Miss CEO (Versión en Español)

CAPÍTULO CUARENTA Y CUATRO

TOM

Las cosas han estado tensas en la compañía, al parecer algo malo sucedió con el asunto del incendio y ahora está la policía involucrada, lo cual significa que esto debe ser algo muy serio, y en lo único en lo que puedo pensar ahora, es en lo mal que lo debe estar pasando Zara en este momento, y el tremendo estrés que seguramente estará sufriendo, quisiera poder hacer algo para ayudarla, pero no sé qué tan conveniente sería eso, y más teniendo en cuenta lo que pasó esta mañana en la puerta de su oficina.

Cuando la escuché hablando con ese tipo, que aunque ya no me cae tan mal como antes, igual tampoco quiero que se acerque mucho a Zara; la rabia empezó a crecer en mí cuando la escuché diciéndole “Dom” y planeando verse con él más tarde, realmente no podía creer que después de lo que pasó ayer entre nosotros, ella estuviera haciendo planes para verse con su ex, pero claro, los celos me cegaron y no pude atar cabos en ese momento, ni entender con claridad la situación, si no fuera por la rabia que sentía, hubiese sabido que su llamada a Dominic tenía que ver con la reunión a la que fue llamada tan temprano esta mañana y no con algo personal, ni mucho menos romántico.

Sin embargo, mi rabia sólo aumentó cuando ella me pidió que no me acercara a su oficina por el momento y no me explicó por qué, aunque en su defensa sí dijo que me contaría todo después; intenté calmarme un poco antes de volver a mi puesto de trabajo, y tan pronto como llegué al piso en donde se encuentra la división de programación web, me llevé una sorpresa enorme al ver unos cuantos policías en compañía de James, quien parecía estarles explicando algo, especialmente al tipo que no tenía uniforme y que claramente es un detective.

En ese momento las cosas empezaron a tener sentido para mí, la llamada urgente de esta mañana, la cara de preocupación de Zara, la forma extraña en que me habló, su llamada con Dominic, todo cayó en su lugar, y me sentí mal por no haberlo descifrado antes, para poder darle al menos unas palabras de animo a Zara en vez de ponerme en actitud defensiva, ella debe estar demasiado estresada con lo que sea que esté pasando y yo no debería estar añadiendo más preocupaciones a su vida.

Todos los trabajadores parecen inquietos con la presencia de la policía aquí y los murmullos se empiezan a volver ensordecedores, al punto que se me hace casi imposible concentrarme en mi trabajo, no sólo por la distracción aquí, sino porque siento el impulso de estar con Zara ahora, tratando de ofrecerle apoyo en lo que sea que esté pasando, pero sé que si ella me pidió estar alejado por un tiempo, es con justa razón; así que trato de ponerme los audífonos y poner música para acallar el ruido de alrededor para poder concentrarme en mi trabajo.

Un par de minutos después, siento que alguien me toca el hombro y volteo para encontrarme de frente con Sophia que está sonriendo y me indica que me quite los audífonos, así que me los quito y le digo “¿Hola?,” con un tono confundido, pues ella sabe que no está bien distraer a otros trabajadores cuando están concentrados en su trabajo.

“Hola, es que hoy llegué tarde y pues me encuentro con este circo, ¿me quieres contar qué está pasando aquí?” ella me dice mientras bate sus pestañas en lo que asumo es un intento de coqueteo, pero después de tantas semanas, ya me he acostumbrado a la actitud coqueta de Sophia y he encontrado formas de evitarla sin ser grosero.

“Para serte sincero, no tengo idea de qué pueda estar pasando, cuando llegué esta mañana ya la policía estaba aquí y han estado hablando con James todo el tiempo, podrías intentar preguntarle a él,” le respondo y ella mira hacia donde está James acompañado del Detective a quien parece estarle explicando el funcionamiento de un equipo.

Luego se vuelve hacia mí de nuevo y me dirige una sonrisa que muestra todos sus dientes blancos y perfectamente alineados, antes de decirme: “Sabes que no tengo tanta confianza con James, se vería raro que de repente le preguntara esas cosas, ¿por qué no mejor le preguntas tú que sí tienes confianza con él, y luego me cuentas qué te dijo?”

