CAPÍTULO ONCE Tuvo ese sueño de nuevo Frank Nobilini había venido caminando hacia ella, pisando la sangre que se había derramado en el baño. Solo que esta vez, en lugar de venir su esposa detrás de él, estaba acompañado por Jack Tucker. Ambos sostenían pistolas, que extendían hacia ella. —Aquí —decía Frank—. Hazlo. Dispáranos. Mátanos. Es lo mismo que no encontrar a quien nos hizo estos orificios detrás de nuestras cabezas. Se volvió para mostrar el orificio al que se refería. Jack hizo lo mismo. Al darle la espalda a ella, los orificios comenzaron a aumentar de tamaño, devorando el resto de las cabezas como si se tratase de un extraño hongo. Kate se despertó sobresaltada, con el corazón saliéndose de su pecho. Sintió el estómago revuelto al pensar en la última imagen del sueño y por