Las vueltas que Fernando le da a ese pedazo de tela, son muy decisivas más que todo para mi corazón, intento no interpretar las cosas así, sin embargo, es imposible ahora estoy extrañando tanto a Emanuele. —Gracias. —Muevo mi cabeza específicamente para Fernando, espero que Emanuele esté solo, porque me lastimaría bastante que me esté engañando con otras mujeres, no puede ser ya estoy cayendo en las calumnias que inventa este señor. —¿Cuánto tengo que esperarte Helena? No me va interesar que me pase la vida completa, con tal de que me des esa esperanza. —Sus ojos me están confundiendo, pero la crueldad le es más fácil mantenerla. —No me tengas más paciencia, Fernando me cuesta por el aprecio que te mantengo, ya no podemos continuar la lucha va ser en vano, solo tendrás que esperar un pa