Capitulo 18.
El chofer manejaba entre las calles de Londres, el día de hoy estaba nublado y hacia un poco de frio, Katherine estaba concentrada en su teléfono como si de eso dependiera su vida. mientras que yo solo podía pensar en mi encuentro con Amid porque estaba segura de que hoy nos veríamos, y de seguro el tenia muchas cosas que recriminarme, aunque pensándolo bien estamos a mano, el huyo una vez, cuando se fue de España cortando cualquier lazo que tuviéramos en ese tiempo, aunque lo mío fu por motivos totalmente distintos, yo no me quería separar de él, yo me fui porque no quería ver a mis padres, no porque quisiera alejarlo de mi, y bueno si quizás actué mal en no decirle nada o en apagar mi celular por tanto tiempo, pero en realidad pensé que mis padres le dirían algo, fui una tonta y esperaba que Amid me perdonará porque lo que hice no tenía justificación alguna.
-Tu amigo Mateo me ha enviado una solicitud de amistad- me dice y alzo una ceja- es guapo.
-Y novio de Adriana- le recuerdo y ella suelta una risita coqueta mientras muerde su labio inferior- me imagino que desean saber con quién estoy viviendo- no puede haber otra explicación.
-Eres una chica afortunada… tus amigos se preocupan por ti- asiento y paso una mano por mi cabello tratando de que se vea decente- y aparte de todo son guapos.
-No son solo mis amigos, son mis hermanos, nuestro lazo va mas allá de una simple amistad… me imagino que es como lo que tú sientes con Amid, y bueno mi único amigo de verdad es Mateo- ella niega y luego bloquea el celular, como si hubiese perdido todo el interés.
-No creo, Amid y yo somos familia, si no fuera por eso quizás ni siquiera nos habláramos… nuestra relación es algo difícil, y más cuando Taylor me odia- eso se notaba desde lejos, pero no sabía porque, y eso me confundía mucho, que había pasado para que mi tía odiara de esa manera a Katherine, era un poco injusto que una persona mayor se pusiera en esas.
-¿Quieres hablar de eso?- ella niega y en ese momento entramos al estacionamiento de la universidad.
Hay muchos autos lujosos y chicos uniformados por todos lados, todos desprenden ese olor a dinero, parecen niños de mami y papi personas que no saben cómo ganarse la vida, y yo aunque he tenido una vida tranquila y nunca me ha faltado nada tengo siempre en mente de que me tengo que ganar las cosas, papa siempre implemento ese pensamiento en mi cabeza, debía de trabajar por lo que quería, debía de esforzarme y no dar nada por sentado.
Arrecostado de una camioneta negra se encuentra Landon a su lado hay una chica pelirroja que parece furiosa, la camioneta se estaciona en la entrada, el chofer se baja y le abre la puerta para que bajemos, primero lo hace ella con una sonrisa y llena de confianza como si fuera la reina del lugar, pero es que así lo parecía, y yo bueno me armo de todo el valor para bajsr, espero que este día vaya bien, por mi propio bien.
Katherine une nuestros brazos y caminamos a la entrada, deseo ver a Amid, pero al mismo tiempo deseo que hoy no me vea, necesito un poco de tranquilidad antes de afrontar todo, en la puerta puedo ver al chico con el que se besaba Katherine en la fiesta, el recorre con su mirada el cuerpo de Katherine cómo si quisiera desnudarla, parece idiotizado y no lo culpo Kathe es hermosa, cualquier chico se fijaría en ella, es la novia soñada y la chica envidiada por todas. Kathe lo tenía todo, belleza, inteligencia, y mucho dinero.
-Dichosos los ojos que te ven- dice viendo a mi amiga y ella solo rueda los ojos, no se porque, si el otro día estaba que se lo comía vivo.
-Qué triste que no pueda decir lo mismo- me rio y el chico fija sus ojos en mi, como si antes no hubiese notado mi presencia.
-¿y tu quien eres?- me ve curioso y muerdo mi labio nerviosa, así no era como pensaba arrancar mi primer día en esta universidad.
-Noelia…
-La novia de Amid- dice Katherine dejándome sorprendida, yo no era la novia de Amid, y no entendía porque ella decía ese tipo de cosas, y la gente se enteraba empezarían a hablar, y estaba seguro que Amid no quería eso.
-Aaah, claro la rubia de la fiesta- murmura- mi amigo tiene buenos gustos- me mira de arriba abajo y me siento desnuda ante su escrutinio, diablos, este chico era una molestia.
-¿Ves? Por eso no te presto atención, Idiota.
Katherine me jala dentro de la escuela alejándome del chico el cual me ve confundido mientras le ve el trasero a Kathe, ni siquiera sé cómo se llama, volteo la mirada y ella me arrastra a lo que parece ser una oficina, se ve furiosa y aprieta los dientes, nunca la había visto en ese estado y eso me preocupa, parecía celosa, pero no entendía el porque si había dejado más que claro que el no le interesaba.
