Mi vampiro malvado

Episodio 11

Abrí mis ojos de apoco al escuchar el sonidito del teléfono recibiendo mensajes. Estiré mi mano para alcanzar mi móvil y ya que lo tenía pegado a mi cara dentro de la sábana, vi que tenía un mensaje del grupo de conversación de Leila, Sofi, Leo y Chris.

Leila:

¡Hoy vamos a hacer una fuga!

Sofi:

Pero... ¿Y las clases?

Leila:

¡¡De eso se trata la fuga, de no tomar clases!! ¡¡Por favor vamos!! ¡¡Stef!! ¿Qué piensas?

Chris:

¡Yo digo que sí!

Sofi:

Bueno, una vez al año no hace daño

Leo:

Yo me apunto ¡Falta Stef!

Leí su conversación, bueno traté porque mi vista no es la mejor.

Con que fuga. No sé si ir sea la decisión más acertada. Cinco adolescentes en cualquier lugar sin que nadie más lo sepa.

"¿Si quiera eres una adolescente?"

Supongo que al estar en el último año de la escuela ellos quieren crear recuerdos bonitos para contar en un futuro sobre las aventuras de su último año.

"No salgas sola nunca. Esto es real" Las palabras de Josh me vienen a la cabeza cuando empiezo a escribir el mensaje en el chat.

Bueno, no iría sola, iría con cuatro personas más, sola no.

Estaré bien.

Stephanie:

Me apunto.

Al minuto oí mi teléfono sonar de nuevo.

Leila:

Pues ya está, nos reunimos en el auto de Leo para irnos al lago, así que chicas lleven su traje de baño! :D

¿Un lago? creo que nunca he ido a un lago.

Me levanté de mi cama y fui al armario. Tomé mi ropa y mi único traje de baño.

(...)

Bajé las escaleras para encontrarme con Lucia Margot-mi madre- parada en la puerta con el uniforme de su nuevo trabajo con un café en su mano parada al lado de la puerta mirando el reloj impaciente.

-¡Al fin niña! Vámonos que llego tarde- dijo rápido que me vio, abrió la puerta y salió de la casa, yo seguida de ella. Cierro la puerta de la casa y luego entro al coche.

La conductora manejo un poco más rápido de lo normal.

(...)

-Mamá déjame aquí-

-Pero si falta para llegar a tu escuela-

-Solo falta un poco, no tienes que dejarme en la entrada siempre, no te preocupes- le dije mientras le besaba la mejilla y abría la puerta del auto para salir de allí. Esperé a que se marchara para ir a el auto de Leo.

Vi a mi madre alejarse por la carretera y me acerqué a donde estaba estacionado el auto de Leo. Abrí la puerta de atrás y vi a Leo en el asiento de conductor, Leila en el copiloto, Sofi atrás y Chris también. Solo faltaba yo, lo cual me tocó al lado de Chris.

"¿No ibas a salir con el?"

Él no ha mencionado nada así que no ha pasado.

-¡¡HOLA!!- gritaron todos al unísono.

-Wow, si que están animados por esto- dije montándome en el auto.

-Siii!!- dijo Leila.

-¡Bueno vámonos ya!- le dije a Leo dándole en el brazo.

(...)

El camino ha sido agradable. Ya llevamos como treinta minutos desde que nos adentramos al bosque. Para ser sincera ya me estoy poniendo nerviosa, nos estamos adentrando mucho al bosque, tanto como para que mi tranquilidad mental se esté alterando.

-Llegamos- dijo Chris apuntando hacia adelante. Miré hacia donde apuntaba y se podía notar un enorme lago, era hermoso, pero a la misma vez daba miedo con toda la neblina del bosque, lo que me lleva a preguntar...

-¿Hay animales aquí?-

-Si, pero no son peligrosos, rara la vez que te encuentras con uno, tranquila- me dijo Sofi bajándose del auto.

-¿Pero por qué te estacionaste? falta todavía para llegar al lago- dije.

-Porque el resto del camino es un terreno movedizo, solo un poco, pero no me quiero arriesgar- me dijo Leo, yo asentí.

Nos bajamos del auto y tomamos nuestros bultos, ya que ahí teníamos nuestro cambio de ropa y otras cosas y empezamos a caminar.

-Stef ten cuidado por donde caminas que es muy peligroso- me dijo Chris tomándome del brazo, al instante sentí mi rostro caliente.

