•Verdad o reto.

2894 Words
Los chicos llegaron, están esperándonos en la sala a que bajemos para ya poder irnos a la playa y pasar la noche. Nuestras mochilas ya estan listas asi que sólo estoy esperando a que Mo vuelva de avisarle a su madre que saldremos. Britney entra en mi habitación casi modelando y da unos giros mostrándome su outfit para esta noche. —Demonios —abro la boca al verla detalladamente. Lleva puesto un vestido rojo con toda su espalda descubierta, es apretado y su escote es delicado pero a la vez sensual, está realmente hermosa. —No me esperes. O bueno si, en la madrugada vengo a dormir con ustedes —asiento tomando mi mochila—. ¿Segura que no quieren ir? —Ve y diviértete, prefiero ir con los chicos. Hago un ademan con mi mano restándole importancia y en cuanto Mo vuelve con el permiso de Susan las tres salimos de mi habitación para irnos cada una a su respectiva salida. Al bajar las escaleras, los tres chicos, se quedan mirando a Britney perplejos, ella, al percatarse de eso, sonríe y empieza a provocarlos con la mirada y una caminata demasiado sensual. Mi hermana ama llamar la atención, si fuera por ella viviría de eso. Pasar desapercibida no es una opción, jamás. —Cuiden a mi hermanita ¿Okay? —posa su mano en el pecho de Noah y este le sonríe un poco intimidado. Una sensación de enojo invade mi cuerpo, Britney no para de hacerse notar con estos tres estúpidos y ellos no dejan de admirarla subiéndole el ego mucho más alto de lo que ya lo tiene. —Son unos idiotas —volteo mis ojos—, dejen de babearse con mi hermana, trío de vírgenes. Los chicos ríen al ver mi cara de enfado y mi querida, hermosa, insoportable hermana se da cuenta que no me da ni la mínima gracia lo que está haciendo. Rápidamente saluda a Fred, Noah y Peter para salir de la casa con las llaves del Jeep en manos. Detesto cuando hace éstas cosas. —No te enfades, tu también estas hermosa —Fred me abraza por los hombros. —¿Te pregunté? —corro su brazo y lo empujo de vuelta a su lugar—. Chicos, ella es Morrel, mi prima. La presento e instantáneamente comenzó a socializar con ellos, les contó un poco sobre su vida y también alguna que otra cosa personal. La playa está a unas tres calles de casa así que decidimos ir caminando, la noche está perfecta, hay una brisa fresca que ayuda a no sufrir tanto el calor endemoniado que hace aquí. —Te enfadaste ¿Cierto? —Noah apoya su brazo en mi hombro y caminamos al mismo ritmo. —Me molesta muchísimo que se estén babeando con ella cuando estoy enfrente, es mi hermana. —¿Es eso o son ataques de celos? —sonríe. ¿Celos? Es obvio que no son celos, es incomodidad, rechazo, asco. Se comportan como si nunca hubieran visto a una mujer dentro de un vestido sensual, con cara y cuerpo de muñequita jugueteando con sus hormonas. Son la descripción exacta de lo que es ser un adolescente inmaduro que piensa con el pene. —No soy celosa —me encojo de hombros. —Si tú lo dices. De todas formas lo siento, al menos yo me comporte como un simio. —Tampoco fuiste un simio, sólo controla tu hormonazo enfrente de mí —bromeo para descontracturar un poco el ambiente. Mo va enfrente caminando junto a Fred y Peter, Noah se adelanta a ellos y yo los observo de atrás. Mi prima se desenvuelve bien, hace bromas, ríe y hasta se puso a contar anécdotas de la loca vida que lleva en New York. Los chicos parecen estar fascinados con los relatos, la escuchan atentamente sin quitarle la vista de encima, me pone feliz tener a Mo con nosotros. —¿Ese es Liam? —Peter señala hacia la playa donde un chico está sentado bebiendo una lata de cerveza. —¿Quién es Liam? —interrogo. El castaño está de espaldas, escuchando música en su celular y mirando las olas. Parece estar concentrado en el horizonte que nos regala una