Britney
Me desvío un momento de mi camino para ir a oncología, mis pies se movieron por el pasillo hasta llegar a la habitación donde se encontraba el señor Lin esperando lo que sería su deceso, había hablado con los médicos y no había nada más para hacer, el cáncer se había prepagado por todos lados y solo era cuestión de tiempo.
Mis ojos dieron con los suyos mientras mis labios se curvaban en una gran sonrisa, revise su historia clínica y me acomode un rato en la silla a su lado para verlo.
— Me han dicho que es todo un don Juan y que las enfermeras están fascinadas con usted.
No mentía, el sujeto parecía ser todo un caballero brillante de armadura, solía hablar con una elocuencia y era tan respetuoso que se peleaban por atenderlo. Al parecer no estaban tan acostumbradas a los buen
