NARRACIÓN
Después de un gran desayuno la lleva hasta el instituto, parqueando. El lugar está bastante vacío, la acompaña hasta la puerta y se despide con un abrazo. Sube al carro para irse, es lo correcto, ¿con qué excusa se quedaría?
Una hora y media después Romi sale del lugar, observa el carro aún parqueado en el mismo sitio. Su conductor está profundamente dormido en su asiento que lo ha recostado para más comodidad, tiene un antifaz oscuro cubriendo sus ojos y una almohada de cuello. Ella toca la ventanilla.
- Emmet, ¿te encuentras bien?
- Ah - se despierta confundido, frunciendo un poco el ceño cuando se quita el antifaz. Incorpora el asiento y baja el vidrio - sí, me quedé a dormir. Ya sabes, conducir con sueño no es bueno. ¿Cómo te fue?
- Bien, ahora debo ir a l
