Un Novio de Mentira 《Yoonmin》

14: "Cuestión de tiempo"

Seokjin sonrió al encontrarse con la amplia y brillante sonrisa de la persona a su lado, y... ¿cómo era esa frase? "¿Después de la tormenta siempre sale el sol?". Justamente aquello le estaba pasando a Park Jimin, su sonrisa era hermosa y sus ánimos energéticos, era lo único que necesitaba Seokjin para también mejorar sus ánimos caídos. Era momento de cambiar de página y dejar de esperar lo imposible, dejar de esperarlo a él... Una última mirada y sonrió para sí mismo.

—Yoongi es un idiota— Soltó de repente, sin borrar su sonrisa y Jimin no pudo negar la dedicatoria, pues...

El silbato se escuchó, el entrenador llamó a los dos equipos en juego. Yoongi y Chanyeol eran rivales, ¿cómo pasó?, simplemente Yoongi se había tomado las molestias de hablar con Donghae y, como él era tan buena persona le hablo del chico alto, pero bien, lo convenció de ubicarlo en el equipo rival en los entrenamientos. Solo quería algo de diversión ya que no iba a moler su rostro.

—Se toma bastante en serio su papel como tu novio, eh?— Jin le dedicó una mirada cómplice la cual por supuesto Jimin pasó por alto al no darse cuenta —Ambos son buenos actores—

—Jin... estoy tratando de adivinar qué es lo que tratas de decirme— Ladeo sus labios pensativo, tenía una incógnita enorme reflejada en su rostro y Jin rió por ello. —¿Qué?— Arrugó su nariz.

—Nada, nada. Mira, ahí van de nuevo— Avisó.

Los equipos volvieron a la cancha y el silbato sonó para dar comienzo a la otra mitad del juego. Los pequeños ojos de Park deberían de estar observando a una persona en particular y lo hacían, pero no era la persona correcta la cual miraban. Se supone que debería de haberse quedado maravillado al ver nuevamente jugar a su ex; él cuando eran novios no le quitaba la vista de encima, ahora... ahora el cuento era otro. Él se perdía por alguien si, pero era por un ágil y rápido Min Yoongi. No le faltaban las ganas de ir y arrebatarles el cartel a las animadoras improvisadas, y alentarlo él personalmente, pero rayos, su timidez era enorme.

Ni bien pasaron los cinco minutos de juego, un celular se escuchó, Jin fue cauteloso en ver de quien se trataba. Sonrió, pero no transmitía una real sentimiento. Aun así sería muy pronto mostrar emoción alguna, solo se quedo pensando demasiado en entender o no.

—Jin... apaga eso— Jimin le dijo con una leve arruga en su entre cejo, pues la melodiosa voz de Selena Gómez estaba realmente siendo molesta en esta ocasión, él quería disfrutar del partido. —¿Hyung?— ahora sí se giró a verlo, su amigo observaba la pantalla de su celular, estaba totalmente en modo ido. —¿Jaebum?— Nombró al poder ver el nombre que se mostraba en la pantalla.

Jin despertó —Acepte salir con él—Sonrió con pena, él no le había dicho nada y Jimin puso una cara de poco amigo pero luego se transformó a una emocionada, dejando su boca entreabierta —Te juro que es muy, muy reciente... ayer— No estaba excusándose, estaba siendo sincero y algo tímido, solo un poco tímido.

—Uh... él sigue llamando, será mejor que lo atiendas— Jimin le recordó en sonrisa cálida, era hora de que Jin dejara de ver sólo a una persona y buscar a alguien que realmente no lo piense demasiado. Ya saben, Namjoon es realmente rebuscado.

Seokjin asintió y atendió por fin, y mientras la llamada transcurría Jimin mirada curioso, buscando alguna emoción en su amigo pero no lo encontró, tal vez solo era demasiado pronto y el tiempo tenía que hacer su magia.

