El portal de las razas

Capítulo 5: El mapa antiguo del ático

Capítulo 5: El mapa antiguo del ático

Con el conocimiento obtenido en las cuevas del Alto Orinoco y la guía de aquellos que los habían instruido, Isabella y Gabriel se prepararon para enfrentar los desafíos restantes en su búsqueda. Sabían que el camino por delante sería arriesgado y lleno de obstáculos, pero estaban decididos a desvelar la verdad oculta y proteger a aquellos que podrían verse afectados por los poderes desatados por los licántropos.

Conscientes de que la mansión guarda secretos profundos y aun buscando respuestas, Isabella y Gabriel continúan explorando cada rincón del lugar. Al adentrarse más en la mansión, se encuentran con una sorprendente revelación: Cada Loana ocupó una habitación distinta, y después de sus muertes, nadie ocupó o modificó su habitación

--¿Por qué conservaban los objetos de la Loana fallecida, será para mantener su espíritu presente, en una especie de amarre espiritual – pregunta Isabella

--Debe tener una razón espiritual, esa que dices puede ser una – responde Gabriel

A medida que exploran las habitaciones, examinan los objetos personales, las fotografías y los documentos que se encuentran en cada una de ellas. Cada habitación cuenta una historia única, revelando las personalidades e intereses de las Loanas que alguna vez las ocuparon. Los objetos y pertenencias evocan recuerdos de vidas pasadas, y Isabella y Gabriel se sumergen en el pasado mientras intentan reconstruir la historia de cada Loana.

Aunque no encuentran respuestas inmediatas a los enigmas que rodean la mansión y las desapariciones, la exploración de las habitaciones les brinda una perspectiva más íntima de las vidas y los legados de las Loanas. Comprenden que cada una de ellas desempeñó un papel importante en la historia de la mansión y que su ausencia no debe ser olvidada ni ignorada.

Emocionados por la perspectiva de descubrir nuevos indicios en el ático, Isabella y Gabriel se dirigen hacia esta parte de la mansión que hasta ahora había permanecido cerrada. Con cautela, abren la puerta y suben las empinadas escaleras que conducen al ático, llenos de expectativa por lo que podrían encontrar.

A medida que ingresan al ático, la luz tenue se filtra a través de las pequeñas ventanas, iluminando el espacio polvoriento y lleno de objetos antiguos. El ambiente está impregnado de un aura de misterio y abandono, como si el ático guardara secretos olvidados durante mucho tiempo.

Exploran meticulosamente cada rincón, revisando cajas, baúles y estanterías llenas de antigüedades, recuerdos y objetos de generaciones pasadas. Entre el polvo y los objetos acumulados, encuentran unas túnicas color purpura y fotografías que parecen haber sido escondidos deliberadamente.

La información contenida en estos hallazgos les revela una nueva capa de la historia de la mansión y de las Loanas Leroy Meyer. Descubren correspondencia entre las Loanas y otros individuos misteriosos, anotaciones sobre rituales y símbolos que parecen estar relacionados con los licántropos y un pergamino enigmático que menciona un antiguo pacto y la necesidad de mantener el poder de los licántropos bajo control.

Isabella y Gabriel se dan cuenta de que el ático alberga secretos profundos y peligrosos. La información que encuentran sugiere que las desapariciones de las Loanas podrían estar relacionadas con la protección de los licántropos y la preservación del equilibrio entre el mundo humano y el mundo sobrenatural.

A medida que profundizan en su investigación, Isabella y Gabriel también encuentran un mapa antiguo que muestra un camino hacia una ubicación desconocida en el corazón de la selva. El mapa parece ser una pista crucial que podría llevarlos a respuestas más definitivas sobre el misterio de la mansión y los licántropos.

Después de examinar el ático y emocionados por los descubrimientos realizados, Isabella y Gabriel deciden continuar en su búsqueda y explorar la cocina y el comedor de la mansión. Al entrar en estas áreas, se encuentran con una escena congelada en el tiempo.

La cocina está impecablemente limpia y organizada, como si estuviera lista para preparar una comida familiar. Los utensilios de cocina, las ollas y las sartenes están en su lugar, y las despensas están abastecidas con alimentos frescos. Los aromas del pasado parecen flotar en el aire, evocando recuerdos de comidas caseras y risas compartidas.

Al pasar al comedor, Isabella y Gabriel encuentran la mesa elegantemente puesta. Los cubiertos, la vajilla y los cristales brillan bajo la luz que se filtra por las ventanas. Las sillas están dispuestas alrededor de la mesa, como si la familia estuviera a punto de sentarse a disfrutar de una comida juntos.

Este descubrimiento les permite vislumbrar un poco más de la vida cotidiana de las Loanas Leroy Meyer. A pesar de las desapariciones y los misterios que rodean a la mansión, queda claro que la familia valoraba los momentos compartidos alrededor de la mesa.

