Capitulo 8

2871 Words
Capitulo 8. Estaba realmente contenta, aunque mis primas eran más chicas me estaba gustando estar con ellas, llevábamos un buen rato en la habitación de Adhara en donde nos maquillábamos y hablábamos de cosas de chicas, me parecían niñas realmente tiernas, sobretodo Adhara a pesar de estar entrando en la pubertad era realmente inocente y linda. Aida y Anisa eran un caso, muy parecidas ambas tenían ese toque de locura que las hacía ver lindas, tiernas, y chicas malas al mismo tiempo, y la pequeña Amber era una dulzura, era la rubia de la familia, y la que mas hablaba de Amid, al parecer él era su persona favorita luego de su papi, eso era algo que teníamos en común, Amid también era mi persona favorita luego de mi padre. 11 de la noche todavía no contesta. 1 de la mañana todavía no hay repuesta. 2 de la mañana me dice que está dispuesta. 3 de la mañana yo te tengo una repuesta. Mi celular sonó cuando estaba terminando de pintar la boca de Amber, le sonreí mientras veía que se trataba de mi amiga, ella amaba esa canción así que la asigno como tono de llamada para todos mis contactos, sonreí, de verdad la extrañaba, nunca habíamos estado tan separadas. -Hola muñeca- saludo cuando respondí y me aleje un poco de las chicas, porque nunca se sabía que podría decir la loca de mi amiga. -Hola Adri. -Estaba acostada, estoy muy aburrida sin ti aquí… ¿tú qué haces? -Estoy con mis primas pequeñas, ¿Y Mateo? -No lose- suspira y sé que no está pasando por un buen momento, pero no entiendo el porque ellos son tal para cual, la pareja perfecta. -Como que no sabes… no te creo. -Dijo que hoy no estaba de humor, simplemente me dejo plantada todo el día, ¿soy muy fastidiosa?- me siento en el pequeño sofá y muerdo mi uña. -No eres fastidiosa amiga, solo un poco insistente- la escucho sollozar y mi corazón se parte, no, Adriana no es de las chicas que andan lloriqueando ella siempre es la fuerte. -Yo creo que él quiere terminar, y yo no soportaría eso Noe, simplemente no, el es mi todo- se me escapo una lagrima y le hice una seña a las niñas para decirles que iba a salir. -No creo que él te quiera terminar Adriana, nadie en su sano juicio te dejaría. -Estoy tan jodida. -Adriana no sigas llorando, me vas hacer llorar también, sabes que no lo soporto- la escucho reír sin muchas ganas pero eso es mejor a qué este llorando. -Diablos no ha pasado una semana y ya te extraño. -Y yo a ti mi amor- escucho el ruido de una puerta al abrirse pero no le preste atención, me preocupaba más mi amiga. -Te quiero tanto hermana. -Yo te quiero más. -No te sigo quitando tu tiempo, ¿me llamas mañana? -A primera hora- le prometo antes de colgar. Escuche un fuerte portazo y me gire con miedo, Amid parecía realmente cabreado, parecía furioso, estaba guapísimo, el simplemente vestía como un chico malo y si que le quedaba el estilo, cuando iba a abrir la boca apareció mi tío en el pasillo, tenía una sonrisa en la cara y detrás de el venia mi tía con una sonrisa parecida, sin duda alguna eran tal para cual. -Hola niños- saludo mi tía y le sonreí. -Que linda visita tenemos- me dice mi tío y le sonrió. -Yo debo de volver con las niñas… -Bonita- me giro esperando que Amid me diga algo pero al parecer el no podía decir nada así que niega- nada olvídalo. Entro al cuarto y trato de sonreír de nuevo, hacer como si nada hubiera pasado. A la hora de cenar bajo con las niñas al comedor, al entrar me siento un poco nerviosa, ahí está Amid, y a su lado sentada luciendo como una perfecta modelo se encuentra Katherine Mosses, tiene un lindo vestido rosa que hace contraste con su piel morena cuidada, tiene una sonrisa en la cara mientras habla con mi tío, mientras que mi tía la ve mal, no entiendo nada. -Buenas noches- dice Adhara y ellos se giran