Las calles de Roma en pleno verano son un paisaje lleno de gente disfrutando de sus sitios históricos, sus deliciosos gelatos, y por supuesto de sus famosos Aperol Spritz. Mali va en el portabebés colgante y observa todo su alrededor y no es para menos, nunca ha visto tantos colores y gente junta.
—¿Quieres que la cargue? —me pregunta Mykel.
—No, estoy bien, la verdad es que no pesa tanto como parece. El portabebés ayuda mucho —explico cuándo vamos pasando frente al coliseo.
—Se la ve feliz —comenta haciéndome sonreír.
—Lo está, no deja de mirar todo lo que hay a nuestro alrededor —expreso entusiasmada y por alguna razón Mykel me mira de una manera que me hacer tener que esquivar su mirada.
—¿Y tú? ¿Estas feliz? —cuestiona finalmente.
Me gustaría responder a su pregunta sin tener qu
