Benjamín Desde que Georgia había llegado al bar donde me encontraba con mis amigos, comencé a ponerme muy nervioso. Georgia me ponía nervioso, mucho. Cada vez se volvía más evidente que mis intenciones con ella iban más allá de una simple amistad y es que en el tiempo que llevaba conociéndola me había cautivado por completo. Era hermosa, en todos los aspectos, se preocupaba por todos sus cercanos y vivía para ayudar a los demás en sus problemas. Cada día que transcurría con ella me maldecía por lo idiota que fui al utilizarla como medio para vengarme de Adam. Quizás si todo hubiese sido diferente, en este momento no estaría muriendo por un simple abrazo suyo y tendría incluso más que eso... O tal vez no. ¿Quién sabe? Llevábamos un par de rondas de alcohol, pero yo me había encargado