Un exigente contrato —Si por algún momento fue muy emocionante. Puse todo de mí pero tus objetivos estaban muy altos, además ésta “vieja acosadora” tiene planes de dejar que pase el tren porque el boleto del pasaje se me perdió y no sé en qué momento. Tal vez fue mientras esperaba que un pollo se asara. Usted tiene muchas cosas que poner en orden, y justo ahora con las emociones alborotadas no debes tomar decisiones. Te harías daño y yo también terminaría lastimada, así que prefiero que sigamos siendo muy amigos. —Aunque su boca estaba expresando una negativa, su lenguaje corporal decía todo lo contrario, así que iba a insistir —Lamento mucho haber usado esa frase, uno como hombre a veces dice muchas babosadas y esa fue precisamente la más grande. Pero perdóname que de verdad me arrepien