No podía creer que nuevamente había caído ante los brazos y seducciones de Alexei, tampoco el hecho de que por primera vez se estuviera permitiendo disfrutar de las aun nacientes descargas eléctricas de su entrepierna recostada en el enorme y fornido pecho del ruso, lo que no sabía era que esa sensación era tan extraña para ella como para él, quien al finalizar de saciar su libido echaba a las mujeres de la recamara y terminaba durmiendo solo. Ambos estaban viviendo por primera vez la experiencia del contacto mas que solo físico, aceptarlo sería difícil, pero los sentimientos del uno hacia el otro ya nacían en sus interiores. Luego de la declaración del ruso de las razones que lo inclinaron a golpear hasta dejar inconsciente a Connor, alargo su mano hasta el trasero de la Regina levantand