Ezra comenzó a mover los ojos y unos segundos después se despertó. - Buenos días. - Necesito dormir un poco mas.- dijo soñoliento. - ¿Quieres ir a la cama?- toqué sus mechones rubios. - No, me quedaré aquí, en un rato llega Sophie, es la señora que limpia y cocina. Dile que no comeré aquí. - Esta bien. – me quedé observándolo, ¿Qué se supone que tenia que hacer yo todo el día? - Esta tarde vienen unos amigos, solemos reunirnos aquí todos los lunes. - ¿No vas al trabajo? - Estoy muy cansado, Diane se encargará de todo. - Saldré un rato al patio. – lo dejé allí dormido, había una señora en el patio barriendo las hojas caídas, aquella debía de ser Sophie. – Hola, soy Mary Ann, Ezra dice que no almorzará aquí. La señora me sonrió sin entender nada de lo que yo decía, siguió