Expresando sentimientos No todo el tiempo podemos reprimir lo que sentimos y en ese instante, después de enterarme de aquel oscuro secreto, deseaba con locura perderme en sus brazos. —Bueno, pero sería más interesante si dejamos de hablar de ese tema y me cuentas ¿Cómo va tu vida? —Quise cambiarle el tema de conversación para tener una charla más íntima e irla conduciendo a donde la quería llevar: a la cama. —Pues si, me parece bien. Mi vida creo que va progresando, cada vez veo más cerca mis objetivos y considero que soy una mujer afortunada porque tengo salud, el amor incondicional de mi niña. Uno que otro amigo que se preocupa por mí, mi familia aunque esté muy lejos siempre me hace saber lo importante que soy para ellos. ¡No puedo pedir más! Y ¿Tú cómo te sientes? —No tenía duda d