Los llantos de ese niño retumbaron en todo el lugar, lo hicieron tan fuerte y contundente que no hubo duda de que un verdadero heredero había nacido. Los hermanos fueron criados sin distinciones, haciendo énfasis en que ambos serian quienes liderarían ese país y en el momento oportuno se les informaría de la procedencia de su madre, de su sangre, de su linaje y de lo que por nacimiento les correspondía, lo que no esperaban era que en el camino hacia obtener aquello que su madre consideraba suyo se toparían con una pared inmutable, resistente y poderosa. Al tener a su hermoso niño en los brazos volvió a recordar ese día en el que llego a Londres llena de moretones y con su hijo casi muerto en su vientre. °°° Se acurruco en el piso por la sensación de miedo, le tiro unos documentos y la o