Emanuele
Salgo a entregar unos cuantos dólares a un ancianito, mi papá siempre odio que hiciera eso, pero mi mamá me decía que así se contribuía un poco con todo lo malo que se estaba realizando y si es verdad, tantos muertos que tengo sobre mi espalda ser solidario me hace creer lo buena persona que soy; aunque sea una de las mentiras más grandes, entro me gusta que sea sin mis hombres, estos adultos mayores a veces no tienen ni familia y sería injusto asustarlos con la presencia de personas con la sangre tan fría.
Voy hacia el fondo y entregó el maletín repleto de dinero al área de donación, como de costumbre no digo nada y ellos solo me sonríen, reflejando agradecimiento sin saber el monstruo que puedo llegar a ser; si tuvieran la información de la realidad me tendrían miedo, un mafi
