Marina. Llega el sábado y al fin vamos a la fiesta de la mamá de Michel, la verdad que no sé como están las cosas entre ellos porque no volví a pregunta ni él me dice nada sobre eso, no quiero meterme mucho ni darle consejos que yo no tengo idea porque no sé como es la relación entre madre e hija, y no debo decirle que hacer con sus sentimientos, es como que los estoy refrenando, si esta enojado con su mamá que lo este libremente, el sabrá que hacer después. —Estas bellísima. —Gracias. —me miro al espejo viéndome en el vestido n***o corte recto, pero me acentúo la cintura con un cintito y es sin manga, pero no de tirita fina sino anchas hasta los hombros, con unos zapatos cremitas con a penas taco—. Aun no sé que hacer con mi pelo. —Tan largo que lo tienes. —me llega a la cola de lo la