Su identidad había sido descubierta. Intentando no llamar aún más la atención, detuvo a todos para que no se inclinaran delante de él. —¡No es necesario tantas formalidades en público! Con ojos afilados volvió a mirar hacia Aron. ¿Por qué está aquí el marqués de lower? No esperaba toparme con usted.
—¡Acompañamos a las señoritas hacia el estanque de peces!-expreso con amabilidad la pequeña alisa.
—¿Tú debes ser la pequeña princesa del marquesado lower?—Pregunto Karyun, al ver a la tierna niña. La tomo por sus pequeñas caderas hasta alzarla en brazos. Su peso no era muy diferente al de Miles. Dándole una sonrisa divina, agradeció conocerla. ¡Es un placer conocerla alisa lower! Karyun tenía debilidad por los niños, aún más por las niñas. Sonrojada de pies a cabeza pregunto. ¿Es usted el emperador?
Confirmando la pregunta expuso ser el emperador. ¿Puedes guardar el secreto por nosotros?—Expreso, Markus, a la adorable niña. Viendo qué lisa parecía no creer la información dada, Markus, volvió a preguntar. ¿No se parece a un emperador? ¿Verdad?
Nerviosa intento calmar su corazón y responder sin titubear. —¿Pensé que el emperador era un dios de batalla? Pero es usted hermoso.
Ante las palabras de la niña, todos aguantaron la risa, excepto por Markus, el cual, sin siquiera, disimular, explotó en risas. —¡Tan hermoso como una flor!
Ante la burla de su amigo agachó la cabeza decepcionado y preguntó algo afligido. ¿Acaso las personas bellas no pueden ser fuertes?. ¿Quién te ha dicho tal blasfemia?
Su hermano solía leerle cuentos dónde el emperador era alguien grande como un gigante, con brazos fuertes y una cara feroz. ¡Tú no eres rudo! Expreso la niña. Ante ese argumento solo pudo reír entre dientes para después decir con ojos feroces que determinaron a Aron. ¡Tal vez tu hermano debería dejar de leerte esos cuentos!
Las personas delante de ellas, eran el emperador y su fiel consejero. Sin embargo, la atmósfera que los rodean era incluso más ligera que la del pintoresco marqués lower. Pudiendo Relajar sus mentes preocupadas por haber tenido la mala dicha de encontrar al emperador en sus caminos.
Mientras todos estaban distraídos. Del otro lado, Rión y valían, pudieron resolver sin más problemas el malentendido entre los sujetos. Anteriormente, Karyun y Markus, ofrecieron su ayuda para resolver el conflicto de igual manera, siendo esa la razón por la cual estaban junto a Rion. Hablaban cómodamente cuando Karyun, se acercó a ellos.-¡No esperaba volver a verte! Claramente, una gran mentira, puesto que este la investigaba.
—¿Eso debería decirlo yo, no crees? Un silencio se produjo durante unos segundos. Frunció el ceño al sentir la hostilidad de parte de Valían.
Claramente, tenía derecho de estar enojada, ya que este había indagado en su vida sin su consentimiento. ¿Por qué estás aquí? Pregunto cuestionando sus razones de estar junto a su amigo.
Sin entender Karyun, pregunto extrañado del tema. ¿Qué intentas decir?…
—¡No lo sé! ¡Dígame usted! Primero soy atacada y acosada por usted en un lugar oscuro y ahora da la casualidad de encontrarnos en este lugar.-expreso enojada y asustada por la situación.
Una sonrisa sádica se produjo en su rostro. ¿Piensas que te estoy siguiendo?
Cuanto más se alargaba la conversación, más se acercaban el uno al otro.
—¿Debería preocuparme por sus palabras? Pronunció con chispas en sus ojos. —¡Tal vez deberías preocuparte!. Expreso mirándola fijamente a los ojos.
—¡Tal vez tenga mal mis recuerdos, pero fuiste tú quien atacó primero! ¡Sin mencionar tu sospechosa actitud al escalar el muro! Acaso ¿No debería ser yo quien sospeche de ti? Respondió limpiando su honor al ser llamado acosador.
—¿Cómo esperabas que no te atacará? Apareciste de la nada justo como hoy.
Sus palabras no eran mentiras, la razón por la cual atacó aquel día fue por instinto. Pero tener una batalla de palabras ignorando el título de emperador era descaro del más alto, para su suerte Karyun, parecía ignorar su insolencia, inclusive parecía disfrutar su forma altanera de ser.
—¿Crees que soy un acosador que te persigue a ti y a tus amigos? Te consideras una persona muy importante para que te preste atención o simplemente. ¿Temes que descubra algo fuera de lo normal? Ante su cuestionamiento, la batalla había término con una victoria para él.
La atmósfera que antes era amigable se había tornado fría y sádica. Sus miradas llenas de enojo provocaron resentimiento entre ambos. El silencio se hizo presente por unos segundos antes de que alisa preguntara con inocencia.