hermosa puesta de sol con el cielo naranja, algunas veces el mar llega a mojar sus pies y parte de sus piernas pero no se hace ningún tipo de problema. Da la sensación de estar en paz consigo mismo, parece estar disfrutando de su soledad, a la orilla del mar bebiendo y cantando. —Liam es mi primo —responde Noah a mi pregunta—, en realidad, el hermano que nunca tuve. A medida que nos vamos acercando nuestras voces llaman su atención, se gira a vernos sonriente poniéndose de píe. —Bro —choca hombros con Fred, con Peter y abraza a Noah—, pensé que no venían. —Fuimos a buscar unas amigas, mira te las presento —Pit nos abraza a Mo y a mi por los hombros con una sonrisa—. La rubia se llama Alai, lo sé, su nombre es demasiado raro y, según Fred, de ñoña. Así que dile Tyson. –Tyson ¿Por qué ese nombre? —me mira confundido. —Porque si la haces enfadar ella desordenara tu cara de un solo puñetazo —Fred se para junto a mi y me señala con su dedo. —Entonces seré lo más amable posible —bromea y me tiende su mano. —¿Liam era tu nombre? —le respondo el apretón de manos y asiente ante mi pregunta. —Y la pelinegra con la vida más loca que puedas imaginar se llama Morrel —Peter presenta a mi prima. —Dime Mo —le sonríe. —Un gusto, soy Liam. Luego de las formalidades y un breve cruce de palabras con el primo de Steven, nos sentamos en la arena tibia para ambientarnos un poco más. Fred nos pasa unas latas de cerveza, también hay sodas y unas limonadas, de mi mochila saco algunos snacks y les comparto a los chicos. —Oigan, falta poco para el primer partido de la temporada ¿No? —Liam conversa con Fred, todos prestamos atención. —Si, vamos contra Frendfurg. Les patearemos el trasero —afirma Peter. —¿Estudias en West High? —le pregunto ya que jamás lo vi en la escuela y sería raro que estudie allí pero jamás se haya sentado siquiera a desayunar en la cafetería con nosotros o cruzarlo en algún pasillo. —La verdad que no, pero si tu estudias ahí podría pedir el cambio de escuela mañana mismo. —me guiña el ojo. Automáticamente mi cara se pone roja, siento un cosquilleo de ansiedad en mi interior a causa de aquel comentario que Liam tiró y dejó flotando en el aire para seguir su conversación con los chicos. Me lo dijo desprevenida y no puedo reaccionar de una forma que no sea ridícula. En mi patético intento de no hacer notar mi nerviosismo aparto mi vista de él y veo a Noah junto a mi bastante serio, sus ojos no se apartan de mi rostro aún acalorado. —Deja de mirarme así, estas asustándome —le lanzo una patata y la atrapa con su boca. —Tu cara pasó de blanca a rojo intenso ¿Cómo quieres que no te mire? —mastica y habla con la boca llena. Podría decir que su mirada pasó de seria a burlona. Liam se percata de las palabras de Steven y rápidamente me mira aguantando una sonrisa. —Hace calor aquí, es solo eso. Nos sostenemos la mirada unos minutos, Steven me hace gestos extraños con su cara a los que simplemente ignoro para no volver a ponerme roja como tomate. [***] La estoy pasando de puta madre, lo juro. Bebimos algunas latas de cervez, estamos ebrios pero no del todo. Peter hizo una pequeña fogata en la arena, comimos chatarra y estuvimos cantando alrededor del fuego canciones variadas, quisimos rapear una de Eminem pero nuestras lenguas se trabaron y terminamos todos tentados de risa ante nuestro fracaso. —¿Jugamos verdad o reto? —propone Fred con cara perversa. —Picante, picante —acota Liam —Yo inicio. Fred ¿Verdad o reto? —Fácil, verdad. —Qué aburrido —me quejó bostezando. —Bien —continúa Liam —¿Cuál es tu fetiche s****l más fuerte? Noah aplaude y Peter comienza a gritar riéndose, todos esperamos con ansias la respuesta de Mars. El sólo suspira mirando al cielo. —Voy a ser sincero, me gustan mucho los