-¿Qué fue todo eso?
-Benjamín es un idiota, siempre anda diciendo que está enamorado de mi, que soy la chica de su vida, pero luego anda de idiota mujeriego con todas las chicas- arregla su cabello y trata de sonreír como si todo estuviera bien, pero sus ojos demuestran todo lo contrario, y yo aun no entiendo nada- esta es la oficina, debes de entrar a decir que ya estás aquí y eso, ya sabes- murmura y luego ve su reloj- yo ya tengo que ir a clases, nos vemos en el receso.
Katherine se va dejándome totalmente sola, muerdo mi labio nerviosa, la verdad no estaba lista para afrontar esto, no sabía en realidad que hacer, siempre había estado con Mateo y Adriana nunca había ido un día a la escuela sola y menos a la universidad, o sin conocer a nadie, siempre estudiamos con las mismas personas en la misma escuela, y no sabía que tenía que hacer en estos casos, me sentía totalmente perdida, en la universidad fue distinto aunque no conocía a todos estaba con mis mejores amigos y eso era suficiente. Adriana estudiaba medicina, Mateo había elegido derecho y yo por mi parte estaba estudiando administración de empresas, me gustaba mi carrera y ella me iba a permitir hacerme cargo de la empresa del abuelos algo que ni mi padre o mi tía planeaban hacer.
Entro nerviosa y veo una recepción, en donde se encuentra una señora de unos 60 años, viste una traje de falda gris y sus ojos están fijos en unas hojas, mas allá hay varias puertas, todas identificadas, ´´Dirección´´, ´´archivos´´, ´´sala de profesores´´, ´´sub dirección´´ y otra más allá que no tenia nombre, la señora se percato de mi presencia y alzo una ceja, me vio mal, como si no fuera más que un mosquito insignificante.
-¿Qué desea?
-Hola soy Noelia Gordon, falte las primeras semanas por problemas familiares, venía a…
-Si ya sé quién eres- dice mientras busca entre sus papeles- La hija de Noah Gordon y sobrina de Taylor Gordon, tu padre fue un gran estudiante auqnue se traslado fuera del país, y tu tia aunque loca no estaba nada mal, tengo una sobrina que trabaja en una escuela y tus hermanos no se quedan atrás, son excelentes muchachitos, espero que usted no sea lo contrario- dice y siento algo en mi pecho que no sé como describir, todos sabían de la existencia de los hijos de Noah menos yo.
-Mis hermanos…
-Si, Noah, Nila, Natalie y Nathan, digamos que se un poco sobre todos los estudiantes de la universidad, aparte estuve hablando con su padre y abuelo, una familia ejemplar- toda una cotilla.
No sabía que decir, me sentía muy mal, tenia 4 hermanos, 4 personas que no conocía y llevaban mi misma sangre, la señora me mando a mi clase y me dio las indicaciones, pero apenas si le pude prestar atención ya que esos nombres se habían grabado como fuego en mi cerebro, ¿el Noah que llevo mi abuelo al aeropuerto es el mismo? Dios como he estado tan ciega, necesitaba hablar con Rebeca, necesitaba que ella me contara su versión de la historia y cómo era posible que tuviera hijos con mi padre, no entendia nada y mi cabeza empezaba a doler de tanto dale vueltas al asunto.
Camine desorientada por la universidad buscando el salón de biología, la verdad no me ubicaba hasta que alguien me tomo del codo, me voltee bruscamente y me encontré con sus ojos, sus lindos ojos verdes, estos me veían con dolor y decepción, mordí mi labio inferior nerviosa y el solo pudo encogerse de hombros como si en realidad no le importara mucho, aunque sus ojos no me decían lo mismo, sabia y entendía su actitud, era lo que me merecía por comportarme como una tonta, una niñata.
-Amid- mi voz salió en un susurro y él se aparto de mí, como si mi piel le quemara.
-¿así que decidiste volver?... pensé que no te volvería a ver más nunca.
-Amid no…
-Te fuiste Noelia, sin darme alguna explicación, te llame, te escribí, te busque por todos lados pero tu simplemente me ignoraste, y me canse… ¿acaso no soy suficiente para ti?- el estaba dolido eso no notaba en cada una de sus palabras y yo me negaba a ser de esas chicas bobas de las novelas que se la daban de ofendidas y no decían la verdad, el necesitaba saber la verdadera razón por la que me fui y apuesto un mundo a que mis padres han creado una cortina de humo, nunca admitirían sus errores en voz alta, eran unos idiotas.