—¿Eres un acosador? Ante sus palabras, Aron, corrió a disculparse en su nombre. Pues, fue una clara ofensa. La niña asustada por el maná alterado de ambas partes provocando pequeños choques de maná. Sostuvo el pliegue del vestido de Valían y pronuncio estar asustada. Todos estaban atónitos ante la discusión que estos dos habían tenido sin dar oportunidad a qué uno de ellos pudiera interrumpirlos.
La carcajada producida por la risa contenida de Markus, sonó en el lugar. La situación no era graciosa, pero había pasado muchos años desde la última vez que vio el enojo puro en los ojos de su amigo. Se disculpó por reírse sin compasión, pero Karyun, siguió fulminándolo con su mirada agria.
Por el bien de la niña, ambos dejaron la discusión para después. ¡Está bien! ¡No tengas miedo! Tratando de consolar a la asustada niña. Valían tomo sus pequeñas manos que estaban temblando y las puso en sus propias mejillas para qué producirán calor.—¿El emperador es malo? Volvió a preguntar asustada.
—¡Claro que no! Todo esto es un malentendido. Expreso dedicando una sonrisa liviana. —¿Pero dijiste que él te atacó? Expreso la niña ya con lágrimas en sus ojos. Todos voltearon a verlas. Karyun suspiro ante las palabras de la niña. Ambos habían cometido el error de discutir delante de un niño. Sin embargo, nadie espero las palabras que salieron de sus labios.
—¡Dije eso por qué me asusto mucho! Pero no es una mala persona. ¡Es una persona amable y respetuosa, no es un acosador!—Sus palabras fueron dedicadas para tranquilizar a la niña. Sin embargo, su forma de decirlo abría paso para que cualquiera creyera que se conocía desde hace ya mucho tiempo.
Ya más tranquila, la pequeña se disculpó por haber llamado acosador a su majestad. Habiendo aclarado el malentendido, preguntaron ¿De dónde se conocían?
Su explicación fue rápida y concreta. Claramente, fue un momento des dichoso para ambos. Aunque ninguno quiso indagar más el tema, quienes tuvieron sus más grandes sospechas fueron, Rion y Markus. Siendo mirados con ojos sospechosos por sus amigos, ambos dijeron en unísono.—¡Pensé que era un pervertido!—¡Pensé que era una espía!.
Ante la conclusión que ambos habían llegado sobre ellos mismo, los dos lados se preguntaron. ¿Espía? ¿Cómo pudiste considerar que soy una espía?
Lo mismo cuestionó él.—¡Exacto lo mismo pienso! ¿Un pervertido yo?
La atmósfera nuevamente estaba a la ofensiva. Todos agradecieron por primera vez al campanario que anuncio las doce de la noche. Viéndolo como su oportunidad para escapar, el marqués se despidió de todos junto con Alisa. Nuevamente, la incomodidad se apoderó de los presentes. El estanque de peces estaba a solo metros de su actual posición. Ante la separación inminente valían pregunto si Rion, la acompañaría a los estanques, pero este ya se había comprometido a tomar un trago junto a Markus y Karyun. Conociendo el lugar mejor que nadie, Mery, recomendó un puesto de tragos muy Cerca del estanque donde ellas irían. El rostro molesto de Valían, se vio durante todo el camino, no deseaba siquiera aceptar la presencia de Karyun, junto a ella. Hubiera Sido ventajoso negarse a qué estos las acompañarán, pero como negarse ante el emperador. No tenía más que aguantarse.
Nadie de los presentes podría llegar a entender cuan desgarrador podría sentirse tener a tu pareja destinada junto a ti y tener que ignorar la calidez que este te transmite. Siendo este su más grande debilidad, mantenerlo alejado era lo mejor. Estando Cerca de él, los minutos se volvían horas y las horas semanas. Si solo pudiera escapar de la situación en la que se encontraba. Siendo sincera consigo misma, no podía comprender por qué siempre termina perdiendo los estribos cada que está Cerca de él. Estando sumergida en su mente confusa, las palabras que tanto deseaba hoy se hicieron notables. —¡Lo lamento!. Volvió a mirar sin poder creer que el orgulloso, Karyun, se disculpara con ella. Su corazón empezó a latir sin poder detenerse. ¿Por qué te disculpas? Pregunto con voz ronca. «Por favor detente. No sigas» Las cosquillas que revolvían su estómago fracturaban su alma en pedazos. Habían pasado tres años. Tenía la esperanza de haber podido superar esos sentimientos. Este golpe de vida la regresaba a su triste realidad.
