El mismo día Playa de Naze Donovan Yo no sé si es propio de la edad o es solo un efecto del amor, porque los jóvenes parecemos caballos desbocados queriendo vivir con intensidad, nos hundimos con una pelea como si nos muriéramos o con un beso deliramos hasta el infinito, pero no creo que seamos inmaduros, menos que sea parte de las hormonas. Es cierto que los muchachos somos como lobos hambrientos y las mujeres, chicas en llamas en cuanto al sexo, aunque supongo que nos enamoramos dándolo todo, no ponemos un límite, ni pensamos mucho en las consecuencias. El amor adolescente es más puro, libre y espontáneo. Allí no existe ese estudio previó que hacen los adultos con una mirada para evaluar a su posible pareja, incluso son tan complicados en sus relaciones que ponen miles de trabas. Pre