para vernos. -Hola niñas- dice mi tío con una sonrisa y nos hace una seña para que nos sentemos. -Tenía años sin verte Noelia- me dice Kathe con una sonrisa y toma la mano de Amid- creo que todos hemos crecido. -Si claro- murmuro y las chicas de servicio traen la comida en perfecta sincronía. -En dos días es navidad, mañana iré a comprarme un lindo vestido quizás te gustaría venir conmigo, así eliges algo también- me quedo callada lo menos que quiero es salir con la estúpida de Katherine, se que debo de madurar y dejar en el pasado nuestros problemas pero que este tomando la mano de Amid hace que me enfurezca. -No creo que Noelia quiera ir de compras contigo- dice mi tía de una forma grosera, una manera tan brusca que hasta a mi me cae mal. -Eso no debería de decir ella no usted- ya Kate no muestra esa sonrisa altanera, esta seria y Amid se ve incomodo, hasta mi tío Amir parece algo nervioso. -¿Noelia?- me pregunta mi tía y me siento muy nerviosa. -Yo… ya compre un vestido en Madrid- murmuro y veo que Katherine baja la mirada apenada y la chica boba que hay dentro de mí se burla porque sabe que hare una estupidez- pero podemos salir otro día, o te puedo acompañar. -Eso estaría muy bien, te puedo enseñar los mejores lugares para comprar ropa- dice contenta y yo no sé que he hecho, soy una ridícula. Como ya lo sabía no podía dormir, a pesar de que me dieron una habitación grande para mi sola, no podía conciliar el sueño, daba muchas vueltas y no sabía qué hacer con mi vida, al celular se le había acabado la pila, así que decidí salir tomarme un vaso de leche y tratar de dormir un poco, baje las escaleras con total sigilo. Camino hacia la cocina y al entrar me quedo sorprendida, Amid está sentado en un taburete y su cabeza está apoyada en el granito del mesón, solo está iluminado por la luz que se filtra del patio y se ve totalmente maravilloso, el siente mi mirada y alza la vista y alza una ceja, mi corazón late desbocado dentro de mi pecho, Dios mío porque el me ocasiona tantas cosas?. -Bonita- murmura y veo al suelo. -Hola, yo no podía dormir vine por un vaso de leche- le cuento mientras camino a la nevera, lo mejor es tomar la leche y huir. -Te entiendo- murmura y se para- Kathe está muy contenta porque la acompañes a ver vestidos, siempre anda dándome lata con que nunca la acompaño, pero esas son cosas de chicas, y hasta donde sé yo no soy una- dice y le sonrió, y aunque puede que su repuesta me parta el corazón se que debo de preguntar. -¿Tú y ya tienen algo? -¿Algo como qué?- parece confundido y suspiro. -Una relación… ¿son novios?- él se empieza a reír con una carcajada estrepitosa, saco la leche y la sirvo en un vaso y luego busco el microondas para calentarla. Pasan dos minutos para que le se calme y pueda responder, dos minutos en donde me tiene súper nerviosa. -No nada que ver, asco- vuelve a reír, y se ve realmente lindo- Katherine es mi prima, hemos crecido juntos, ella y mi madre no se llevan muy bien, nunca lo han hecho sus personalidades chocan, sus apariencias y lo que creen cada una de la otra, pero no ella y yo no tenemos otra relación que no sea una amistad, una linda amistad entre primos – asiento y tomo un sorbo de mi leche. -Eso está bien- susurro y él me sonríe. -No todas mis primas se enamoran de mí- me dice mirándome fijamente y ruedo los ojos. -Solo tienes 2 primas- el asiente y me sonríe de manera cínica- y no estoy enamorada de ti. -Ambos sabemos que eso no es cierto- rodea el muro que nos separa y me siento muy nerviosa, toma mi leche y da un sorbo- esta buena- acaricia mi mejilla y yo me relajo ante su tacto. -Quizás deberíamos de ir a dormir- murmuro y el asiente. -¿Juntos? -No Amid, no seas baboso- el vuelve a reír y se aleja, se que se va air y no quiero eso así que hablo