23 de diciembre de 2002
Annice estaba nerviosa mientras revisaba una última vez frente al espejo que todo estuviera en orden. Aquella sería su primera cita con Daimon en prácticamente… vale, no había tiempo para comparar porque nunca habían tenido una cita.
Cuando todavía se llevaban bien, antes de aquel beso en el verano de 2001, nunca habían tenido la oportunidad de tener una cita porque -al menos ella-, solo se veían como amigos.
Un año…
Le parecía increíble lo rápido que pasaba el tiempo y lo lejano que se sentía. Habían sucedido tantas cosas en ese tiempo… que cuando pensaba en ello, lo sentía como si hubieran pasado años desde entonces.
Cambió los pendientes que llevaba por unos más finos y largos que le llegaban a la barbilla. Eran de un color plata que combinaba con su ves
