Obsesión

Capítulo seis

Hazel

Había llamado a mi mamá antes en mi camino de regreso de J&R Corp, había reprogramado mi cena con ellos, también quiero darles la noticia de que obtuve el trabajo, lo cual, por cierto, todavía me sorprende. Cuando salí de la empresa con Nicole a mi lado, haciéndome una serie de preguntas, hice todo lo posible por responder de la manera más profesional posible, sabiendo muy bien que una palabra de esta mujer es suficiente para quitarme el trabajo recién adquirido. Aunque con la forma en que mi diablo n***o, que terminó siendo mi jefe, me contrató, no estoy seguro de que me despidan fácilmente, bueno, no esperemos que eso suceda.

Olvidé la idea de que era Richard Jones, comencemos con el hecho de que era más guapo de lo que cualquiera hubiera pensado, incluso mejor que su hermano Dylan. Me pregunto por qué nunca aparece en público, tal vez sea para asustar a todos como me asustó a mí hoy. Dios mío, ¿cómo podría ser Richard Jones la persona que conocí en el ascensor? Aunque me dijo que había seguido con el acto porque era divertido y estoy enojada porque me hizo eso, pero no olvidemos el hecho de que es posible que me contratara por cómo actué a su alrededor en el ascensor lo cual todavía es un poco extraño ya que no dije nada sobre el trabajo que sea lo suficientemente grande como para ganarme el trabajo. Pero, por cierto, obtuve el trabajo significa que obtuve el trabajo, ahora déjame tener unos minutos para gritar por el hecho de que soy la secretaria de Richard Jones. ¡¡¡Ay Dios mío!!!

El taxi se detuvo frente a mi casa bajé y pagué, entrando corriendo al edificio y al ascensor, necesito enviar una carta de renuncia a mi trabajo anterior en línea antes de ir a la casa de mi familia para cenar con ellos. Además, necesito retirar el dinero que le prometí a Timmy; ojalá me paguen antes de que se acabe. De pie frente a mi casa, ingresé mi llave y abrí la puerta, solo para detenerme sorprendida por lo que estaba viendo.

-Hey nena- Sean, mi novio salió de la cocina para saludarme en medio del caos, elijo llamarlo caos porque lo que estoy viendo no es lo que esperaba. Hay cintas de cumpleaños colgando de las paredes, un pastel de chocolate a medio comer en la mesa con las migas por toda la alfombra. Y ocho personas en la casa, cuatro hombres y cuatro mujeres. Había latas de cerveza vacías por todas partes, algunos líquidos derramados en el suelo que creo que podrían ser bebidas. ¿Qué demonios? Miré a Sean mientras se rascaba la cabeza torpemente al ver mi escrutinio. -Lo siento cariño, pero Tasha necesitaba un lugar para celebrar su cumpleaños, así que sabiendo que no estarás cerca, les ofrecí que se quedaran aquí. No estabas destinada a ver esto; esperábamos limpiarlo antes de que regresarás. ¿Por qué volviste tan temprano de todos modos?

Lo miré fijamente a él, a sus amigos y a la Tasha que es la celebrante, estaban sonriendo, no sé por qué, ¿tal vez esperando que dejara mis archivos en el piso empapado de bebida y me uniera a ellos? Respiré hondo, contando de diez a uno mentalmente para calmarme, he tenido un buen día, no quisiera que nadie me lo arruine. Cuando siento que me he calmado lo suficiente, miré a mi novio -por favor, limpia este lugar-.

-Lo haremos, lo prometo, tiene mi palabra- dijo.

Lancé otro suspiro y caminé a través del desorden, lanzando -feliz cumpleaños Tasha- cuando la pasé y entré en mi habitación. Me tomó toda mi fuerza no cerrar la puerta de un portazo. Dejé mis archivos en la cama y pasé mi mano por mi cabello, liberándolo de la cola de caballo que tenía puesta. Me quité las gafas y las dejé caer sobre la cama, lista para quitarme la ropa cuando me acordé de la gente en mi sala de estar. Rápidamente corrí hacia la puerta y eché el pestillo, luego volviendo a la cama, me quité la ropa. Sin nada más que sujetador y bragas, saqué mi computadora portátil del tocador y la encendí. Luego, abriendo mi pantalla de Microsoft, comencé a escribir mi carta de renuncia.

Una música a todo volumen llenó la casa poco después y miré la puerta en estado de shock, ¿qué diablos? Podía escuchar sus risas y diversión en medio del ruido y tuve que contar de nuevo de diez a uno. Volví a mirar mi computadora portátil, obligándome a concentrarme y fue lo más difícil de hacer con un ruido tan fuerte y una risa que se sumó a mi dolor de cabeza. Finalmente lo logré y envié la carta, luego busqué en línea cualquier cosa que pudiera ayudarme sobre mi nuevo jefe. Puede que haya oído hablar de él desde que era adolescente, pero nunca me he molestado en buscar sobre él. Al hacerlo, me di cuenta de que había fotografías de él, pero eran muy pocas y la mayoría eran de noche, con los deslumbrantes flashes de las cámaras de los reporteros.

Había una foto de él de pie en el podio, creo que debe ser una reunión de conferencia o una fiesta, no lo sé, pero parecía estar dando un discurso. Hice zoom en la imagen y lo miré bien, no tuve tiempo suficiente para mirarlo tanto como quisiera en el ascensor y no podía mirarlo cuando estaba sentado frente a mí en la oficina y al entrevistarme, tuve que superar la conmoción de que él fuera Richard Jones antes de hacer eso.

Su cabello n***o brillaba en la imagen y podía ver la intensidad de lo que estaba diciendo en sus profundos ojos marrones, no había nada cálido en el hombre excepto su mirada asesina que calentaría a cualquiera que lo mirara, como si me estuviera calentando ahora. . No dejé de notar cómo su traje de aspecto caro perfeccionaba su cuerpo; en realidad, el cuerpo del hombre está hecho para adaptarse. Recordé cómo el n***o que llevaba hoy lo felicitó tanto, no me tomó un segundo darme cuenta de que el traje que llevaba en la foto era n***o, así como la mayoría de las pocas fotos de él, parece que el hombre está obsesionado con los trajes negros.

Negué con la cabeza y apagué mi computadora portátil, no necesito volver a mirar al hombre, lo vería más a partir de mañana después de todo, solo espero poder guardar mis fantasías para mí. La risa fuerte de mi novio me recordó lo que estaba pasando en mi casa. Necesito un descanso; No podré descansar bien con ese ruido en mi oído. Agarré mi bolso y saqué mi teléfono, mirando la hora, eran las cuatro menos tres. El arreglo era cenar con mi familia a las seis, pero no veo nada malo en ir temprano. Entonces, decidiendo eso, me levanté de la cama y corrí al baño para darme una ducha rápida. Cuando salí, me vestí con un jean y un jersey de cuello alto de manga larga, agarrando mi teléfono y mi bolso. Abrí la puerta, miré a la gente haciendo el tonto en mi sala de estar y negué con la cabeza, ignorándolos mientras me dirigía hacia la puerta.

-Oye cariño, ¿a dónde vas?- Sean preguntó, tratando de alcanzarme.

-A la casa de mis padres, volveré después de la cena- le dije, sin molestarme en mirarlo mientras abría la puerta y salía de la casa.