Abiud —Bien, ahora que por fin tenemos a los tórtolos de regreso, ¿por qué no continuamos? —comentó Alison con cierta amargura y sarcasmo. Lucero y Sharif, pese a la incomodidad del comentario se veían felices, era evidente cuánto necesitaban tener ese momento a solas y más después de tanto tiempo sin estar juntos, aunque esas horas que estuvieron fuera de nuestro rango también nos pasó factura a nosotros con la madre de Alison quien no desaprovechó la oportunidad para bombardearnos de preguntas, mismas que ninguno de los dos quiso contestar y aun cuando lo intenté, él me impidió decir una palabra alegando que no teníamos por qué dar explicaciones de nada. La verdad no sé en qué momento toda mi vida se volvió un caos, pero extrañamente ahora no siento incomodidad o culpa, aunque tampoc