Vuelta a Clases

Capitulo 3

-¡Ya voy! -algo fastidiado camine hacia la puerta principal y la abrí. Una morena estaba del otro lado en su celular.

-Hola -alzó la vista rápidamente, con una tímida sonrisa.

-Hola, soy Khristel vengo por el aviso del departamento.

-¡Oh!, perfecto adelante entonces -me hice a un lado de la puerta para dejarla pasar.

-Gracias -al entrar comenzó a mirar detalladamente la casa -¿Vives soló? -me miro.

-No.

-Hahah me lo esperaba, esta muy bien cuidado el departamento.

-¿Quieres decir que los hombres somos unos desordenados?.

-Para nada, solo que por un momento me pareció extraño que un hombre cuidara tanto su casa.

-Si cuido mi casa.

-Bien por ti, ¿Puedo ver las habitaciones?.

-Si, con confianza -la chica me lanzo una ultima mirada para desaparecer por el pasillo, mi celular comenzó a vibrar, lo tome del mesón y conteste.

-Amor, estoy a cinco minutos, ¿Ya ha ido alguien por la casa o nada aún.

-Si, acaba de llegar una chica a verla.

-U...¿Una chica dices?

-Si, celosita.

-Caleb Thomas Miller cuidadito! -solté una carcajada comencé a caminar a la habitación donde se encontraba la chica, me pare en el marco de la puerta. Esta miraba por la ventana que estaba frente a la puerta.

-¿Por que tan celosa?, no are nada malo cariño -con voz juguetona y una sonrisa hable por la linea.

-¡CALEB THOMAS MILLER, me estas haciendo enfadar, quizás esa chica te acose ahí dentro solos, solo eres mio ¿Entiendes?. ¡MIO! -la chica se volteo a mirarme, para hablar.

-Te amo mi pequeña celosa, hablamos luego.

-Yo también te amo, no lo olvides nunca -cortó guardé mi celular en el bolsillo.

-Lo siento, mi novia aveces es algo....- me interrumpió.

-Todas somos así cuando amamos a alguien de verdad, no te preocupes. Me gusto mucho la decoración, la distribución de los muebles, todo. ¿Habría forma de vender el apartamento tal como está?.

-Si, de hecho era la mejor opción, pero ya sabes hay gente que no les gusta comprar casas amuebladas enteras por el hecho de que tienen ya sus propios muebles.

-Hahah, te entiendo. Pero la verdad es que vivo con mis padres y ando en busca de mi propio hogar, me es mucho mas fácil comprar así, por que solo cuento con mi cama y algunos muebles de ropa -reímos- pero esta bien así -salió de la habitación rozando mi brazo, camino hasta la otra habitación.

-Ese es el baño -entró y reviso todo, luego de fue a otra de las habitaciones.

-¿Cuántas habitaciones hay?

-Tres, pero una se modifico para sala de gimnasio.

-¡Me encanta!.

-¿De verdad?.

-Si, me e enamorado de tu apartamento, la vista que tienen los ventanales, absolutamente todo.

-Genial, entonces podría decir que eres una posible afortunada de tener todo esto.

-Claro que lo seré -entró a la ultima habitación, de gimnasio. algo despistado mire por el gran ventanal de la habitación por un buen rato, supuse que Khristel había terminado de ver el apartamento pero no fue así, estaba sobre una maquina de esas para las piernas, algo inclinada diría yo. Carraspee para que notara que estaba presente pero no me tomo importancia, en cambio mi vista no se poso en lo que estaba haciendo, sino mas bien se fijo en su trasero, que no estaba nada mal. Se notaba que le gustaba el gimnasio por el cuerpo que tenia.

-Genial, con esta maquina, ya no habrá necesidad de que vaya al gimnasio a la vuelta de mi casa, ahora podría tener el gimnasio aquí mismo.

-Es una ventaja.

-Por su puesto -escuché como la puerta principal se cerraba. Trate de mirar mi celular en vez de su trasero, y me resulto bastante bien. Segundos mas tarde Hai entro a la habitación con una espléndida sonrisa, pero desapareció en el momento en que vio a Khristel sobre la maquina.

-Definitivamente me quedare con el apartamento.

-Hola -Hai hizo presencia en la habitación, la chica salto sobre la maquina y se acerco a nosotros rápidamente.

-Yo lo siento, es que me encanta esa maquina. Soy Khristel.

-Ya lo veo y yo soy Hailee.

-Mm... Me gustaría hablar acerca de los tramites de la casa, pues me gustaría quedármela.

-¿Es enserió? - Hai, nos miro a ambos.

-Si, y ams los muebles igual si no es molestia, Caleb me dijo que podía ser así.

-Si claro, nosotros queremos venderla lo antes posible.

-Genial entonces, solo queda por hacer los tramites.

-Los de la casa están todos hecho, y autorizada para venderse, nos encargamos de eso ayer por la tarde con Hai. Solo nos faltaría pasarla a tu nombre y ya estaría todo listo.

-Entonces, ¿Cuándo nos podemos juntar para esos trámites?.

-Mañana, mañana estaría bien.

-Amor no crees que es muy pronto, recuerda que tenemos hasta el martes.

-Si cariño, pero cuando compres una casa a tu y la pasas a tu nombre, tienes que esperar tres días para poder cambiarte. Esos tres días que ambos pasaremos aquí para aprovechar de salir.

-Disculpen, se que no es de mi incumbencia y todo eso pero, se irán de la cuidad o piensan cambiarse a una casa mas grande.

-Nos vamos a Los Ángeles, entro a mi ultimo semestre este martes.

-Oh, ya entiendo.

-¿Quieres algo para tomar?. ya sabes debemos conocer a la futura dueña de este hogar -Hai camino hasta fuera de la habitación.

-¿Para alojarlos cuando vengan de viaje dices tu?, claro que quiero -Ambas rieron y salieron de la habitación rumbo a la cocina. Al parecer se están llevando bastante bien, y pues yo. Simplemente me fui a la habitación, no simplemente para excluirme, tenia la gran duda desde hace dos días atrás, de que sera de Amy, ¿Vivirá en Los Ángeles aún?, ¿Estará en la misma casa?, y los mas importante ¿Será la misma de antes?, aun que ya veo que no, por lo que me dijeron los chicos.

Entre a i********: y la busque por su nombre, y nada. busque en historial, estaba de las ultimas, entre a su cuenta pero...¡ Dios esta privada!, no podía pasarme esto ¿Cierto? dude un momento en si mandar la solicitud de seguimiento o simplemente dejarla ahí. Se que no tenia que estar haciendo nada ahí, pero la curiosidad me estaba comiendo, quería ver si había cambiado alguna de sus facciones o si estaba mas delgada, o mas gorda, o si seguía igual, si tenia novio o no. Pedí la solicitud, y me quede ahí, moviendo mi pies sobre el colchón, esperando a que si diera alguna señal, pero nada pasaba. Pasaron cinco minutos desde ese rato, Hai había venido a avisarme que la cena estaba lista y que Khristel se quedaría a cenar con nosotros y no me lo esperaba la verdad. Pero ahs Amy de señal, vencido me pare de la cama para salir de la habitación, pero mi celular sonó y el nombre de Amy se alumbro en el costado de arriba de la pantalla.