-Gracias- le sonreí y miré para otro lado inmediatamente.

-¡Chris! ¡ven aquí! ¡¿qué es esto?! ¿por qué metiste esto en mi mochila?- dijo Leo gritándole a Chris. Chris me soltó para ir donde Leo, lo cual agradecí con el alma.

Los demás estaban caminando a paso más rápido que yo, por lo cual yo estoy un poco más atrás que los otros.

La verdad el bosque era hermoso, pero tenebroso. Me imagino que es porque estamos muy profundo en el bosque. Habían muchos arboles y un poco de niebla.

~Crick~

Giré mi cabeza bruscamente para mirar detrás de mi, pero no había nadie.

Por un momento me pareció haber escuchado un ruido, como pisadas detrás de mi, pero no hay nadie.

Será mejor apresurar el paso y alacanzar a los demás, no quiero quedarme sola.

(...)

Todos estábamos dentro del lago, pero yo estaba bastante cerca de la orilla ya que no sé nadar y si me iba a lugar donde no tenga un apoyo, me podría ahogar.

-Stephanie ven- me llamó Leila, pero rechacé su oferta negando con la cabeza. Ellos estabanun poco más retirados que yo y no quería arriesgarme a que fuera una zona onda.

Veo como Chris se sumerge en el agua y nada hacia mi, pero no sale a la superficie. En vez de verlo, siento como me sube a sus hombros y cuando sale a la superfie yo me levanto sin tocar el agua.

-¡Chris no! ¡Chris, en serio no!- grité al notar sus intenciones al nadar hacia adelante donde estaban los demás.

-¡Chris, por favor!

Demaciado tarde, sentí mi cuerpo chocar con el agua helada del lago y mi corazón dejó de latir por segundos. Sentía como me hundía en el agua y no podía llegar a la superficie, era una zona onda, muy onda. Mientras seguía cayendo el aire me empezaba a faltar, la vista se me nublaba. Sentí unas manos agarrándome de la cintura y llevarme a la superficie.

-¡DIOS! ¡Stephanie! ¡Reacciona! ¡Perdóname por favor!- sentí una voz a lo lejos, creo que era Chris.

-¡Stephanie! ¡Stephanie! ¡¡Reacciona, por favor!!- sentí que decía Sofi desesperada.

Ya estaba volviendo a la realidad. Abrí los ojos y vi a Chris sujetarme en sus brazos, Sofi arrodillada a mi lado, a Leila y Leo gritándole a Chris.

Me giré hacia al lado para toser y vi como de mi boca salía un poco de agua.

-¿Estás bien? ¿Como te sientes?- me dijo Leila a mi lado.

-Bien, tranquila-

-Stephanie por favor perdóname, no sabía...- lo interrumpí.

-Tranquilo, no pasa nada- dije sonriéndole y parándome del piso. Cuando me paré me tambaleé un poco, lo cual hizo que Leo me sujetara de la cintura.

-¿Segura que estás bien?- me preguntó Sofi.

-Sí tranquila, solo siento dolor de cabeza, pero creo que traje unas pastillas conmigo- dije caminando hacia la mochila, la abrí y busqué las pastillas, pero no estaban. Creo que las dejé en el auto, tal vez se cayeron cuando estaba buscando mi celular- Las pastillas se me quedaron en el auto- dije algo desanimada.

-Te acompaño- se ofreció Chris.

-Tranquilo, no hace falta, puedo llegar sola, además no esta tan lejos- le dije- Leo, solo dame las llaves- él las saco de su bolsillos y me las lanzó.

-¿Estás segura que puedes llegar y regresar bien?- preguntó Leila.

-Sí tranquila- dije ya caminando hasta mi destino.

La verdad es que tenía una punzada en la cabeza y me sentía agitada.

El corazón me iba a mil, ya me había alejado un poco de donde estaba. Creo que fue mala idea venir sola. No pensé que estuviera tan lejos como para perder de vista a los demás. Debí pensarme mejor el querrer venir sola.

~Crick~

El sonido de nuevo. Podía sentir como caminaban detrás de mi. Giré rápidamente la cabeza y esta vez sentí que me tapaban la boca y los ojos.

Empecé a gritar, pero la persona que estaba sujetándome estaba tapándome la boca con una especie de paño.

¿Por qué no acepté que me acompañaran en primer lugar?

-Dulces sueños- dijo un hombre y al segundo quedé inconciente, profundamente dormida.