Julieta El olor de la materia fecal inunda el ambiente, sé que estoy llena de guano en mi espalda y cabello, no creo que sea capaz de sacarme ese olor tan fácil, quizás si me bañaba una seis veces o me lavaba con algún desodorante poderoso lograría sacar el olor por completo. Denisse por su parte comenzó a hacer arcadas, sus manos empujaron mi cuerpo un poco más adentro mientras se levantaba con cara de asco y se alejaba del hedor que había gracias a mi caballo, porque sí, juntaban todo en un sector para luego usarlo como abono, así que no era un poco de popo, era mucha popo de caballo. En fin, el pequeño saltamontes me empujo un poco más adentro, lo que hizo que mi cuerpo se hundiera mientras ella salía de encima de mí, maldije internamente y ella se fue a una esquina a vomitar, creo q