—Claro... no harás de nuestro entrenamiento una cita...— Jin rió un poco —Eso, eso estaría bien. Entonces a las seis... adiós— Y la llamada finalizó. Jin nuevamente volvió su vista hacia Jimin —Entiendo esa mirada—

—Tenemos que hablar— Ambos concluyeron.

—¡Muy bien señoritas, ahora vayan a las duchas!—

La voz del entrenador se escuchó siempre tan bromista y rudo. Pero bien, Yoongi no dirigió su existencia hacia las duchas, tenía otros planes y aquellos planes incluía al pequeño koala de nombre Jimin. Así que con botella en mano caminó hacia él y lo atrajo a su cuerpo al rodearlo de los hombros.

—¡Ugh!— Jimin no tardó en exclamar —¡Estas empapado en sudor, aléjate!— Trató de soltarse pero con un Yoongi de buen humor no se podía. Así que si, el menor se dijo a sí mismo que luego tomaría una ducha.

—Deberías de estar abrazándome ahora mismo— Le dijo al terminar de beber de la botella de agua.

Jimin negó, él podía ver las gotas de sudor en el cuello del pálido, estos se perdían en su camino hacía abajo. Además... solo había mucho sudor.

—Eres un mal novio— Yoongi se lo llevó consigo ante la atenta mirada de Seokjin, claro este los seguía también, pero no hacía falta decir que a Min le importaba poco el ser observado.

—Yoongi...— Jimin lloriqueo —Apestas— Trato de empujarlo nuevamente.

—Claro que si, y tú estarías igual si hubieras jugado como yo lo hice— Aun así por fin lo liberó y Jimin volvió a respirar. Exagerado. —Y...- Dirigió su mirada al amigo de su "novio" —No es que me moleste tu presencia ni nada, ¿pero qué haces todavía acá? Deberías irte—

Y bien, si Seokjin no se sentía intimidado por Jaebum que era su entrenador personal de cuerpo bien formado, él totalmente para nada se sentiría intimidado por el delgado de Min. Yoongi podría mostrarse rudo y fuerte, y de hecho lo era, pero vamos, no era la gran cosa.

—No te metas conmigo, Min— Fue desafiante, en postura totalmente calma y restándole importancia la rudeza contraria —A diferencia de tu amigo, yo si podría dejarte inconsciente en el suelo—

Yoongi sonrió ladino —A eso le llamo tener agallas, y no mal entiendas, me agradas—

—Oh...— Y Jimin pensó que ellos dos podrían ser muy buenos amigos. Claramente no veía a profundidad, pues catalogarlos como buenos amigos.. eso era todavía muy reciente y demasiado ahora, tal vez en un futuro cercano. Dejó de mirarlos al dar con otra persona.

—Jimin— Su sonrisa se amplió al nombrarlo.

—Uhm.. Hola Chanyeol— Saludo en tonos bajos —¿Cansado?— ¿Cómo no estarlo si prácticamente luchó contra Min en el juego?. Chanyeol suspiró y asintió, —¿Un poco de agua?— Le ofreció de su bebida.

—Gracias— Tomó lo ofrecido con cierta rapidez —De kiwi, siempre te gustó el jugo de kiwi—

Perfectamente las palabras del flacucho llegaron a los oídos de Yoongi. ¿Kiwi? ¿A Jimin le gustaba el jugo de Kiwi?, ¿no era un dato insignificante lo que el chico alto sabia a comparación de lo que él sabía?, Yoongi no evito pensar. De todas formas algo vibró dentro suyo, de pronto la palabra -promesa- apareció de manera gigante en su cabeza. No golpear. Genial.

—Borra esa cara Min, ¿qué ocurre? de repente estás muy tenso. ¿Acaso te molesta verlos hacer nada más que hablar?— Y Seokjin no estaba equivocado, podría ser que Min Yoongi se esté-

—No se de que hablas— El ruido del metal chocar resonó, no lo culpen, tenía fuerza y su casillero era una basura que estaba en buenas condiciones, —Solo hablan— Se dijo, le dijó.

