Kloe Woods Diariamente viene el abogado del diablo a visitarme, a susurrarme al oído sus malvadas ideas. Es una lucha entre que lo intento convencer de ayudarme y él a mí de cooperar, es un lastre hablar con Chuck y cada vez estoy más irritada, más agotada. ‹‹ Aquí viene de nuevo. ›› pensé y eché un largo suspiro. Enfoqué mejor. Este diablo, es el rey de los demonios, su majestad había venido a visitar mi alma, seguramente mi muerte se aproximaba, un patíbulo me espera en la puerta, un verdugo, y en un mano, un hacha sin afilar. Mi muerte debe ser dolorosa y ese hombre, se encargará de ello. –“Hija”, me rompe el alma verte aquí. –se burla de mí. –George, que sorpresa, te diste cuenta de que, Charles no logra convencerme y decidiste venir por tu propia cuenta. “Si las cosas no salen