Matrimonio por herencia

Capítulo 6.El encuentro

Marco el número en mi teléfono móvil, una vez vuelvo a mi habitación, acomodo mi espalda sobre el respaldo de la cama con cierto nerviosismo y también vergüenza por este atrevimiento mío, el cual nunca me hubiese atrevido a intentar de no estar lo suficientemente desesperada. Si no encuentro un buen empleo esta semana, tendré que cambiarme de casa, lo que significa que mi estilo de vida también lo hará y aunque en realidad nunca me di lujos ni tampoco muchas comodidades al vivir con Douglas, la verdad es que el vecindario aquí es bueno, los vecinos agradables y por supuesto, si quiero vivir aquí, aparte de tener una cama y una estufa donde cocinar, también necesito muebles, los cuales no conseguiré sin un buen sueldo y claro los muebles no son exactamente baratos.

Mientras los tonos de llamada suenan, los latidos de mi corazón se aceleran y por supuesto, tengo una inmensa necesidad de abandonar esa loca idea, pero cuando pienso en esa opción, finalmente mi llamada se conecta.

—¿Diga?—pregunta una voz con una energía masculina, qué me eriza la piel, por supuesto es la misma voz del hombre que vi en el camerino de mi antigua jefa, solo que sin ese tono coqueto, pícaro y un tanto molesto qué uso con ella, suena aún más varonil y elegante.

—D- disculpé... buenos días—mi voz me falla luego de escucharlo, así que me tomo un segundo para aclararme la voz y hacerme pasar por una verdadera actriz, aunque de eso no tengo ni un solo cabello—me llamo Isabel Sinclair y le llamo porque Ellie Graham me comentó un poco sobre su asunto...

Me arrepiento enseguida de haber dicho todo lo que dije, es decir, debí mentir un poco o al menos eso es lo que mi mente me recrimina. ¿Por qué le dije mi nombre real? ¿Por qué le revelé qué Ellie me comentó sobre su problema? ¿Y si le pregunta? ¿Debería seguir con la mentira y decir que soy actriz o decirle la verdad y esperar lo peor?

—¿Es amiga de Ellie?—pregunta, esta vez interesado en lo que he dicho y al parecer, si tengo que seguir mintiendo para averiguar más sobre lo que ese hombre necesita y por lo que está dispuesto a pagar una fortuna.

—S-sí, algo parecido, nos conocemos muy bien, pero yo no utilizaría la palabra amiga. Digamos que lo que nos une es el trabajo—me signo a decir y al menos en eso siento que soy honesta.

—¡Ah! ¿Eres la actriz qué ella iba a conseguirme?—cuestiona enseguida y entonces trago saliva para seguir mintiendo.

—Sí—miento sin dar muchos detalles—¿Me gustaría saber un poco más sobre el asunto y claro, si no le importa hablar de eso, también quisiera saber sobre la paga?

El hombre se queda en silencio y me parece que he cometido un terrible error, es decir, nunca escuche a Ellie hablar o quejarse de su paga, no es algo que una actriz profesional y de buena reputación preguntaría al adicionar para un papel protagónico, pero desgraciadamente mis intenciones son únicamente monetarias.

—Estoy dispuesto a pagar una suma considerable a la actriz qué pueda interpretar el papel de mi prometida ante mi familia y posteriormente casarse conmigo en una ceremonia falsa hasta cierto tiempo—explica sin dar detalle de la paga, pero necesito más que eso para aventurarme en suelo peligroso.

—¿A qué se refiere con suma considerable?—cuestiono algo confundida y entonces él suelta un suspiro.

—Si no hay problema con la moneda con la que estoy dispuesto a pagar, puedo darle cien mil dólares desde una cuenta en estados unidos si eso le parece justo.

De pronto la cantidad me abruma, parece ser una cantidad considerable y tal y como se lo prometió a mi antigua jefa, más de lo que ella habría juntado en paga por la temporada en que estaría presentándose la obra. Termino tosiendo un poco luego de ahogarme con mi propia saliva, aunque enseguida trato de aparentar un poco de calma, ya qué no debería ser algo sorprendente, al menos para una actriz modestamente buena o eso es lo que pienso.

—M-me gustaría que me considerará para el papel si es que aún no lo han ocupado ya—respondo recordando algunas de las frases qué mi jefa utilizaba en sus audiciones y me parece que eso es precisamente esta llamada, una audición.

—Por supuesto, pero antes de considerarla, me gustaría que nos viéramos en persona, claro si no le parece una molestia, es solo que si desea personificar a mi prometida, me gustaría hacerle unas preguntas—menciona y entonces siento un hueco en el estómago porque no pensé que este asunto fuese a concretarse de este modo, es decir, como si 100 mil dólares fueran poca cosa.

—Por supuesto—digo entre confiada porque supongo que así debe comportarse una actriz y algo nerviosa porque yo no soy claramente una y no sé qué decir o que hacer en una audición—dígame donde nos vemos y a que hora.

—Le enviaré la dirección y la hora por mensaje, ahora mismo estoy un poco ocupado, así que no puedo hacerlo en este momento.

—Claro—digo algo desconcertada porque pensé que estaría más feliz de concretar una cita, lo cierto es que esperaba que fuera la primera en llamarle, pero por la forma en la que actúa, supongo que no es así.

—Bien, entonces supongo que nos veremos después, señorita Sinclair.