-Esto no es lo que teníamos. - El Chef esta histérico, tanto que los comensales tuvieron que haberlo escuchado. -Natalia.
-Si, señor. - Dejo de emplatar.
- ¿Usted es ciega, no vio que ese salmón no estaba listo?
-La verdad es que no me fije señor. - Cubro a Gloria que está comenzando y ella fue quien lo saco.
-Esto tendrá consecuencias. - Dice señalando a Jhonny.
-Lo siento de verdad a cualquiera se le puede pasar. - Le dice excusándose.
-Se los descontare a los dos. - Nos amenaza, pongo las manos en el mesón y respiro hondo, ese plato es mas de mi medio sueldo.
-Natalia. - Me llama Gloria.
-Dime.
- ¿No sé qué es lo que lleva esto?
-Colócales brotes. - Le digo y salgo, me voy atrás a unos jardines que podemos estar mientras descansamos.
-Natalia.
-Ahora no Jhonny.
-No, nos dejaremos cobrar ese plato. - Me dice como si fuera tan fácil.
-A no, lo que yo escuche es que sí. - Me siento y pongo mis manos en la cara.
-Hablare con el encargado del restaurante. - Está casi que se le sale el mal genio.
-Y que diremos, a no, es que sacamos un puto salmón crudo, pero no es nuestra culpa. - Ahora es el que se sienta a mi lado.
-Si los dos hablamos de que fue pleno boleo, lo entenderá.
-No lo sé, pero si me descuenta eso, yo moriré, dormiré bajo de un puente. - Me abraza, ya voy para una semana que no se nada de Martín y mucho menos de Alessandro, por correo le escribí a todos que cambie de número y Laura esta que me quita la cabeza, no le he ido a visitar.
-No será así, ya todo se resolverá, ya veraz. - Me da una palmada en mi espalda yo me quedo unos minutos más sola, terminamos la noche me voy a mi piso, lo que me extraña es que la luz de la sala esta encendida, cuando abro la puerta mi gran sorpresa.
- ¿Qué haces aquí Martín? - Le gruño, él se pasa una línea de su gran polvo blanco.
-Hola mí amor. -Se levanta y se viene a mí, me obliga a que le dé un beso en los labios lo empujó. -Así que mi novia, huye de mí. - No lo dejó acercarse.
-Martín ya no soy tu novia. - Le digo ya que le escribe por correo que ya no quería nada con él, que lo mejor era estar cada quien por su lado.
- ¿Crees que me terminarás así, por un mensaje? - Se ríe a carcajadas.
-Es mejor que te vayas, por favor. - Le gruño, Happy está ladrando muchísimo.
-Si claro que me iré, primero te dejare muy en claro, lo que te estas perdiendo.
-Por favor, Martín. - Salgo corriendo a la habitación, porque se vino encima de mí, agarra mi cabello y me detiene sentí que le quedo mi cabello en la mano, aún la herida está sensible, pone su mano en mi cara empieza a besarme obligándome, lo muerdo, me pega en la cara. -Lárgate, Martín... Le gruño voy a la cocina, Happy está mordiéndole el vaquero, igual es un cachorro y no me puede defender.
- ¿Como se llama, el que ahora te tiene en su cama? - Empieza a reírse muy burlonamente.
-No estoy con nadie. - Me pego contra en mesón, no hay más donde correr me vuelve agarrar rompe mi camisa y empieza a besarme salvajemente este drogado y su fuerza es mayor, mis lágrimas salen ya que mi mano esta que se parte por la fuerza bruta que está haciendo en mí.
-Vamos a hacerlo, te follare como la perra que eres. - Él va a uno de mis senos me tiene inmovilizada, con la mano que tengo suelta llego agarrar un cuchillo y se lo clavo en un costado, pega un grito va cayendo poco a poco se desmaya, suelto el cuchillo, mis manos están llenas de sangre, agarro el grifo del fregador empiezo a limpiarme, estoy llena de sangre, miró el departamento y parece que paso una tormenta, voy por mi bolso y una chaqueta, cargo a Happy y cierro la puerta, busco un taxi, le doy una dirección y es la primera que me viene a mi mente, lloro en todo el camino, Happy si se acurruca en mis piernas, siento mi cuerpo como un hielo, comienza a llover, cada momento en mi cabeza pasa cada escena de lo que acaba de pasar con Martin.
L.R.