—¡Lamento haberte asustado esa noche!—Su rostro parecía estar en contra de disculparse, pero por alguna razón decidió dar el primer paso. ¡También lamento haber Sido muy rudo! Dijo al ver sus manos marcadas en las manos de ella. Aunque no le agradaba la idea, tenía que darle el beneficio de la duda. No podría haber negado lo sospechoso que fue el haber saltado el muro. Además, en cierta forma no estaba muy lejos de la realidad, puesto que su misión era robar una piedra, la cual estaba siendo protegida por el mismo. Respiro para contener el aliento para después disculparse, pues ella también fue culpable. ¡Lamento haber exagerado! Respondió ante todo. ¡Está bien! Dijo para luego sonreír y decir en modo chistoso. ¡Solo no vuelvas a herir mi orgullo de acosador!
No quiso sonreír, pero no pudo aguantarse ante todo, este era el Karyun, que ella había conocido antes. Estando todo resuelto. Primero fueron por el tan prometido trago para después pasar a los estanques. Mery, tenía razón, para Karyun y Markus, era la cerveza más deliciosa que habían probado. Mientras, Rion, no le fue muy de su gusto. ¡Déjame probar! Expreso valían tomando del mismo trago que Rion. Todos parecían sorprendidos por la confianza que había entre ellos. Mientras que cierto hombre no podía entender por qué le molestaba tanto tal escena. ¿Tal vez son más que amigos? Fue el pensamiento de todos los presentes.
Para ella el trago de cerveza estaba algo amargo, talvez si tuviera hielo le hubiera gustado más.—¡A Kyo y Sulmer, seguro le hubiera gustado!—Expreso, Rion, ignorante de las miradas ajenas. Esta vez todos parecían convencidos de que entre ellos había algo y no era amistad. Valían había cubierto con sus manos los labios de Rion. Lo sostuvo por las manos hasta alejarlo de los demás.
La situación se estaba tornando oscura y para variar desde lo lejos ambos compartieron sus palabras al oído del otro para que nadie más pudiera oír su conversación. Se abrió para mala interpretación, pues, valían solo advirtió a Rion, de no mencionar el nombre de Sulmer, mientras estuvieran delante de Karyun y Markus, puesto que estos dos estaban indagando de más en su vida.
Si Karyun, llegara a investigar a Sulmer, muchos secretos podrían llegar a descubrirse, pues, es Sulmer, la persona encargada de eliminar todo lo relacionado con Valían.
Sulmer, era alguien importante en el mercado n***o. Con solo su nombre es suficiente para sembrar la duda. Si llegaran a investigar a Sulmer, no tardarán en darse por enterado del robo de las piedras elementales. Al ser ellos amigos cercanos, serán los primeros en la lista negra.
Rión, lo pensó por un momento para después decir. —¡Creo que llamamos aún más la atención!—Rión, tenía razón, pero habían llamado la atención de otra manera muy diferente a lo que suponía.
Observando la situación, Valian, frunció el ceño. ¡Vaya molestia! Debido a sus expresiones no fue difícil para ella adivinar sus pensamientos.
—¡Piensan que tú y yo somos más que amigos!—Respiro ante la situación confusa.—¿Por qué supondrían eso?—Pregunto, Rion, extrañado. Mirándolos bien, no había duda definitivamente consideraban que ellos eran una pareja. Lo cual era imposible de creer para ellos dos. Más que amigos son hermanos que crecieron juntos.
No había más que enfrentarlos de cara.—¿Qué pasa? ¿Por qué nos miran así?—Preguntaron los dos. La respuesta vino llena de hostilidad.—¿Eso deberíamos preguntarles nosotros?—Respondió, Karyun, con sarcasmo del bueno.
«¿Qué le pasa porque se enoja por esto?»
Conociendo el carácter problemático de su amigo, Markus, reconoció que este estaba realmente furioso, por lo tanto, cambio el tema rápidamente. —¡Ya estamos por llegar a los estanques!—Markus, desvió la mirada hacía, Mery, para que esta apoyara su idea, lo cual Mery, captando su mensaje, dijo. —¡Si vamos o no llegaremos a tiempo!
Mientras todos caminaban tranquilamente, Karyun y Valían, parecían nuevamente matarse con las miradas. Sin ningún tacto lanzo la pregunta sin compasión. —¿Él es tu pareja?…
—¿Por qué piensas algo como eso?
—¿Todavía no has respondido? Expreso molesto.-¿Por qué debería explicarte tal cosa? Al escuchar el desvío de sus preguntas fue como confirmar algo de lo cual se negaba a aceptar. Sin decir nada más paso a su lado, ignorando su impulso de ordenarle hablar claro y sin rodeos.
Por otro lado, valían suspiro y confirmo sus preguntas.—¡Somos amigos!—Ante sus palabras, este solo se detuvo a escuchar sus palabras.—¿Párese que son buenos amigos?—Su pregunta fue obviamente descarada.—¡Pase toda mi niñez con él! ¡Somos como hermanos, es clara la confianza!—Expreso valían. Antes su aclaración no volvieron a tocar el tan infame tema.
CONTINUARÁ…