–Quiero ver el de color lila otra vez.
–Aquí está, señor.
La vendedora le mostró el diminuto vestido a Barry, él tenía que admitir que lo último que pensó en la vida fue en comprar algo como un diminuto vestido y no que en referencia a la escasez de tela para una mujer adulta, el minivestido era para una bebé que ni siquiera había nacido.
La pregunta era...
¿Cómo terminó Bartolomeo Stand en una tienda para bebés?
Después de regresar al apartamento de la visita con la ginecóloga, Melody se fue directo a su habitación y se encerró el resto de la noche, sin salir a comer, cuando iba a tocar a su puerta escuchó aquellos sollozos del otro lado y en lugar de entrar, la mejor idea de Barry fue dejarla tranquila. Por la mañana Melody aunque seguramente sintiera el olor al desayuno no apare