—Lo hacen, sabes, no le tenía fé a esta idea descabellada, pero si sigue como ahora entonces ellos rápidamente volverán a ser la pareja que eran. Chanyeol se arrepentirá y Jiminnie lo perdonara— se encogió de hombros, y siguió diciéndole:—Ya sabes como termina la historia— Quería lograr algo, no estaba seguro de que sea buena idea, pero puede que tal vez Yoongi no sea el chico malo que muestra ser. —¿Esa fue una sonrisa?— Ambos veían a Jimin, Jin sonrió al ver de reojo a Yoongi. No podía confirmar nada, pero a su parecer Min ardía de celos. Una conclusión bastante apresurada.

Yoongi caminó hacia ellos, no tardo nada en estar al lado de Jimin y en volver a posar su brazo sobre los suaves hombros. También no tardó nada en apegar su nariz a los cabellos castaños de su "novio". Jimin se tensó y abrió un poquito más los ojos, no quería moverse pero lo hizo, elevó su cabeza y atrapó la mirada del chico pálido. Yoongi no lo pensó demasiado, por su cabeza solo pasaban esas estúpidas palabras de Jin, y no evitó el imaginarse un futuro desagradable. Gruñó por lo bajo haciendo su aliento chocar en la mejilla sonrojada de Jimin. Él beso su mejilla.

Chanyeol contrajo su dedos y sus manos mostraron puños. Seokjin se mantenía de espectador a brazos cruzados, él solo intervendría si es que Jiminnie quedará atrapado entre esos dos de manera peligrosa, pero el único que estaba mostrándose realmente furioso era Chanyeol, así que. No movió ni un solo musculo.

Los labios de Yoongi se deslizaron un poco más abajo, era como estar mirándolo en cámara lenta. Yoongi quería ser visto, quería que Chanyeol mirase y viera cuál era su oportunidad con su "novio". Que viera que ya no tenia oportunidad con él, porque... ¿por qué?.

"¿Por qué?". —Hora de irnos— Susurró cerca de sus labios. Jimin no sabía que estaba pasando, tampoco supo cuando fue que se despidió de Chanyeol o de Seokjin ¿Lo había hecho siquiera?. Tampoco estuvo cuando se aferro al acuerpo sudoroso de Yooongi al subir a su motocicleta.

En fin, para cuando despertó él extrañamente se encontraba en un baño de tonos blanco y n***o que no le pertenecía.

—Será mejor que te apresures, Baek no tardará en volver y te aseguro que te sacara a patadas y desnudo— Le avisó Yoongi dejando la habitación de su hermano menor. Jimin miró alrededor, claro, él había escuchado la palabra -ducha-. Si, él necesitaba de una.

Sus dedos acariciaron su mejilla y suspiró totalmente encantado al recordar, pero rápidamente sacudió su cabeza de manera frenética. —¡Ducha!— Se recordó.

... Todo estaba yendo bastante bien, de hecho Yoongi había sido amable en prestarle de su ropa a Jimin, claro ahora el niño se asemejaba a un pastel de arroz japonés con ese gran buzo blanco, pero estaba bien y olía bien. Lo que no estaba yendo tan bien y era contradictorio, era esa parte, porque al parecer a Yoongi realmente le había parecido mala idea en compartir su ropa, simplemente se arrepintió cuando se lo vio puesto.

Jimin podía fácilmente sentir la mirada de Yoongi sobre él, era un poco molesto pues... —Puedo quitármelo si te molesta— Le dijo casi refunfuñando porque aunque haya dicho aquello él no iba sacarse el buzo, era calentito.

