"Mario..."
"Ahhhhh..."
"Huumm..si..."
"aaaahh...mmmhhhh...si...si..."
"Mario!"
"Dios mío!
"Mario!"
Acostada en medio de la hermosa cama, Karina es presa del inmenso placer que Mario le otorga con su lengua y dedos en sus pliegues húmedos y rosados.
Karina abrió los ojos y miró con deseo la espalda perfecta de Mario quien aún seguía en sugerentes y diminutos boxers.
El cabello de Mario está un poco despeinado debido a que los dedos de Karina lo habían alborotado.
El aliento caliente del apetecible Escort aumenta enormemente el placer de la joven Karina.
Los ardientes ojos de Mario miran fijamente como la joven Karina arquea su espalda, perdida completamente en el placer que le otorga.
Karina gime, su pecho sube y baja mientras que su orgasmo comienza a construirse en su interior.
La experta boca de Mario sabe perfectamente dónde deslizar su gran lengua húmeda sobre la intimidad de la chica.
Mario es todo un semental ardiente con mucha experiencia.
Las manos de Mario subieron lentamente acariciando el cuerpo semi desnudo de Karina hasta llegar a sus senos.
Las grandes y varoniles manos de Mario amasaron con fuerza y pasión los senos turgentes y firmes de la joven.
Debido a la apremiante pasión que invadió a Karina cuando entraron en la alcoba nupcial, la joven no se molestó en quitarse el diminuto vestido que llevaba puesto ni la tacones altos.
Había perdido todo recato, sentido común y pensamiento racional en el instante que los mordisqueables labios rojos del Escort la habían besado con verdadera hambre.
"Aaaahh!"
"Mario...aaahhh!"
Volvió a gemir Karina pues entre la vista de este magnífico hombre ofreciéndole sexo oral y el placer que sentía, estaba en el paraíso.
Mario tiene un máster en prodigar orgasmos completamente devastadores.
"Marrrriooo..."
"aaaaaahhhhhh!"
"Por todos los cielos, dios...dios!
Fue lo poco que alcanzó a gritar Karina al tener el orgasmo más intenso de toda su vida.
La oleada de sensaciones le había parecido una dulce muerte que estaría gustosa de repetir todos los días de su vida, cada hora del día.
Mientras Mario recorre con sus labios sensuales y carnosos el cuerpo aún tembloroso y jadeante de Karina para colocarse encima de ella.
Ya quiere penetrarla, pero de pronto, unos ojos aparecen en la mente del hombre.
Unos ojos color miel que lo habían visto un par de segundos antes de apartarse velozmente de los suyos.
Esa mujer en verdad que lo había intrigado!
No solo había cerrado los ojos casi durante todo su baile.
Se había atrevido a retirarse en brazos de Gustavo, antes de que Él terminara su ardiente show.
Y ahora era la maldita novia de Gustavo!
Que una mujer se retirase antes de que Él terminara su sensual y cadencioso baile le había pasado pocas veces a Mario en el pasado.
Y había sido antes de convertirse en el más solicitado y codiciado Escort del ramo.
Un enfado que hacia años no sentía Mario se apoderó de Él cuando observó como esa mujer y Gustavo se besaban apasionadamente.
Y definitivamente terminó de enfadar aún más a Mario los gritos de felicidad y complicidad de sus amigas y las invitadas a la despedida de soltera.
Mario no soportó atestiguar como Gustavo cargó a Lily hasta recostarla en el sillón para después colocarse encima de ella sin dejar de besarla ardientemente.
Debido a eso, Mario había cargado escaleras arriba a Karina hacía la habitación nupcial.
En esa enorme cama, Mario no estaba dándole placer a la joven Karina.
En su mente, Mario estaba poseyendo a Lily de forma apasionada y brutal.
Con el cuerpo de Karina, Mario quería satisfacer su deseo irrefrenable por ella.
Ese deseo lo quema, pues es el deseo de poseer lo que no puede tener en ese momento.
Mario quería demostrarle a esa intrigante mujer que Él era mil veces mejor que Gustavo en todo aspecto.
Y que era millones de veces mejor que su Escort en la cama.
Él era mejor que cualquiera sus Escorts!
Mario siempre se ha considerado lo mejor de lo mejor ya que se lo habían hecho saber miles de mujeres en el pasado.
Por eso, el orgullo de Mario había sido herido sin querer por "La novia de Gustavo."
De solo pensar en esa idea, Mario se enojo todavia más!
"Mario, está todo bien?"
Preguntó Karina quien observó a Mario quien se había quedado un segundo en silencio y sin moverse.
"Perdona encanto!"
"Todo está perfecto."
"Estás lista?"
Karina asintió pasando sus delicadas y suaves manos por todo el musculoso y definido torso del gran Mario.
El caliente, duro y enorme m*****o de Mario penetró con fuerza a una ansiosa Karina.
Ella gimió de felicidad atrapada bajo el tonificado cuerpo de Mario.
Con sus piernas, Karina lo abrazó, mientras sus manos le arañaban la espalda.
El duro, gordo, lleno de venas y maravilloso m*****o de Mario comenzó su cadencioso ritmo...
Primero, dulcemente, hasta que sus embestidas fueron más rápidas, profundas y con fuertes.
