deberia, se merece cada uno de los castigos por ser un maldito crio.— Bufa.
Ella coloca sus ojos en blanco y toma asiento en uno de los sillones cercanos a los del oscuro, pero
