CAPÍTULO VEINTISÉIS

1010 Words
  ZARA   La semana no pudo haber empezado peor, no sólo empecé a recibir miradas curiosas desde el momento en que Dominic me dejó en la entrada de la empresa, pues aún no puedo conducir y ya que él se quedó en mi apartamento anoche, aunque no pasó nada entre nosotros, él estaba demasiado ensimismado con el asunto de su madre, y yo tenía mi cabeza llena de recuerdos de Tom; Dominic se ofreció a traerme a la oficina y recogerme cuando saliera, por mucho que traté de convencerlo que no era necesario y simplemente podía solicitar un chofer, él insistió.   Asumo que lo hace para ser extra amable conmigo y que después no me arrepienta de ir a conocer a sus padres, pero no tiene razón para preocuparse, le hice una promesa y tengo todas las intenciones de cumplirla.   Los empleados que iban entrando al edificio en ese momento, empezaron a murmurar entre ellos y sé que no lo hacían sólo por mi brazo, sino por el hecho de que un hombre me estuviese trayendo al trabajo, pues las pocas veces en que Dominic lo ha hecho, siempre he llegado más temprano o más tarde que los demás para evitar los comentarios; sin embargo hoy dormimos un poco de más y por eso no pudimos llegar más temprano, por lo cual ya estoy empezando a arrepentirme.   No obstante, trato de ignorar las miradas curiosas y los cuchicheos e ir directamente a mi oficina en donde sé que me espera mucho trabajo, incluida una reunión de emergencia que fue convocada por el jefe de operaciones, y para mi desgracia, el jefe de la división de tecnología fue convocado también y es más que seguro que él llevará a Tom, tal como ha hecho los últimos meses.   Paso la mañana hecha un completo lío, no sólo es cien veces más difícil hacer mi trabajo con una sola mano, sino que el software de voz que me instalaron para que pueda dictar todo a mi computadora sin tener que teclear, me está sacando de quicio, pues por alguna razón confunde mis órdenes y tengo que volver a rehacer muchas cosas.   Podría conseguir a alguien que hiciera esto por mí, pero sería un desperdicio del tiempo de algún empleado, sin contar con que soy la CEO de una de las compañías líderes en tecnología, por lo que no ser capaz de utilizar un simple programa con comando de voz, sería una vergüenza monumental que no estoy dispuesta a pasar.   Cuando llega la hora de la reunión estoy un poco ansiosa por saber que veré a Tom de nuevo, desde que lo vi ebrio y medio desnudo acompañado de su ex, trato de prepararme mentalmente para ello, de respirar profundo y convencerme de que estoy bien y que debo fingir como si nada hubiese pasado, aunque me cueste mucho trabajo, pues en esos días con él dejé caer mis muros y lo dejé entrar en una parte de mi vida a la que casi nadie tiene acceso, por lo que sacarlo de ahí no ha sido nada fácil.   Sin tiempo que perder, me aliso la falda del vestido con mi mano buena y trato de peinar un poco mi cabello, me miro en el espejo para verificar que mi rostro no parezca el de un c*****r, y después de aplicar un poco de rubor y brillo de labios, me dirijo a la sala de conferencias en donde ya todos los que fueron convocados a la reunión están sentados esperando por mí.   Para mi desgracia, llego justo en el momento en el que James, el jefe de Tom, está bromeando con él y preguntándole por la chica rubia que salió a hurtadillas de su habitación de hotel y que parecía estar dando la caminata de la vergüenza, en ese instante siento mi mente nublarse de rabia, aprieto con fuerza mis puños, lo cual hace que mi brazo izquierdo empiece a doler inmediatamente, y siento ganas de gritar a todo el mundo, pero hago mi mejor esfuerzo por contenerme.   ¿Así que ella pasó la noche con él?   ¿Y aún así el tuvo la audacia de fingir preocupación y preguntarle a Lucy por mí?   ¿Así que él quiere jugar al amante despechado y preocupado? Pues le daré razones para preocuparse.   Entro a la sala de juntas en el momento exacto en que Tom está abriendo la boca para contestar al comentario de James, y es claro por mi actitud y su mirada de sorpresa y culpa, que ellos saben que escuché todo, por lo que un silencio abrumador se instala en la sala y sólo es interrumpido por el sonido de Susan entrando detrás de mí y preguntándole a todos qué van a querer de tomar.   Para mi satisfacción, después de que nos traen las bebidas, la jefe de operaciones, quien fue mi jefe en algún punto cuando estaba trabajando en la compañía y me tomó confianza como si fuera una tía genial, me sonríe con malicia tan pronto como me siento y dice en voz alta:   “Así que, escuché por ahí en los pasillos que tu nuevo novio te trajo a la empresa esta mañana,”   Y trato de ocultar mi sonrisa cuando escucho a Tom atorarse con el agua que estaba tomando y luego empezar a toser disimuladamente; así que en vez de evitar el tema como normalmente hubiera hecho, decido usar esto a mi favor y responderle como si cualquier cosa.   “Si, se ofreció a traerme y recogerme ya que yo no puedo manejar, le dije que no era necesario, pero él insistió,” le digo y ella me mira un poco sorprendida, pues nunca he hablado con ella de mi vida privada.   “¡Qué caballero!” ella exclama.   “Si, mucho… pero bueno, empecemos la reunión,” respondo mientras miro alrededor y veo que todos me están viendo como si me hubiesen salido tres cabezas, todos excepto Tom, quien tiene el ceño fruncido y pareciera estar a punto de explotar, pero decido ignorarlo y empezar la reunión.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD