CAPÍTULO DIECISIETE Volusia caminaba lentamente a través de la ciudad de Dansk ante el fondo de una maravillosa puesta de sol color escarlata, los fuegos todavía rugían a su alrededor mientras ella sondeaba la ciudad, iluminando el anochecer. Se sentía victoriosa. Pasó por todas las rocas que ella había catapultado hasta la ciudad, todavía en llamas, pasó por montones de escombros, de ruinas, muros de la ciudad que habían estado allí durante siglos ahora no eran más que restos. Pasó por montones de c*******s, personas todavía agonizando, otros todavía aferrándose a la vida, quejándose, todavía quemándose vivos. Pasó por montones de soldados, nada más que c*******s chamuscados, sus armas derretidas con sus manos. E hizo un amplia sonrisa. El saqueo de Volusia de esta ciudad había sido de