“No, lo siento, pero eso parece ser un asunto serio y no me pienso inmiscuir en ello, es mejor esperar a que él nos informe a todos, si es que eso es lo que él planea hacer, si no lo hace, es porque no puede, y entonces si sería mejor no tratar de meternos en esos asuntos que no nos incumben,” le respondo con un tono serio pero cordial y veo como su sonrisa desaparece, pero ella se recompone rápido y me responde con un:

“Vale, tienes razón… ya no te voy a entretener más, volveré a mi trabajo y te dejo para que te concentres en el tuyo,” me dice antes de volver a su puesto y yo exhalo con un poco de exasperación, a veces Sophia puede ponerse intensa cuando quiere algo, tiende a ser muy competitiva y se obsesiona con obtener lo que quiere, esa fue una de las razones por la que lo mío con ella no avanzó de sólo un par de meses de salidas intermitentes, bueno, eso y también el hecho de que me la pasaba comparando a todas las chicas con Zara y después terminaba decepcionado de todas porque no eran como ella, sé que no es correcto, pero no podía evitarlo.

Aproximadamente una hora después de que James ha estado hablando con el detective, ambos se ponen de pie en la entrada de la división, en el lugar donde usualmente se ubican cuando quieren dar algún anuncio importante; James se aclara la garganta, y como la gran mayoría de personas han estado pendientes de todos y cada uno de los movimientos de los policías, apenas los ven parándose junto a James, todos guardan silencio y les ponen atención, así que yo me quito los audífonos y hago lo mismo.

“Bueno, sé que muchos de ustedes se estarán preguntando qué está pasando, y por el momento no puedo entrar en detalles sobre la situación o por qué la policía va a estar involucrada, pero quiero que todos colaboremos lo más posible con ellos, cualquier cosa que necesiten o cualquier tipo de información que les soliciten, tienen que brindárselas sin cuestionamientos; ahora, el detective Müller se dirigirá a ustedes,” James dice en voz alta para que todos escuchen.

El detective da un paso al frente con una expresión seria, se nota que es una persona que no se anda con rodeos y que no aguanta estupideces de nadie, no es un tipo grande o musculoso, más bien de contextura y altura promedio, pero su expresión y su postura indican que no es una persona con la que se puedan meter; él pasa su mirada penetrante por todo el lugar, como haciendo un barrido y mira a cada una de las personas directamente a los ojos mientras habla:

“A partir de hoy se estarán llevando a cabo entrevistas a todos y cada uno de los trabajadores de esta compañía, empezando por lo que se encuentran aquí reunidos en este momento, las entrevistas serán individuales, esto no implica que estén incursos en alguna investigación… por el momento, tampoco es un interrogatorio criminal, no es necesaria la presencia de un abogado, pero los que no se sientan tranquilos sin uno, entonces pueden llamar su abogado de confianza, así mismo, los que no quieran llevar a cabo la entrevista, no se les forzará… aún, pero si serán tenidos en cuenta como poco colaborativos y por lo tanto, objetos de sospecha; me ubicaré en la sala de juntas que se encuentra al final del pasillo y el agente Ramírez los estará llamando uno a uno,” él dice mientras señala al agente de policía que se encuentra a su derecha.

Inmediatamente se extiende una ola de murmullos inquietos por todo el lugar, las personas parecen sorprendidas y algunas incluso se ven asustadas, lo cual me hace pensar que en esta compañía pueden estar ocurriendo más cosas de las que se sabe, o mejor dicho, de las que Zara se pueda llegar a enterar, no he hablado con nadie de lo que sé, por obvias razones, pero al parecer nadie tiene muy claro que esto tiene que ver con el incendio de hace unas semanas; las personas parecen haber empezado a especular de qué se trata todo este asunto y veo como el detective intercambia miradas con sus agentes mientras examina la reacción de todos.

Cuando sus ojos caen en mí, noto como su mirada que ya de por sí es penetrante, se vuelve casi incisiva, como si estuviera tratando de descifrar todos mis secretos sólo con mirarme a los ojos, tengo el inevitable impulso de desviar mi mirada hacia otro lado, pero algo dentro de mí me dice que no lo haga, pues se vería sospechoso, y aunque de lo único que se me puede acusar aquí es de estar saliendo con la jefe a escondidas, no puedo evitar sentir un poco de incomodidad con lo que está pasando; hay algo acerca de los policías que hacen que todas las personas se sientan culpables o temerosos de haber hecho algo malo, aun cuando no sea así, y por supuesto que yo no soy la excepción.

Finalmente la mirada del detective se desvía de la mía hacia mi lado, y veo que se inclina levemente hacia el agente de su derecha y le susurra algo, luego da media vuelta y se dirige hacia la sala de juntas, el agente de policía asiente e inmediatamente se empieza a dirigir hacia donde estoy sentado, mi corazón se acelera, mis manos empiezan a sudar, y mi cabeza me grita que me calme porque no tengo nada que temer, pero es imposible hacerlo cuando siento que de alguna forma me he convertido en el blanco de un detective que acabo de conocer hace unos momentos.