CAPÍTULO 7. ANTONELLA SALVATORE TENGO NOVIA —Salimos de la oficina, bajamos al estacionamiento donde está el auto de Emiliano, suelto un suspiro al recordar lo que pasó hace unos minutos allá arriba, lo que él me hace sentir y las nuevas emociones y cómo reacciona mi cuerpo a su toque. Nunca he estado con ningún hombre íntimamente, quiero llegar pura al altar, ¡no sé si pueda lograrlo, ya que esta manera que reacciona mi cuerpo, cada toque, cada vez que me besas, ¡Dios! No sé si pueda resistirme. —¡Antonella!, ¡Antonella! ¿Qué te pasa? ¡Esta pérdida en tus pensamientos! —Disculpa, me distraje por un segundo, me decías. —Sube al auto hermoso. —Sí, sí … Gracias. Salimos del estacionamiento, él toma mi mano y siento y frío que recorre mis piernas y se instala en mi vientre. Me pong