-Yo… Amid tu eres genial, yo soy la que es un asco, nunca he tenido un novio no se simplemente como sobrellevar esta situación- me pase una mano por el cabello- no me fui de Londres por ti, Diablos si tú has sido lo más bonito que me ha pasado en este tiempo, el problema no eres tú, es mi familia…
Le conté toda la historia mientras ambos nos sentamos en el frio suelo de la universidad, le relate desde que me levante a su lado, la enfermedad de Mateo, mi viaje a España, mis padres, mis presuntos hermanos, todo no sabía cuánto tiempo había pasado solo que de los salones empezaban a salir algunos chicos, el me veía embobado y soltó un suspiro, se había acabado la primera hora de clases y ninguno de los dos había asistido.
-Ahora me siento como un idiota- murmuro- yo pensé que no te había gustado como te había tratado.
-Todo en ti me gusta Amid- dije sin ni siquiera pensar y pude ver como en su cara aparecía una sonrisa socarrona.
-Y lo de Noah yo de verdad no sabía nada bonita, nunca imagine algo así, sabes que cuentas conmigo para lo que sea- lo sabía, había cometido muchos errores pero estaba consiente que pasará lo que pasará Amid siempre iba a estar para mí.
El acaricio lentamente mi mejilla sin tomarle importancia a que algunos nos veían, se fue acercando poco a poco, remoje mis labios con mi lengua esperando el inminente momento, lo necesitaba, en este tiempo nunca me di cuenta de que de verdad lo necesitaba, necesitaba a Amid Granet en mi vida, lo quería en mi vida, quería sentirlo cerca, sentirlo mío, era todo lo que quería en este momento.
Sus labios se pegaron a los míos de una manera tan sutil y delicada que hacía que mi vientre se llenara de mariposas, sin duda Amid estaba logrando algo más que gustarme, nuestros labios se movieron en total sintonía de manera lenta y romántica sin importarnos que nos vieran, sin importarnos que muchas personas pensaran que éramos familia. En este momento solo éramos Amid y Noelia dos locos adolescentes con las hormonas alborotadas, dos chicos que se gustaban y no veían nada de malo en demostrarse su cariño, y eso se sentía increíble, como si porfin todo empezará a encajar.
-Amid- la voz de una chica nos saco de nuestro beso, la observe era alta usaba un uniforme que parecía de animadora, su cabello era n***o, muy n***o, sus ojos de un color miel y sus labios de un rojo intenso, estaba maquillada a la perfección y sus uñas lucian una manicura perfecta.
-¿Qué quieres Anna?- la chica hizo un gesto de estar ofendida mientras yo me paraba del suelo, me sentía incomoda.
-¿Quién es esta?- me miro de forma despectiva, como si yo fuera menos que ella, y la verdad me sentía así, no entendía que Amid veía en mí, porque sin duda había muchas chicas como Anna en el mundo las cuales estarían encantadas de estar con él, yo no era para nada bonita en comparación a ella.
En ese momento aparecieron Katherine y Benjamín, mi amiga parecía frustrada mientras este la miraba como corderito, no pude evitar analizarlos y quedaban muy bien juntos, hacían una buena pareja, aunque por lo que dijo kathe el es un mujeriego y a ninguna mujer le gusta eso, pero al verlo siento que el de verdad quiere algo con ella, y lo justifico Katherine era muy bella, lo que todo chico deseaba, y están aquí entre estás dos chicas hermosas me sentía más insignificante aún, porque no era nada comparada a ellas.
-¿Entonces?- dijo la chica chasqueando sus dedos- ¿Quién es esta? Y ¿Por qué se besaban?- Benjamín suelta una risa mientras ve a la chica como si estuviera loca, y yo tenía que ella fuera novia de Amid y yo estuviera quedando como una zorra.
-Ella es Noelia la novia de Amid- dice obvio y la chica me fulmina, como si me quisiera matar con la mirada.
-¿su qué?- ella parece indignada y Amid se para del suelo, yo estaba muy sorprendida, de seguro Amid se molestaría y pensaría que yo andaba diciendo por ahí que teníamos una relación.
-Mi novia Anna, Noelia es mi novia ¿tienes algún problema con eso?- ella parecía furiosa, su cara se había tornado roja y sus ojos se veían como si quisieran aniquilar personas, en especial a mí, cuando la verdad yo ni siquiera entendía lo que pasaba, estaba tan confundida.
-Yo pensé que… tu y yo…
-Nunca hubo un tu y yo Anna, y si me permites iré a la cafetería con mi novia.
Yo estaba en una clase de shock, y solo me pude dejar jalar por el por los pasillos de la escuela mientras Katherine y Benjamín venían atrás de nosotros divertidos. Dios mío, yo de verdad no sabía que había pasado, en un momento nos estábamos besando luego apareció está chica que parecía diosa griega a la cual el dejo con la boca abierta al decir que yo era su novia, Amid estaba loco, pero me alegraba, algo en mi suspiraba y daba brincos de felicidad al darse cuenta que el me elegía a mi ante las otras chicas, cada día me enamoraba más, y como no hacerlo? Si Amid era todo lo que una chica podría desear.