—¿Dije que me molestara?— Pregunto mirándolo fijo, Agh! Jimin quería aventarle algo en la cara. ¡Claramente estaba moleste de prestarle su ropa! —Simplemente mi ropa no te va—

El menor estiró sus brazos, ciertamente la prenda era de tallas mayores, pero no estaba mal. —Esta bien—

Pero había algo, algo que lograba molestar sus sesos y Yoongi no lo soporto, solo ladro:—¡Desvístete!, digo— Frunció su ceño y tal vez sus mejillas dejaron de ser porcelana —Devuélveme el buzo—

—Eh?— Rápidamente se abrazó a su cuerpo, negándose totalmente. —¡No, realmente esta bien!—

—No, no lo esta—

—Ah!— Exclamó al ser Min poco suave al hacerle caer sobre el colchón —¡No quiero!—

La puerta se abrió —Yoongi, papá quiso subir a tu motocicleta y la chocó contra...- Dejo de hablar al verlos —¿No paran nunca o qué?—

—No...-

—¿¡Que papá hizo que con mi motocicleta!?— Dejó de estar encima de Jimin y como si estuviere entrenado él corrió fuera de la habitación.

Baekhyun con mirada de poco amigos quedo a solas con Jimin, el pequeño se enderezó lentamente y mirando hacia otra parte que no sea el hermano menor de Yoongi se bajó el buzo. No hacía falta decir que sus mejillas quemaban.

—Luces todo inocente, pero en realidad eres todo un sátiro ¿verdad?—

Y si Jimin supiera que era sátiro él definitivamente se hubiera ahogado con el mismísimo aire, así que solo se animó a mirarlo aun con vergüenza —¿Qué es...-

Baek alzó su mano moviéndola —No, ni siquiera lo niegues. Bien, adiós— Cuando se giró ocurrió lo menos pensado, una foto cayó como Jimin era una persona amable y gentil él levantó la fotografía, Oh.. otra foto con el mismo chico de antes y también con los mismos corazoncitos alrededor.

Jimin silencio y cuando quiso darse cuenta el chico de n***o había desaparecido, frunció sus labios y también dejó la habitación con él fin de ir a la ajena y entregar la fotografía, fue en ese momento donde Min hizo acto de presencia, totalmente enfadado y gritando algo así como:—¡Papá, ya no eres un adolescente! ¡Mi motocicleta tuvo suerte de solo sufrir un raspón!—

—¡Es bueno saber que te preocupas por tu padre, hijo!— El hombre le gritó desde abajo.

—¡Madura!— Yoongi puso los ojos en blanco, —¿Y tú qué?—. Jimin frunció el ceño por el tono contrario, pero no se olvidó de la fotografía en manos, sus movimientos fueron sospechosos al ubicar con rapidez sus brazos detrás de su espalda. Ocultando algo. Min entrecerró los ojos. —¿Qué traes ahí?—

—N-nada...— Vaya mal mentiroso que era.

—¿Te han dicho alguna vez que eres terrible mintiendo?— Preguntó mientras se acercaba amenazante, como si estuviera cazando a su presa.

—De echo.. si, muchas veces—. Seokjin-hyung solía recordárselo siempre, —Pe-pero...- Ah!—

Yoongi se le echó encima como todo un puma joven, y Jimin simplemente dio contra la pared comenzando el forcejeo. Y como era de esperarse tanto ruido por supuesto que llamó la atención, la atención de cierto menor con aires de rockero.

—Ustedes en serio... al menos háganlo en la habitación y no en medio del pasillo par de con- Sus ojos vieron una fotografía caer, revisó sus bolsillos y por poco, por muy poco casi chilla horrorizado. A pisaras rápidas camino hacia ellos y los empujo lejos, oculto la fotografía dentro de su chaleco de jean y corrió como en aquella vez que salió huyendo de la tienda de tatuajes tras no haber pagado. Había sido todo un corredor profesional.

—¿Qué fue eso?— Yoongi preguntó al aire y luego se dirigió a Jimin por una respuesta, este negó sin saber. Mentiroso. —Será mejor que hables, ahora— Amenazador, pero más lo era Baekhyun así que se mantuvo callado. —¿Ustedes ni siquiera se conocen y ya tienen secretos?—

—No es así...—

—Ajá, como sea, no me interesa. Solo dime algo... ¿lo que oculta mi hermanito es vergonzoso?— Sonrió ladino. Siendo puramente malvado.