sin ni siquiera pensar mis palabras. -¿tienes un cargador que me prestes? -Si claro sígueme. Lo sigo en silencio con el vaso de leche en las manos, subimos las escaleras en completo silencio, el me guio a su cuarto, tenía muchos años sin entrar a su espacio así que algo nerviosa puse un mis piernas a dentro, en ese instante note que llevaba puesto unos chores muy cortos ya que se supone que nadie me vería en pijama, tonta eso es lo que soy. El empieza a rebuscar en una mesa de noche y yo me fijo en todo, su cuarto sigue pintado de blanco con azul pero en las paredes hay fotos de chicas con poca ropa, mas allá hay una foto en un porta retrato, en donde se muestra toda su familia, parecen la familia perfecta, se ven muy bien en esa foto Amid tenía unos 15 años o menos, la familia perfecta. -Aquí esta- dice y se acerca me lo pasa y asiento. -Si bueno yo... me debería de ir ya- murmuro y me doy la vuelta pero él me toma del brazo impidiendo mi huida. -No te vayas. -Amid. -Shhh. El besa mi mejilla y siento que mi piel arde, deja un beso en mi mentón y nuestros ojos se conectan, sus ojos verdes dicen muchas cosas, están oscuros y sé que es lo que quiere, porque yo también lo quiero, nunca en mi vida había sentido tal cosa, sentía que si Amid Garnet no me besaba en ese momento yo moriría, necesitaba sus labios para vivir. Cuando sus labios por fin tocaron los míos sentí un escalofrió, un chispazo, no podía describir lo bien que se sentía cerré los ojos y él me tomo del cuello y fue guiando nuestros movimientos, se sentía muy bien, nunca había besado a nadie de esta manera, nunca había estado con otra persona en esta posición, pero Amid hacia que todos mis muros cayeran y solo estuviera él, nadie más. Su lengua salió al juego y yo gemí suavemente, fue un sonido involuntario yo no quería, pero simplemente salió, el se alejo con una sonrisa, nos había que hacer no sabia como actuar, el tomo de mis manos el vaso de leche y lo dejo en la mesa junto a la foto de su familia. -Eso fue… -Maravilloso- dijo él y volvió a besarme. Esta ves solté el cargador sin importarme que cayera al suelo, no me importo nada, lleve mis manos a su cuello, el me tomo de la cintura y me acerco más a su cuerpo, se sentía tan bien, fue caminando por la habitación hasta que mis rodillas se doblaron, caí en la cama y el sobre mí, su peso no me molesta, todo lo contrario me encanto, sus besos bajaron a mi cuello, provocando que alzara las caderas encontrándome con ese parte de su anatomía que me hizo que me volviera loca, el soltó un pequeño gemido, y se froto contra mí, se sentía tan bien. Sus labios bajaron y besaron mi clavícula dejando suaves chupetones, mientras que sus manos se colaban por mi camisa, la levanto y dejo mi vientre al descubierto, sus besos bajaron, beso mis senos encima de mi camisa y luego bajo mas, beso mi vientre con delicadeza mientras sus manos subían mas mi camisa, hizo que me alzara para sacarla, no tenia sostén y el solo pudo sonreír ante tal hecho. Eres malditamente perfecta- susurra y se lanza a mis labios, yo lo recibo y me siento con más confianza cada segundo que pasa me siento más tranquila más confiada a su lado, porque aunque no lo diga en voz alta, Amid es todo lo que necesito para estar bien. Llevo mis manos a su camisa y exploro debajo de ella su piel está caliente, se la saco logrando que se separe y pare el beso al verse sin la tela sonríe y baja sus besos a mis senos, primero besa su contornos con ternura y luego va a mis pezones, se mete uno en la boca y gimo de manera estrepitosa él lo muerde un poco y el soltarlo va al otro, parece encantado, los masajea y mis caderas se mueven solas, me froto contra él mientras mis manos van a su pantalón y busco el botón para poner bajarlo, el se deja hacer mientras