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—Es todo lo que tengo —dijo el experto en hackear información, quien siempre hacía el trabajo sucio y más difícil para Erick. Le tendió un sobre de papeles mientras miraba nerviosamente a todas partes, a pesar de que ambos estaban dentro de un auto—. No pude profundizar más. No sé de dónde sacaste a esa mujer, pero es casi imposible dar con ella.
—Buen trabajo —Erick sacó un sobre con dinero de la parte interna de su saco—. No me sorprende en lo absoluto. Es la "sin nombre".
Le entregó el sobre al hombre, quien contó el dinero, asintió y, tras mirar cautelosamente a su alrededor, salió del auto de Erick.
Este se quedó solo en el coche, observando el sobre de papeles como si fuera una bomba. Con una mano en la barbilla y zapateando irritantemente el suelo del auto, pensaba si debía
