KATRINA Elliot me había pedido varias semanas atrás que fuera a conocer a sus padres, no sé por qué motivo me dio mucho miedo hacerlo, quizá solo porque ya sería más formal nuestra relación, o tal vez porque puede que sus padres me consideren poca cosa para su hijo. Es obvio que no nací en cuna de oro como él, mis padres tienen algunos negocios donde no les va nada mal, pero nada que ver con el mundo de Elliot. Es por eso que me negué rotundamente, en esa ocasión, peleamos muy feo, puesto que Elliot pensó que únicamente me encontraba jugando con él, cuando conoce a la perfección mis sentimientos hacia él, después le tuve que explicar por qué no quería ir a conocer a sus padres y pareció entender, lo que jamás imagine es que me tendría una trampa. Cuando me invito para acompañarlo a la c