disfraces. —Yo si te veo disfrazado de enfermera sexy —acota Liam. Todos nos reímos, inclusive Fred que termina admitiendo que por la anécdota sería capaz de disfrazarse él de enfermera sexy. Esto es genial. —Me toca — Fred trata de calmar sus carcajadas para seguir con el juego—. Steven ¿Verdad o reto? —Reto bebé —todos aplaudimos emocionados, al fin un valiente. La cara de Fred se transforma en la del mismísimo Satanás. —Te reto a que abras tu w******p y le mandes un audio gimiendo como tortuga a la chica con la que estabas hablando hace unos días. —¿La qué me dejó de hablar de la nada? —Noah parece acobardado cuando oye el reto que le propone Fred. Lo piensa un poco pero ante la insistencia de los chicos y el "gallina" que le gritó Mo, toma su teléfono, abre w******p, comienza a grabar un audio y de alguna manera logra que el gemido que emite su boca suene exactamente como el de una tortuga. Me falta el aire por reírme tanto de lo que estoy presenciando, más allá de que el gemido le salga idéntico, las caras que hace Steven son realmente épicas. Me falta el maldito oxígeno. Noah le pregunta que si verdad o reto a Pit y el se anima a un reto. Así que aquí tenemos a Harrison en calzoncillos frente a la fogata y lamentando su mala decisión en este juego de villanos. —Esto se va a poner bueno —aplaude Peter—, Voy yo. Es para ti, Mo. ¿Verdad o reto? —Verdad —responde ella. —¿Cuál ha sido tu peor experiencia s****l? —Oh mierda —Mo ríe y le lanza un pequeño caracol—, veamos déjame pensar. El mes pasado dormí con uno del equipo de voleibol, me hizo ir caminando a su casa, tuvimos relaciones en la habitación de su madre porque la suya era un chiquero. En el medio del acto s****l, la puerta se abre y su padre se nos quedó viendo. Una carcajada se escapa de mi boca imaginando la situación, Noah tiene la mano en su boca queriendo no creer lo que cuenta Mo y los demás se ríen a la par mía. —¿Y qué sucedió? —Liam le pregunta entre risas. —Tuve que salir corriendo de allí cuando el padre llamó a su esposa, ella vino furiosa a querer sacarme de su casa. No la culpo, pero mierda ¿Hacerme correr desnuda, con la ropa en manos y lanzándome agua con una botella de plástico? Eso es muy cruel. —Mo ¿Qué carajos? —a este punto mi cara está roja de tanto reírme. —Bien, es mi turno —mi prima nos mira a todos y se detiene en mi—, pequeña perra ¿Verdad o reto? —Reto, mi señora. Cobardes aquí no —alzo mi lata y ella ríe. Acabo de cavar mi propia tumba y lo sé. —Bien, chica valiente, te pondré una canción y bailarás sensualmente enfrente de estos cuatro chicos sexys —la observo incrédula—. Y si, deberás sacarte la ropa quedando en traje de baño. —¿Qué? Deberían ver mi cara. —Se prendió ésta mierda —Fred aplaude riendo. Miro a todos, acabo de básicamente auto suicidar mi poca dignidad con lo que dije. Vamos no soy ninguna cobarde ¿Pero baile sensual con streep? ¿Enfrente de estos cuatro? Un calor sube por mi cuerpo, están esperando mi respuesta y si digo que no, obviamente, el reto siguiente será mucho peor y más humillante. Conozco bien a la perra de Mo. —¿Y bien, que dices? —Morrel me mira desafiante. Le doy el último trago a mi lata sin dejar de sostener nuestras miradas, lanzo la lata hacia atrás y me pongo de píe. —¿No es suficiente la desnudez de Peter? —lo señalo. —Me siento acosado —responde Harrison tapando sus pezones. Morrel niega con su cabeza y me desafía aún más llamándome cobarde. —Te vas a arrepentir de esto. Pon la maldita canción. —me voy hasta donde están los cuatro chicos y los pongo de pie en una ronda. ¿Esto demasiado arriesgado? Créanme que sí. Walk This Way de Aerosmith suena a todo volumen, toca improvisar y convertirme en una especie de bailarina sensual. Esto es vergonzoso y si no fuera