Isabella y Gabriel se toman un momento para reflexionar sobre la importancia de la familia y las tradiciones que se transmiten de generación en generación. Les recuerda el vínculo humano detrás de los enigmas y los secretos, y refuerza su determinación de descubrir la verdad para honrar a las Loanas y a su legado.

De pronto, con sorpresa y emoción, Isabella y Gabriel encuentran entre los utensilios de cocina una daga muy especial de plata, examinando los intrincados detalles de su hoja y empuñadura. El símbolo grabado en la daga es idéntico al del medallón, lo que sugiere una conexión profunda entre ambos objetos.

-Pero que indica el símbolo del medallón y ahora de la daga, que se encuentra en relieve – se pregunta Isabella

-Y que hace una daga tan especial con los utensilios de cocina- se preguntaba Gabriel

Esta nueva pista los lleva a especular sobre el propósito y la importancia de la daga de plata. Saben que la plata es conocida por su capacidad para dañar a los seres sobrenaturales, como los licántropos. Esto hace que la daga sea aún más intrigante y posiblemente relevante para comprender la historia de la mansión y su relación con los licántropos.

Isabella y Gabriel se dan cuenta de que la daga de plata podría ser una herramienta clave en su búsqueda para desentrañar el misterio de la mansión. Podría ser utilizada para protegerse de posibles amenazas sobrenaturales o incluso para desencadenar eventos cruciales en el desarrollo de la historia.

Al observar cuidadosamente el medallón y la daga,

-Observa esto, cuando coloco la daga sobre el medallón, encajan perfecto – observa Isabella

-Claro, ambos objetos son negativo y positivo, el medallón tiene el símbolo en relieve, mientras que la daga lo tiene esculpido, encajan perfecto –

- ¿Pero para que quieres que encajen, no lo entiendo? - pregunta Isabella

- Fíjate bien, el medallón es la llave y la daga es la palanca, que hace torque sobre la llave –

-Tienes razón, visto así tiene mucha coherencia – responde Isabella

-Ahora ¿Qué abren? No lo sabemos, a lo mejor es lo que no debe ser descubierto según el chamán -

Isabella y Gabriel llegan a la sorprendente conclusión de que ambas piezas en realidad representan una llave. Tras examinar los detalles y el diseño de ambos objetos, notan que encajan perfectamente cuando se colocan uno sobre el otro.

Esta revelación despierta una nueva ola de preguntas y especulaciones en la mente de Isabella y Gabriel. ¿Qué tipo de cerradura podría abrir esta llave? ¿Qué secreto o tesoro podría estar oculto detrás de esa cerradura?

Intrigados por el potencial significado de esta llave, deciden estudiar más a fondo los símbolos y las inscripciones presentes en la daga y el medallón. Utilizando sus conocimientos y habilidades de investigación, se sumergen en la historia y los mitos asociados con estas imágenes y símbolos.

A medida que profundizan en su investigación, descubren que la llave podría tener una conexión directa con la historia ancestral de los licántropos y la mansión. Según las antiguas leyendas, la llave sería capaz de desbloquear un antiguo archivo secreto que contiene información vital sobre la naturaleza y los orígenes de los licántropos, así como un posible remedio para su condición.

Llenos de anticipación y determinación, Isabella y Gabriel se preparan para seguir los pasos de sus ancestros y abrir el camino hacia la verdad. La llave se convierte en un símbolo de esperanza y posibilidad, y los impulsa a continuar su búsqueda con renovada energía.

Siguen investigando, al examinar el área de servicios de la cocina, Isabella y Gabriel se encuentran con una despensa llena de alimentos conservados pero llenos de polvo.

Los estantes están repletos de provisiones bien conservadas ¿Cómo se ha manteniendo la despensa en buen estado de conservación a pesar del paso del tiempo? Es la pregunta que se hacen

Al lado de la despensa, descubren un ahumador antiguo. Dentro del ahumador, todavía se encuentran piernas de cerdo bien conservadas. Esto sugiere que, en algún momento, se preparaban y ahumaban alimentos en este lugar para garantizar el abastecimiento de comida.

Sin embargo, su atención es atraída por una puerta cerrada en la parte trasera de la cocina. Deciden investigar y, al abrirla, se encuentran con unas escaleras que conduce a un sótano oscuro y misterioso. Al descender, descubren que el sótano alberga calabozos con rejas y cadenas, donde personas fueron encadenadas en el pasado.

Los rasguños en las paredes, similares a los que podrían haber sido causados por osos o lobos, revelan la violencia que tuvo lugar en ese lugar. Además, encuentran restos mortales de personas que aparentemente intentaron robar en la mansión, pero terminaron desapareciendo misteriosamente.