Mario hizo gala de todas las posiciones que sabía.
Se tomó su tiempo para complacer a Karina quien por segunda y tercera vez llegó al orgasmo.
Orgasmos que la dejaron temblorosa, sudorosa y extasiada.
Un poco después Mario también lo alcanzó.
Se sentía muy satisfecho al ver a Karina agitada agotada, feliz y muy complacida.
"Eres un Dios del sexo."
Susurró con una sonrisa amplia Karina después de haber recuperado su aliento.
"Lo crees encanto?"
Cuestionó Mario, ansioso de sentir su ego elevado.
"Por supuesto que si!"
"Ha sido el mejor sexo que he tenido en toda mi vida!"
Comento complacida Karina mirando al delicioso espécimen recostado a su lado.
"Gracias encanto, ha sido un placer haberte dejado satisfecha."
Mario sonrió de lado.
"Satisfecha se queda corto!"
"Como podré vivir sin ti ahora, Mario?"
Cuestionó con algo de tristeza la joven novia.
"Vivirás encanto, lo harás."
"Y ahora te toca a ti entrenar a tu futuro esposo para que te dé placer."
Mario desliza sus dedos por la piel suave de la joven, haciendo que ella cierre los ojos al sentir su toque.
"Javier es entusiasta pero jamás estará a tu altura, Mario."
Responde con aplomo Karina.
"Puedo volver a repetir está experiencia?"
Esperanzada, Karina acaricia la varonil y dura cara de Mario.
"Sabes que no puedes encanto."
"Lo sabías con anticipación, está en el contrato que ambos firmamos."
"Yo solo soy tu despedida de soltera."
La voz de Mario llena de tristeza a la joven novia.
"Ni siquiera porque te vuelvas a casar tendré sexo contigo otra vez."
Una de las clausulas para contratar los servicios del Gran Mario es que tendrás, solo por una vez, el maravilloso privilegio de que Él te posea, de la forma en que tu decidas.
Pero solo era una UNICA e IRREPETIBLE vez.
"Recuerdo perfectamente la clausula más sobresaliente de tu contrato, Mario."
"Es solo que ha sido tan increíble..."
"Eres tan increible en la cama, bailando, besando."
Karina deja escapar una sonora exclamación mientras que toma la delicada sabana para poder cubrir su cuerpo desnudo.
"Lo sé encanto, lo sé..."
Despues de darle un beso pequeño en los labios, Mario se levantó de la cama.
Se quitó el condón usado, el cual terminó en el fondo del bote de basura y se dispuso a entrar a la ducha.
Karina se deleitó con la vista del firme y respingón trasero de Mario antes de que ese suculento hombre desapareciera en el baño.
Estirándose en la cama, Karina sonrió mientras que las imágenes de su reciente encuentro s****l con Mario pasaron por su mente una y otra vez.
Mientras se arreglaba el vestido y máquillaje antes de salir de la habitación para seguir divirtiéndose en la fiesta hasta bien entrada la mañana, Karina echó un último vistazo al cuerpo de ese monumento de hombre.
Mario en la regadera, con ese vapor y su cuerpo completamente mojado era todavía más sensual!
De nuevo otra oleada de placer le recorrió el cuerpo por completo.
El gran m*****o, ahora flácido, de Mario había estado dentro de ella, haciéndole sentir tanto placer, que pensó que en algun momento moriría en sus brazos.
Ademas de que le había dado un catedra de posiciones nuevas.
Las cuales, definitivamente pondría en practica con Javier en su noche de bodas.
Regresando su mente al presente, Karina grabó en su mente, para futuras ocasiones, los detalles del escultural cuerpo de Mario.
Un cuerpo al que había sido muy afortunada por recorrer, apretar, lamer y morder.
"De verdad que lo que cuentan de ti no son exageraciones sino toda la verdad. "
"Incluso se quedan cortas las anécdotas."
"Lástima que no pueda repetirla."
Susurró Karina antes de darse la vuelta y salir de la habitacion, muy a su pesar.
Cerrando la puerta, Karina se dispuso a bajar las escaleras mientras Mario bajo el cálido torrente de agua cerraba los ojos en ese momento.
Mario pensaba en otros ojos en ese momento mientras el agua caliente se deslizaba por su piel de satén y sus cuidados musculos..
Se habrá acostado con Él?
La habrá dejado complacida Gustavo?
Solo tal vez...
Esa chica también había buscado el alivio inmediato ya que ella no podía intimar con Él.
Ni Mario podía intimar con ella.
Al menos no esa noche.
Cerrando el agua, después de haber lavado a conciencia su cuerpo, Mario sigue preguntándose porque le interesa tanto lo que esa chica hiciera o dejara de hacer con uno de sus Escorts.
Sacudiéndose sus pensamientos, tomó una de las suaves toallas blancas disponibles para comenzar a secar su glorioso cuerpo.
No es que Mario no hubiera disfrutado esa noche con Karina, quien fue muy cooperativa, sensual y excitante.
La línea de trabajo de Mario siempre había sido muy placentera, disfrutable y cobraba cantidades obscenas de dinero por tener sexo con sus clientas.
Entonces, porque esta vez se sentía como insatisfecho?
***By Liliana Situ***