porque estoy casi ebria no lo haría, pero podría ser divertido intentar menear hasta abajo sin caerme en el intento o romperme mi espalda intentando ser sexy. Asi que lo primero que hago es posicionarme en el medio de la ronda, miro fijamente a Fred y me acerco lentamente a su cuello. Sus manos vuelan a mi cintura y muevo mis caderas bajando lentamente sin dejar de mirarlo, una vez debajo de todo me giro y subo lentamente rosando mi trasero con sus piernas. Me percato de que Noah no deja de mirarme fijamente, así que mi siguiente paso es caminar hasta él y colgarme de su cuello, él no se mueve, se queda quieto como una estatua. —¿Eres difícil? —enarco mis cejas desafiante. —Pruébame. Sonrío, tomo sus manos y las apoyo en mi cadera, ninguno de los dos aparta la mirada. Me meneo suave acercando nuestros rostros, manejando sus manos las llevo al botón de mi short y mordiendo mi labio le ordeno que lo desabroche. Lo hace. Me presiono contra él riendo, sin que yo haga nada sus manos se aferran a mi trasero logrando una sensación rara en mí así que las quito rápidamente y las coloco alrededor de mi cuello. Noah ejerce un poco de fuerza en ellas cortándome muy levemente el paso de oxigeno, muerdo su barbilla y viendo que esto lo está excitando me alejo rápidamente. Es divertido pero realmente estoy avergonzada, me arrepentiré de esto seguro. Próxima víctima, Peter. Sus ojos me indican que esto lo pone un poco incómodo, así que solo coloco sus manos al borde de mi blusa y hago que la quite por encima de mi cabeza. Le sonrío plantándole un beso en su mejilla y voy girando hasta Liam que me recibe entre sus brazos, chocando su pecho con mi espalda y respirando en mi oreja. La canción terminó, pero entre risas Mo hace sonar Back in Black de AC/DC así que aprovecho el momento. Me presiono contra el cuerpo de Liam moviéndome de lado a lado muy lento, él pasa sus manos por los costados de mi cintura y va directo al botón de mi short que, previamente, Noah había desabotonado. Estira los bordes de mi parte inferior del traje de baño, juguetea con él sin dejar de respirar agitado en mi cuello. Comienza poco a poco a bajar mi short y cuando éste queda a mitad de mis muslos, Noah, estira mi mano y me arranca de los brazos de Liam. Me mira con sus ojos totalmente cubiertos de deseo pero a la vez enfadados. Lo siguiente que hace es terminar de bajar mi pantalón, me carga sobre sus hombros y comienza a correr conmigo hasta el mar. —¿Qué haces? Suéltame, Steven ¡Bájame! Voy a patearte tanto el trasero que mañana te levantarás con las nalgas como las Kardashian. —¡Para que se te baje lo caliente! —grita. Acto seguido salta al mar, está helado y no logré cerrar mi boca a tiempo. Siento lo salado del agua en mi boca y un ardor en ojos y nariz. Salgo tosiendo y escupiendo agua de una manera realmente exagerada, pero es que me estaba ahogando. Cuando mi vista se normaliza un poco veo a todos corriendo hasta nosotros, gritando y riéndose de mi patético intento de no morir. —¡Estúpido! —le grito y aplico fuerza sobre su cabeza, saltando y sumergiéndolo al agua. —¿Así estás bien o necesitas una bolsa de hielo? —se ríe sacudiendo su cabello. —La bolsa de hielo la necesitaras tú para ponértela en tus huevos, cuando salgas de aquí y te los patee. —Tranquila Tyson, se te alborotan las hormonas —Noah me chapotea agua en la cara y se va nadando junto a sus amigos. Mo me mira con ganas de estallar una carcajada en mi cara. —¿Qué? —le salpico agua. —Se pone celoso —bromea—, que buen streep Tis. Le enseño mi dedo del medio y me subo a su espalda, lo que queda de la noche seguro la pasaremos nadando aquí y jugandocon agua, seguro. No quiero imaginar cómo terminará esto.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD