Miss CEO (Versión en Español)

CAPÍTULO VEINTIOCHO

ZARA

Cuando vuelvo nuevamente a mi oficina estoy echando humo, no puedo creer lo que acaba de pasar en esa reunión, ahora seguramente voy a tener que aguantar que la mujer que llevo odiando durante los últimos días, venga a trabajar a mi empresa.

Lo peor es que no hay nada que pueda hacer al respecto, quiero decir, si podría hacer algo, pero no debo, sé que ella es buena, hice una pequeña investigación sobre ella y sí que sería una buena adición a nuestra empresa, pero no soy capaz de pasar por alto lo demás, por eso es que desde el principio había decidió no involucrarme con Tom, al menos no por ahora, mi prioridad debe ser la compañía en este momento, hay cientos de familias que dependen de esto, no puedo dejar que un hombre me distraiga de lo que es verdaderamente importante.

Si no fuera por mi historia con Tom y lo que pasó entre nosotros en el viaje, yo hubiese sido la primera en pedir que la contrataran, diablos, hasta la hubiese llamado yo misma, pero dejé que las cosas se complicaran y eso ya empezó a afectar mi trabajo.

Además que no me puedo sacar de la cabeza lo que dijo James acerca de ver a la rubia salir a hurtadillas de la habitación de Tom por la mañana, lo que indica que efectivamente no estaba creando historias falsas en mi cabeza después de la escena que yo misma presencié en su habitación de hotel, ellos sí durmieron juntos y no fui la única testigo de eso.

No debí haber sido tan tonta como para dejarme llevar de él y su dulce sonrisa que parece borrar todos los males del mundo, sé que será imposible evitarlo completamente, no sólo porque trabaja en mi compañía, sino porque también es amigo de mi hermano y su prometida, lo cual significa que no sólo lo tendré que ver en la oficina, sino que es probable que me lo encuentre en otro tipo de eventos.

Lo cual me recuerda que este sábado es la inauguración del restaurante de comida colombiana de la mamá de Lucy y es casi seguro que Tom irá, por lo que debo prepararme mentalmente para ello y tratar de que su presencia allí no me afecte, además que sé que él tratará de hablar conmigo allí y no creo que sea buena idea, debo pensar en formas de evitar eso.

O tal vez puedo evitar ir, tengo la excusa perfecta pues al día siguiente viajamos con Dominic a Londres, puedo simplemente decirles que nos vamos un día antes y nadie podrá rebatir eso, les enviaré algún regalo y trataré de postear una foto en mis r************* para ayudarles con la publicidad, con eso será más que suficiente.

Con esto en mente, tomo mi teléfono con la intención de escribirle a Dominic un mensaje y preguntarle si podemos irnos un día antes de lo planeado, pero para mi mala suerte, él me responde que ese día tiene una reunión importante justo después de la inauguración del restaurante, a la que también lo invitaron pues él fue el encargado de llevar el caso del padre de Lucy, por lo que le han tomado cariño.

Sé que es inútil pedirle que reprograme su reunión, pues ya me explicó que el cliente aceptó verlo a esa hora pues es el único espacio que tiene antes de irse de viaje también, y por lo que Dominic me dice, es un cliente bastante importante, por lo que no puede simplemente cancelarle porque su novia se lo pide.

Tendré que dejar de ser tan tonta y afrontar las cosas como vengan, simplemente trataré de concentrarme en mi trabajo de esta semana, el cual es mucho, debido a que debo dejar todo en orden antes de irme con Dominic a Londres, además de que tuve que pedirle a Susan que adelantara algunas de las reuniones que ya tenía programadas para la otra semana y cancelara el resto de compromisos.

Pensando en la cantidad astronómica de trabajo que tengo por delante, me siento frente a mi computador a luchar de nuevo contra el programa de comando de voz y rápidamente el asunto con Tom se escapa de mis pensamientos.

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TOM

No pensé que fuera tan fácil convencer a Sophia de que aceptara el trabajo aquí, creo que si yo no se lo hubiese pedido, ella probablemente hubiese aplicado para el puesto de todas formas, estaba tan emocionada que ni siquiera me dejó terminar de hablar, y aún me faltaba por decirle cuánto sería su sueldo, cuando ella ya me estaba diciendo que sí.

Cuando le pregunté si no quería saber cuánto iba a ganar, ella simplemente respondió que eso no le importaba mucho, y debo admitir que sentí un poquito de envidia de que ella pueda darse el lujo de aceptar un trabajo sin importarle cuánto le pagarán por él, sé que su familia tiene dinero, no tanto como la familia de Zara, pero viven bastante cómodos y por lo tanto a Sophia no le interesan esos asuntos tan banales que son los que mantienen despiertos a pobres trabajadores como yo, que viven luchando para alcanzar el final de mes.

Sophia llegó el miércoles a la empresa para firmar su contrato y decir que Zara estaba furiosa es quedarse corto, cuando James llevó a Sophia a su oficina para mostrarle orgulloso que había podido cumplir con sus órdenes en menos tiempo de lo estimado, Zara simplemente asintió hacia ellos, le dio a Sophia la bienvenida a la compañía y me dirigió una mirada severa antes de volver a su trabajo.

Pero, siendo el idiota que a veces soy, no pude evitar que se me escapara decirle a James sobre la inauguración del restaurante en frente de Sophia, tenía la esperanza que James quisiera ir con su esposa para así apoyar a la madre de Lucy, pero no sólo él se rehúso cordialmente alegando que no tenía niñera en este momento, sino que Sophia se emocionó y básicamente se autoinvitó a ir.

Sé que nada bueno saldrá de esto, lo sé en mis huesos, especialmente después de ver la reacción de Zara con la llegada de Sophia.