yo no dejo de tocarlo su mano derecha va a mi shorts y con cuidado los aparta y toca en donde nadie nunca me había tocado. Me siento humedad allá abajo y me da un poco de vergüenza el introduce un dedo, primero duele un poco pero luego se siente tan bien, tanto que me muevo buscando mas contacto, él lo empieza a mover y gimo en sus labios, baja sus besos y muerde mi cuello de manera brusca, pero me gusta. Estas tan apretada- murmura en mi cuello y luego alza la vista. Yo soy virgen- le susurro y su expresión cambia, mientras su dedo se empieza a mover de manera más rápida. ¿hablas en serio?- asiento y muerdo su labios inferior el gruñe y sus ojos adquieren un tono verde más oscuro. Rota su dedo haciendo que gima más alto, pero a él parece no importarle, mis manos logran empezar a bajar a su pantalón, el besa de nuevo mis senos y su otra mano pellizca uno de mis pezones causando que se pongan en punta. Espera un momento. Se aleja y siento frio, saca su mano y creo que me va a dejar así, que se está arrepintiendo, estoy a punto de hacer un puchero cuando el empieza a bajar mi short llevándose las bragas con él, me deja totalmente desnuda acostada en su cama, me siento vulnerable, me siento nerviosa ya que no tengo el mejor cuerpo del mundo, pero en su mirada no hay desaprobación, solo lujuria. Se baja sus pantalones quedando solo en bóxer, pero yo quiero que se los quite, el al pensar no tiene pensado hacerlo, porque vuelve a posicionarse sobre mi mientras me abre las piernas para que encajemos y gimo, estar en completo contacto con su piel desnuda se siente de maravilla, llevo mis manos a sus bóxers y trato de bajarlos pero el toma mis manos. Si me los quito, no sé si me pueda aguantar bonita- murmura en mis labios y niego. No quiero que te aguantes. El se queda en silencio unos segundos pero luego deja de luchar y deja que mis manos liberen su erección, se separa para poner bajárselos por completo y lo veo, Amid es bellísimo, esta totalmente desnudo y no hay ninguna parte de su cuerpo que no me guste, su erección está muy parada, y en la punta está un poco mojada. El besa mis muslos, y suelto un pequeño suspiro, cierro los ojos sin querer y el va subiendo sus besos, llega a donde quiere y saca la lengua causando que me erice, abro los ojos y lo veo sonreír, chupa con delicadeza y su lengua empieza a jugar con mi clítoris, siento que estoy en el cielo, mis manos van a su caballo y lo jalo, me da pena que haga esto pero al mismo tiempo quiero que pase toda su vida entre mis piernas, chillo cuando me mete dos dedos, se siente tan bien mis caderas se mueven al son de sus movimientos, siento que empiezo a sudar pero eso no me importa sus dedos se mueven de una mera tan mmm. Amid- gimo y saca los dedos y los remplaza por su lengua, siento que me algo se forma en mi vientre, algo que nunca antes había experimentado. Puedo ver las estrellas, ya solo soy un cuerpo, y estallo, no sé qué me pasa, mi espalda se curvea, y suelto un gemido y algunos balbuceos, se siente tan bien el chupa con intensidad, y entonces caigo en la cama, él se aleja de mi, y sonríe. Eso es bonita, el único nombre que gemirás en tu vida será el mío. Me siento muy cansada, el sube y nos acomoda de una manera muy cómoda, en la que mi cabeza queda en su pecho, siento que mis ojos se van cerrando, y entonces recuerdo algo. Tu… bueno tu cosa- murmuro y de seguro esta sonriendo. Yo estoy bien bonita, pero gracias por preocuparte, ahora duerme. Pero… Shhh. Cierro los ojos sin querer y con sus caricias en mi espalda, caigo en brazos de Morfeo, me siento tan complacida tan contenta de tener al chico que me gusta abrazándome y cuidando mi sueño, que nisiquiera me preocupo por lo que acaba de pasar
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