Lady Bettine frunció el ceño. —¿Al lugar de donde proceden?— preguntó—. ¿Qué quieres decir con eso? —He estado pensando dónde podría llevarte. Ahora tú me has dado la respuesta. —¿Y cuál es? —Bahréin, en el Golfo Pérsico. Lady Bettine quedó tan sorprendida que le quitó los brazos del cuello y se echó hacia atrás para observarle. —¿Qué me estás diciendo Selwyn? No te entiendo. El Marqués le rodeó el cuerpo con un brazo y la sentó en el sofá. —Escúchame— dijo él—, no hay ninguna razón por la cual debamos permanecer en este clima infernal y además yo quiero enseñarte el Halcón del Mar. —¿Tu yate?— exclamó Lady Bettine al reconocer el nombre—. Oh, Selwyn, ¿estás pensando en llevarme al sur? —Te voy a llegar al sol!— afirmó el Marqués . Aquello era lo que Lady Bettine más había desea