Clementina Quinn La mirada filosa e intensa de Alex me atraviesa por completo, luego de que a Jack se le ocurriera la grandísima idea de decir la palabra “Cita” en conjunto conmigo. Sí, me ponen loca los celos posesivos de Alex pero…también me comienza a dar miedo por la vida de Jack. Tengo que dejarle claras mis intenciones a este chico antes de que Alex deje de retener su impotencia delante de todos y se deshaga de quien me acaba de hacer cosquillas penosas. ─Jack, las hamburguesas ─pronuncio esperando a que eso le haga entender el que se vaya detrás de la cocina. ─Oh, sí, disculpen. Ya se las traigo ─comenta Jack quien me da un beso sonoro en la mejilla para irse. «Maldición» Los ojos de Axel ya no son celestes ahora está produciendo fuego, al rojo vivo mientras aprieta con fuerz