—¿Viene a ser un medio hermano? ¡Que locura!— Se carajea, irónico. Hakeem mira el paisaje sumamente pensativo. Arden rueda los ojos y bufa. Ambos se encuentran a las afuera de la ciudad, metidos en el bosque, mirando el paisaje desde las montañas. —Algo así, no lo sé, incluso, la palabra me da repulsión.— Se queja suspirando mientras mira a su alrededor. Hakeem asiente en silencio. —¡Maldita loca!— Aprieta sus labios. —¡Jodiendome la existencia aún!— Aprieta sus labios y cierra los ojos. Su amigo aguarda unos minutos antes de responder, sabía perfectamente que la historia entre su madre y él no era la mejor y no quería meter bocadillo para que el demonio mayor enloqueciera. —¿Hablaste con Roath respecto a su esposa?— Cuestiona, intentando derivar el tema hacia otra zona no tan pelig