—¿No?—

—Hablaras, Park— Dejó de estar encima suyo y caminó hacia su habitación, Jimin lo siguió pero antes de entrar escucho una puerta abrirse y pudo ver perfectamente a Baek, él chico le hizo una seña mortal, su pulgar pasó lentamente por su garganta. Algo así como:-"Hablas y eres hombre muerto"-

—¡Ah!—

—¡Park, rápido!— Le llamó Yoongi.

¿¡Qué ocurre con estos hermanos!?

...

Jimin no quería, Yoongi tampoco quería pero no se opuso o dijo algo para impedirlo. La Sra. Park había ido a casa de los Min con el fin de llevar a su hijo devuelta a casa, no lo estaba haciendo por mala ni nada parecido, simplemente quería tener una cena familiar, pues los abuelos habían caído de visita.

—No es gusto, no ni siquiera le agrado a la abuela— Refunfuñó Jimin caminado detrás de su madre.

—Sabes que es mentira—

Era una enorme mentira, su abuela lo amaba y cada que podía apretujaba sus mejillas y Jimin echaba risitas encantado, pero ahora Park solo quería pasar otra tarde y tal vez noche, al lado de Yoongi.

—No es gusto, no es gusto, no es gusto—

—¿Esa será tu palabra del día hijo?— La mujer rió —Ese chico te tiene tonto, ¿verdad?—

Las mejillas de Jimin se encendieron y las ocultó detrás de sus manos —¡Mamá!—. Ellos solo eran novios de mentira, entonces.. ¿por qué actuaba así? ¿por qué se mostraba realmente avergonzado? —Estas equivocada...—

—Claro, y yo nací ayer— Rió —ahora entra y abraza a tus abuelos—

Jimin corrió hacia sus mayores y los saludo como si hubieran pasado años en verse, solo habían pasado meses, dos para ser exactos.

La cena había empezado de buena manera y daba señales de tambien terminar perfectamente, pero el timbre sonó, y fue tan sorprendente la presencia de Yoongi que Jimin escupió de su bebida en la cara de su abuela —¡Abuela, lo siento abuela!—

—¿Yoongi? Cariño, ¿pero qué haces aquí?—

—¿Mi madre no le comento que soy fan de la comida china?— Interesado.

La mujer suspiró pero vio a través del mocoso —Pasa y puedes tomar asiento junto a hijo, y Yoongi, tu madre sí mencionó sobre tus gustos gastronómicos. Pensé que la comida japonesa era más de tu gusto— Le sonrió divertida. Quién lo iba a decir, todo rudo y malo pero en el fondo un chico bueno. —¿Qué esperas?, vamos, pasa—

Yoongi trago saliva rascando su nuca, diciéndose a sí mismo que la comida china también le parecía buena. Bobadas. Tomó asiento al lado de Jimin, —Hey, cuando tiempo sin vernos— Bromista. —Todavía traes mi buzo—

Jimin se agachó la mirada y confirmó —Uh.. sí, supongo que ahora es mía— Le sonrió.

—Solo si me ganas en los videojuegos—

Jimin asintió, proponiendo:—¿Mortal kombat?—

—Pateare tu trasero, Park— Yoongi aceptó.

—No pasara— Se apego mucho más a su lado, solo quería empujarlo un poco y hacerlo caer, pero no paso, solo quedo muy apegado al cuerpo de Min.

Esa noche Min conoció a los abuelos de Jimin, y nunca antes en su vida habían pellizcado sus mejillas de esa tortuosa manera, solo pudo gruñirles por lo bajo sin hacerles algun comentario desagradable. También esa noche fue terriblemente malo en Mortal Kombat y Jimin cantó victoria en medio de saltitos mientras se abrazaba al cálido buzo que ahora le pertenecía.